kris x susie (deltarune) Una ruta diferente

juicio final

Narra omnisciente.

Dos humanos y un monstruo morado estaban en un aula, en un instituto. La humana estaba tendida sobre varias mesas que habían acomodado para simular una cama.

La humana estaba muy débil debido a los sucesos anteriores. —¿Cómo te sientes?— Preguntó el humano con un poco de preocupación.

—Un poco exhausta, y aún me duele la cabeza.— Dijo la humana mientras miraba perdidamente al techo. De repente, se escuchó el rugido de un estómago. —Y mucha hambre.

El humano soltó una carcajada ante lo que dijo ella. —Tranquila, le pediré a mamá que te haga un pie cuando te cure.

La humana agachó la cabeza ante lo que dijo el humano.

—Oye, ya te dije que no te preocupes, déjame el estrés a mí.— Dijo Kris señalándose a sí mismo. —Y, ¿cómo se siente no tener ese sentimiento de odio?

—Se siente extraño, se podría decir que siento un vacío. Espero que sea por haber tenido eso por mucho tiempo.— En ese momento, la puerta del aula se abrió de golpe, dejando ver a una cabra y una dinosauria amarilla.

—M… mamá.— La cabra no dijo, solo se quedó viendo a su antigua hija. —Y… yo, perdón, por todo.— Chara había sentido como dos brazos gigantes a comparación de ella la habían rodeado, brindando un cálido abrazo, sorprendiendo a Chara.

—¡No vuelvas a hacer eso, por poco pensé que había perdido a mi niña!— Gritó la cabra con lágrimas en sus ojos.

Después de un rato, la cabra ya se había calmado, pero ahora había un problema aún mayor. —¿Ya no hay habitaciones?— Preguntó la humana curiosa.

—No, además de que tampoco quedan camas. Una la ocupa Kris, y la otra la ocupa ralsei.— Dijo la cabra.

—Entonces dormiré con con Ralsei.— Dijo la humana inocentemente. —No hay problema, ¿Cierto?

—Supongo que no.— Dijo Toriel sin preocupación alguna. —Solo no atormentes a Ralsei como lo hacías con Asriel, ese chico es un poco más sensible que él.— Dijo con una sonrisa nerviosa.

Chara giró su cabeza un poco, evitando la mirada de su madre adoptiva. —No prometo nada.— Dijo mientras jugaba con si cabello y hacía un puchero.

La campana de la escuela sonó, indicando el ingreso de los demás al salón. Y un problema podría iniciar con eso. —Esto podría ser malo. Mamá, llévate a Chara.

—No.— Dijo Chara mientras se levantaba del suelo. —También quiero disculparme con ellos 

Kris pensó por unos momentos, ¿Realmente sería buena idea? Bueno, lo que ha de pasar que pasé. —Está bien.— Dijo Kris DETERMINADO.

En un abrir y cerrar de ojos, Toriel salió del aula, cuando eso pasó, todos los estudiantes estaban ahora en el aula.

Todos habían rodeado a Chara, poniéndola nerviosa. —H… hola.— Ahora mismo, Kris estaba recibiendo un regaño de el bufón del caos.

—¡¿Por qué está aquí, aquí?!— Preguntaba mientras Kris contenía la respiración, ya que tenía el filo de una guadaña en su garganta.

—Oye, relájate. Está bien, ya me encargué de lo que la hacia mala.— Dijo con las manos arriba en señal de rendición. —Además, ¿Por qué enojarse? No ha lastimado a alguien hasta ahora.

—De momento, momento.

—Jevil, ya déjalo, cortarle la garganta no hará gran cambio.— Dijo Seam mientras se acercaba a Jevil.