SasuNaru ~El Lado Luminoso de la Vida~

Capítulo 20

—Usted debe ser Itachi Uchiha.

—¿Hmm?

—¡Itachi!, disculpa. Le dije que no podía pasar, pero no me ha hecho caso y.....

—Está bien, Konan. No hay problema, yo le atenderé— Konan titubeo pero finalmente, con un asentimiento de cabeza, salió de la oficina.

El moreno levantó la mirada y casi escupe su café cuando vió a la persona que estaba parada frente a él. Se puso de pie y de pronto parecía más blanco de lo normal.

—U-usted....

—Parece que me conoces, no me extraña en realidad. Llevas seis años casado con mi hijo.

—Imposible— Susurró. Sus ojos y oídos no daban crédito a lo que acaban de ver y oír. Los labios de Itachi se estiraron en una sonrisa torcida. —Esto no puede estar pasando.

—Se que esto puede ser confuso, pero necesito que me escuches. Hay una explicación para todo lo ocurrido. Por favor, solo escucharme.

—Es-está bien, supongo.

Itachi tomó asiento y tomó una postura neutral. Tratando de asimilar lo que estaba ocurriendo.

—Yo nunca morí en ese incendio y las razones que fueron dadas, por las cuales fui a parar a ese hospital psiquiátrico, no podrían estar más alejadas de la verdad......

—Tú eres mas inteligente que esto. Esa es una mentira insostenible. ¿Qué crees que pasará cuando se entere de la verdad?.

Tenía un rostro sereno, pero Danzō estaba furioso. Por las estupideces de su hija acaba de perder su mas grande oportunidad para recuperar su estatus social y poder.

—En realidad no es una mentira.

Los ojos de Danzō se abrieron en sorpresa.

—¿Quieres decir que....?

—Si.

—Eres brillante, pero aún tienes un problema, no, varios problemas.

—Lo sé, pero ya estoy trabajando en ello. Sólo espera y....

—No me importan las artimañas que utilices para obligarlo a regresar contigo. Solamente quiero esos papeles en la palma de mi mano y por favor, no vuelvas a cometer otro error. Puedes irte, tengo más cosas en que pensar.

Sakura se levanto del moderno sillón LUIS XV, de color blanco, y salió con mucha elegancia por la puerta.

Le había tomado unos pocos días averiguar donde vivía Naruto, las cosas que el dinero puede hacer. El investigador privado que había contratado le fue de mucha ayuda. Cuando se enteró que Sasuke había llevado a vivir a ese Doncelucho al apartamento que él y su amigo Neji alquilaban, cuando estudiaban en la universidad, le había enfurecido tanto, que literalmente había destrozado su dormitorio.

Arrancó el auto y fijó el curso. Debía ir a un lugar en específico.

Para cuando llegó a su destino, ya había una fámula en la puerta.

—Señorita, la esperan en..

—Ya lo sé— le tiró su bolso y la fámula tuvo que ser muy ágil para no dejarlo caer al suelo, eso podría ameritar su despido inmediato.

—Me has hecho esperar demasiado.

Sentado elegantemente en el sofá, con sus brazos cruzados sobre su pecho y ojos cerrados, estaba impaciente, pues tenía mas de media hora de estar esperando a su ¿Amiga? ¿Conocida? ¿Socia? ¿Cómplice?, da igual, en realidad.