–¡Alex por dios!.–le arrojé un oso de peluche que estaba tirado en el suelo y ella se echó a reír. –ve a cambiarte mejor que Luke debe estar por venir y quiero aprovechar la luz natural.–le di una patada juguetona por el trasero mientras ella se levantaba y negué entre risas quedándome a cargo de Paulette.

Estaba entretenida con ella cuando escuché mi teléfono sonar, recordé en donde lo había dejado en la mañana y cargué a Paulette para correr a la cocina y tomar mi teléfono que estaba sobre la mesada, se me erizó la piel al ver la foto en mi pantalla y sonreí contestando de una vez.

–Hola Mike...–contesté mordiendo mi labio.

–Olive, ¿Cómo estás?.–su voz sonaba un poco preocupada.

–Estoy muy bien ¿y tú?.

–Bien...me quedé un poco preocupado la otra noche cuando te fuiste así, te llamé al instante pero me enviaba directo al buzón.

–Ah sí sobre eso, quiero pedirte una disculpa por lo de ese día, he querido llamarte pero han pasado muchas cosas estos días y no he tenido cabeza.–senté a Paulette sobre la mesada y le di una galleta que saqué de un tarro junto a la cafetera.

–No tienes nada de que disculparte, la pasé muy bien, lástima que el idiota ese arruinó todo.–hizo una pausa y luego lo escuché suspirar.– pensé que iba a golpearte o algo así.

–Yo también la pasé muy bien y sobre el idiota me alegra informarte de que ya lo eché definitivamente de mi vida.

–Me alegra escuchar eso, me alegra más de lo que crees.–sonreí como estúpida y negué para mí misma.–En fin quería invitarte hoy a un toque que tengo en un bar con unos amigos, hay barra libre hasta las doce y las chicas no pagan entrada, no tienes excusa.

–¿Tienes una banda?.–pregunté sorprendida.

–Algo así, la verdad es que como la otra noche me dijiste que te gustaba componer y esas cosas, quería proponerte algo.–escuché la puerta y supuse que era Luke, cargué a Paulette con el brazo que tenía libre y fui a abrirle. Paulette estiró los brazos hacia él al verlo y sonreí dejándolo pasar.

–Está bien, mándame la dirección y la hora y ahí estaré.–Luke cargó a la bebé pero se quedó parado en la puerta mirándome fijamente.– te veo esta noche.–esperé la respuesta de Mike y colgué guardado mi teléfono en el bolsillo trasero.

–¿Ya están listas?.–preguntó alzando a la bebé.

–Déjame ver si ya está lista Alex.–me di la vuelta para ir hacia el cuarto de Alex pero lo pensé mejor y me devolví parándome en puntillas para besar sus labios, él sonrió y continué mi camino hacia la habitación de Alex.–¿Ya estás lista?–pregunté asomando mi cabeza en la puerta.

–Sí ya estoy lista sólo me falta ponerme los zapatos.–alzó su brazo mostrándome los zapatos y asentí entrando a la habitación por completo.

–Ya llegó Luke.–ella sonrió subiendo sus cejas y reí.–Le diré lo que siento, pensé muchísimo lo que me dijiste y tienes razón, debo intentarlo.

–¡Eso es lo que quería escuchar caray! y cuando lo hagas, nada de besitos tiernos, hazle el amor salvajemente para que nunca se quiera ir de tu lado.

.....

La luz natural estaba jugando a nuestro favor porque las fotos estaban saliendo hermosas y a Alex le favorecía muchísimo, sobre todo en las fotos de primer plano, donde sus ojos brillaban demás.

Luke me estaba ayudando bastante, sobre todo con el rebotador de luz, también me aportaba ideas o le decía a Alex alguna pose que podía hacer, hicimos varías fotos en la playa. Mientras Alex se cambiaba de ropa en el jeep de Luke yo aprovechaba de tomarle fotos a Paulette, que se veía demasiado linda chapoteando en su pequeña piscina de plástico.

Youngblood | L. Hemmings ✦VOL.I✦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora