Capítulo 12: Me provocas

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William aspiró un suave olor con su agudo olfato, recordó el maravilloso sexo que había tenido la noche anterior, así que enseguida una sonrisa satisfecha de dibujó en todo su rostro. Movió los brazos percibiendo la estrecha cintura que sujetaba entre estos y al instante abrió los ojos lentamente contemplando el rostro pálido de Nathan. Otra sonrisa se dibujó en sus labios y con suma pulcredad lo estrechó aún más entre sus brazos. Percibiendo como el menor se removía entre ellos.

- Despierta dormilón -- susurró. Como respuesta observó que este se revolvía incómodo y giraba dándole la espalda--- No me gusta que me den la espalda cariño. Sé buen chico y despierta.

No recibió ninguna respuesta así que bufó levemente.

- Bebé tenemos un gran día por delante - dijo mientras besaba su cuello y hombro izquierdo

- ¿Huh?

Sonrió divertido al escuchar los quejidos suaves de Nathan

- Levántate dormilón. Tenemos que darnos un baňo- dijo mientras lo volteaba delicadamente.

La ternura despertó en su interior. Observó a un Nathan soňoliento y algo sonrojado. ¿Cuántos habrían tenido la fortuna de verlo de esta manera?. Sólo de pensarlo hizo que sintiera un grave retorcijón en las entrañas. Siempre había odiado que tocaran lo que ya le pertenecía y más si se trataba de personas con las que tenia sexo.

- ¿Qué deseas desayunar? - preguntó suavemente

- Lo... lo que sea - musitó Nathan pareciendo un bebé luchando en quitarse la pereza del sueño

- Dime lo que desees. Te complaceré en todo por lo maravilloso que estuviste anoche.

Nathan sintió como un fuerte rubor se formaba en su rostro. Recordó que la noche anterior se había entregado por primera vez a un hombre. Nadie lo habia forzado, ni golpeado, ni drogado. Se entregó al rubio por voluntad propia. No sabía si lo que sentía ahora mismo era nerviosismo o contracciones leves de alegría.

- Lo que sea - dijo mientras se acurrucaba en el pecho de William 

- Estas muy cariňoso. Me gusta. ¿Sabes algo? escucharé todo lo que desees. Así que responde. ¿Qué te apetece desayunar?

- Quiero desayunar... lo que tu desees

- ¿Seguro?

- Sí

- Perfecto - respondió sonriendo mientras cogía el  teléfono que se hallaba al lado de la cama y marcaba los números velozmente.

---- ¿Hola?. Deseo que me traigan el desayuno a la suite 206. Sí, traígan lo mejor de la carta y que sea para dos. No importa cuanto cueste, sólo traigálo dentro de una hora.

William colgó el teléfono y vió el rostro sorprendido de Nathan.

- ¿Y esa carita?- preguntó burlón

- Sin duda te encanta malgastar el dinero- susurró el menor

- Si. Y no tengo problemas al hacerlo. Soy un hombre rico y gasto desmedidamente porque gano todo con mi propio esfuerzo

- ¿Cuál... cuál es tu trabajo? 

- Estás muy curioso. Parece que agarraste mucha confianza desde anoche

Al escuchar las palabras burlezcas del rubio, Nathan quizo ocultarse debajo de las sábanas tratando de esconder su abochornado rostro.

William sonrió al observar sus curiosas acciones.

- ¿Te escondes?

- No... no 

- Vale, vale. Sal de ahí

La luz de tu amor (gay/yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora