Capítulo 23. Doblemente enamorado.

63 23 18
                                    

Mi cuerpo se tensa ante la sugerencia de mi Talía, troncón permanece fuerte y seguro de sí mismo, mi corazón bombea con instancia cada segundo que me demoro en servir la siguiente ronda de vino. Luego de hacer llenado las cuatro copas me siento algo, o mejor dicho muy nervioso, junto a mi amada. Quisiera saber sí bombonerita está tan confiada con su fiel amante o compañero de juego sexuales, como quieran llamarlo. 

Respiro profundo para activas mis sentidos. La voz de mi amor llena mis oídos y me dejo llevar por su confección.

—Me encanta Daniel por el simple hecho que le gusta disfrutar y saborear cada bocado de comida que lleva a su boca— rememora, Talía, cuando nos conocimos.

A lo que miles de deliciosos sabores toman mis recuerdos, aunque de haber sabido que bombonerita sabía, tan, pero tan bien, juro por Dios que la hubiese probado mucho antes. Relamo mis labios mientras que troncón se activa sólo con mis pensamientos.

—Adoro su espontaneidad, sus ocurrencias— ríe recordando alguna que otra travesura.

Mientras mi cuerpo responde naturalmente a su personalidad y a su ingenuidad tan propia en ella.

—La forma como mira y quiere a mi hija— continua diciendo abiertamente sin tapujo.

¿Cómo no querer a esa personita que está hecha de la mujer que amo?, me pregunto mientras troncón pone fecha a su pronta paternidad.

Talía acerca sus lindos labios a la copa para aclarar más su garganta que sus ideas, mientras mis padres están tan absortos como yo, ante tal confección. Y prosigue, —su necesidad tan varonil de protegernos— me mira con una sonrisa llena de agradecimiento.

Mientras troncón y seguramente bombonerita me apoyan ante mí necesidad de cuidar a mis dos amores. Por bombonerita no me esfuerzo mucho ya que troncón la tiene más que controlada. Nada mejor que ser un macho pecho peludo con un alto sentido de macho alfa, aunque siendo sincero eso es del lado exterior porque interiormente soy el más sumiso de todos los hombres enamorados, claro que aún no se lo dejo saber.

—La manera tan sencilla que resuelve cualquier inconveniente que se nos presenta, la paz que transmite al hablar— para este momento es Talía quien completa el líquido rojizo de la uva.

¡Claro! todo problema tiene más de una solución sencillas, por ejemplo si te gusta una mujer, ve por ella. Si quieres disfrutar de un manjar exquisito, pues no te cohíbas al sexo oral. Si quieres alcanzar el cielo esfuérzate a llegar juntos al clímax. Si quieres hijos, así como troncón me exige últimamente, pues compra preservativos vencidos en el mercado negro, tal cual los últimos que he usado. En otras palabras no hay que complicarse la vida sino vivirla. Me confirmo mentalmente. 

—El grado de madures que tiene al evocar su pasado. Su pasado ha hecho de él una persona llena de luz y alegría... Te amo Daniel, termina diciendo mientras junta nuestras frentes.

Mi corazón y alma se llenan al escuchar semejante declaración de amor. Y me prometo no usar más preservativos.

Nos perdemos en nuestras mirada llena del más simple y puro amor, dejo que el silencio se adueñe del lugar, al menos por un corto tiempo. Cuando la voz de mi madre nos saca de nuestra burbuja.

—¿Eso significa que él te ha hablado de su anterior relación?— pregunta con cierto nerviosismo.

Soy yo quien responde como si la pregunta careciera de valor. —Claro mamá, no pienso repetir ese error nunca más, Talía sabe todo y para ella no significa mayor problema— asentimos ambos sin problema, dando por cerrado mi pasado.

—¿Y tú, Daniel, qué esperas de Talía?— Intervine formalmente mi padre.

—Espero una vida larga y feliz junto a ellas dos— respondo tal cual el enamorado que estoy. Aunque troncón pretende que les diga que sus noches estarían vacías y carente de lógica que no está bombonerita. Muerdo mi lengua antes que algo así salga de mi boca. 

—Talía me hace ver el amor como algo positivo lleno de esperanza y de cosas buenas por venir— reconozco que mis palabras me dejan sorprendido. Pero troncón está tratando de hacerse notar al moverse en mi entrepierna, nuevamente quiere dejar en claro que su paraíso personal se llama bombonerita. En ocasiones me pregunto si troncón sólo vive para ser el protagonista de una película porno.

Luego de más de media hora tratando de explicarles a mis padres termino confesando lo inevitable; Estoy doblemente enamorado. Y finalizo mi monologo diciendo que Talía y Clementine hacen que cada día valga la pena, me hacen pedirle a Dios que mis días de vida sean muchos para poder tener más tiempos juntos. Talía me complementa de una manera que jamás imaginé que podía ser. Yo amo de la manera más pura a ésta bella mujer y la quiero solo para mí, así que, mantengo mi posición de amarla como ella se lo merece... Te amo Talía, la miro a los ojos. gesto que responde ella con un gracias amor.

Mi padre se levanta del sofá en busca de otra botella, la descorcha y sin dudar llena nuevamente la copas. Los cuatro nos limitamos a decantar el elixir dulce de la vid, jugando con las miradas entre nosotros.

—Bueno, sólo queda un punto que aclarar, y es la niña. ¿Qué tal lejos estás dispuesto tú, hijo, con respecto a la crianza de Clementine?— Pregunta con cierto aire de desaprobación, mi progenitor.  





DOBLEMENTE ENAMORADOWhere stories live. Discover now