Capítulo 7

248 12 2
                                    

Capitulo 7

Tome su pierna e hice que rodeara mi cadera, para poder embestirla más fuerte.

—Maximiliano... —ella cerro sus ojos y su agarre a las esposas fue aún mayor –harás que rompa esto –su sonrisa me indicaba cuanto le gustaba lo que estaba haciendo –más fuerte... —comencé a utilizar mi velocidad normal. Me acerque a ella y con cuidado lleve mi mano hacia sus senos los cuales acaricie con fuerza –Mmm...

—Oh...Luciana... —sentí como su cuerpo presionaba mi miembro y llegaba a su orgasmo gritando mi nombre. Solo embestí un par de veces más y pude encontrar mi liberación.

—Maximiliano... —dijo sonriendo –eres increíble... —sonreí y salí de su cuerpo para después recostarme a su lado –creo que no eras así cuando estábamos juntos, sin duda me agrada.

—¿Gracias? –me puse de pie sin tomar en cuenta su comentario, ¿qué demonios quería decir con eso?, busque mi ropa, hacia ya más de dos semanas que no bebía nada de sangre por lo que hoy tendría que ser el día negro, beber de esa asquerosa sangre humana.

—¿Maximiliano? –la mire y ella levantó sus manos así que busque la llave de las esposas que estaba en la mesa de noche y la libere.

—Gracias... ¿irás de caza? –asentí y me puse la camisa negra que traía antes de que ella me la quitara.

—¿Quieres que te acompañe? –Luciana siempre me preguntaba lo mismo, cada noche que iba por esa desagradable y amarga sangre humana, pero no deseaba que estuviera conmigo en ese momento, además que casi siempre terminaba teniendo sexo con alguna humana.

—No, iré solo... como siempre... –era cuidadoso en no hablarle de mala forma, aunque a veces lo hacía y ella no me decía nada, solo asentía y dejaba que hiciera lo que se me diera la gana. Eso es lo que necesitaba y ella cumplía con mis requerimientos.

—Bueno ¿regresaras pronto?

—No... —me puse mis zapatos y por último tome mi abrigo para salir de aquí.

—¿Iras con James?

—James esta desaparecido desde hace unos días... así que iré solo... —avance hasta la puerta y me obligue a girarme y verla. Lucia como una Diosa, recostada desnuda en mi cama...en mi habitación, la cual había sido transformada por ella, habían ciertos juguetes que le gustaba usar, a mi me daba lo mismo que hiciera lo que deseara con el lugar –Nos vemos, Luciana.

—Nos vemos, Daven... —aun no podía sacarle ese hábito, me llamaba siempre de esa manera a pesar de que le pedía que no lo hiciera, pero ella se excusaba diciendo que estaba acostumbrada y que le encantaba hacerlo porque era el Maximiliano que ella conocía, finalmente termine aceptándolo...no tenia ánimos de discutir con nadie –Emm... —la mire de nuevo al ver que tenía algo más que decir –mañana es la fiesta Masquerade...iremos ¿cierto?

—No, no quiero ir –había ido antes solo esperando que ella apareciera por algún milagro, pero no fue así. Esta vez no deseaba ir, sabía que ella no iría.

—¡Oh, vamos! Es entretenido, son pocas las veces que se puede compartir con más vampiros, te hará bien... —no, no lo haría —¡Además también irán Teresa y Ezequiel! Podrías hablar con ella y mejorar tu relación.

—No...no tengo nada que hablar con Teresa –claro que no hablaría con ella porque no pasaba ni un segundo y me refregaba en la cara lo que había pasado con Elizabeth

—¿Por favor? La vez pasada fuiste solo...

—Esta vez tú puedes ir sola...

—Maximiliano –se sentó y tomo su camiseta para comenzar a vestirse – ¿Cómo voy a ir sola? Estamos juntos, todos seguirán hablando de tu Elska Evige si voy sola... —tense mi mordida al escucharla –cariño, vamos...

Obstáculos MortalesWhere stories live. Discover now