Capitulo 17 - Bajo su camisa.

1.3K 76 3
                                    

10:00, Domingo.

La alarma del teléfono no paraba de sonar y estaba demasiado cansada como para cortarla así que simplemente la ignoraba e intentaba seguir durmiendo.

De repente la alarma paró, por  una parte tenía ganas de saber que había pasado con ella pero por otra parte no podía mover mi cuerpo así que decidí seguir haciendo lo mismo que antes: ignorarlo  seguir durmiendo. Y el plan me funciono durante unos 30 segundos, has que mi padre en un rápido movimiento me destapó y abrió las persianas de par en par.

-¿Que te costaba dejarme dormir unos minutos más?

-No voy a permitir que mi hija se quede durmiendo todo el día cuando acaba de venir a visitar a su padre. Además, tenemos que hablar- dijo mi padre apartando mi pelo de la cara.

-¿Que pasa?

-Más bien, ¿Que te pasa a ti?, ¿Has dejado a Nico por este chico?

-¿Que?, no papa ¡Por Dios! Es solo un compañero, nada más.

-Por favor... He visto como te mira y como tu le miras, no soy tonto Emma.

-Papá, yo... No podría hacerle eso a Nico, yo le quiero...

-Lo sé hija, estoy seguro de ello, pero a veces se puede querer a más de una persona al mismo tiempo. 

-Pero enserio quiero a Nico, no sabes lo duro que es estar sin el cada día.

-Lo sé cariño, pero solo te estas engañando a ti misma.

-¿Y que se supone que debo hacer, papá?

Mi padre posó su mano en mi hombro y suspiró con gran fuerza. 

-Sigue a tus impulsos. Haz lo que prefieras hacer. 

Y sin decir nada más se levantó y salió de la habitación.

Durante unos instantes me quedé quieta, parada, pensando en todo lo que mi padre me había dicho. Mi padre era lo único que me quedaba. Siempre estaba ahí para mi y estaba segura de que todo lo hacía pensando en mi bien. 

Así que le hice caso y realicé mi primer impulso. Me levanté de la cama, me vestí y salí de mi casa.

Y allí estaba yo 10 minutos más tarde, en el cementerio, sentada junto a la tumba de mi pequeño

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Y allí estaba yo 10 minutos más tarde, en el cementerio, sentada junto a la tumba de mi pequeño. Solía hacerlo muy a menudo cuando vivía en el pueblo, casi cada semana, pero desde  que me había ido a vivir a Madrid llevaba mas de dos meses sin visitarle. Podréis pensar que es absurdo, que la gente solo va al cementerio para llorar, pero en realidad yo me limitaba a quedarme tumbada, sentada, hablando sola, liberando emociones...

Era una buena forma de evadirme de todo lo que me rodeaba. 

Me preguntaba si él me estaría escuchando, si me entendía. Cuando murió era tan solo un bebé y quizás no me entendía cuando le hablaba, pero a él le encantaba escuchar mi voz. Después de todo era su hermana mayor y como una madre para él ya que mamá murió semanas después del parto. Si, podría decirse que fue el mejor y el peor año de mi vida. 

-Hola, se que llevo mucho sin venir, pero te he echado de menos. Sigo acordándome de ti cada día, no pienses que por que ya no venga tan a menudo me he olvidado de ti, ni mucho menos. Ahora estoy echa un lío, ¿sabes?. Tú ya sabes que Nico es perfecto y he estado enamorada de él desde secundaría, pero ahora ha llegado Dani y... No sé... Todo es distinto. Supongo que si estuviese aquí todo sería distinto, aunque ya no podría cogerte en brazos, pesarías muchísimo.

La voz estaba empezando a quebrarse, así que paré unos segundos y tomé aire. 

-¿Que debo hacer enano? Estoy echa un lió, ¿Que harías tú?. Supongo que te reirías con la cantidad de estupideces que estoy diciendo. Quizás eso es lo que debería hacer yo, reír más. ¿Con quien me rió más? ¿Con Dani o con Nico?

Mire hacia abajo pensando, intentando ordenar en mi mente cada uno de los buenos recuerdos vividos con cada uno para ver quien me hacía reír más. 

-Vaya pregunta- respondí entre risas- Es obvio...

Y fue en ese momento cuando me di cuenta de todo. Era como si estos meses la respuesta hubiese estado enfrente de mis narices siempre. ¿Como había podido ser así de tonta?

Me levanté rápidamente y corrí. Corrí lo más rápido que pude, sin parar, sin descansar, con una sonrisa de oreja a oreja en mi cara. Abrí la puerta de casa, subí las escaleras, abrí la puerta de su habitación y...

(POR FAVOR, RECOMIENDO QUE A PARTIR DE ESTE MOMENTO, PONGAIS ESTA MÚSICA )

-¿Pasa algo Emma?- dijo Dani desconcertado mientras hacía su cama- Pasa, no tienes por que quedarte en la puerta. 

Y eso hice, entré con todas mis fuerzas, corrí a sus brazos y le besé con una gran fuerza e intensidad.

Y eso hice, entré con todas mis fuerzas, corrí a sus brazos y le besé con una gran fuerza e intensidad

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Era un beso diferente a cualquier otro, era pasional. Ninguno nos deteníamos, solo nos besábamos. Comencé a tener una gran calor así que le eché sobre la cama que acababa de hacer y velozmente la deshicimos. 

Él no paraba de acariciarme la espalda sobre la camiseta, pero poco a poco comenzó a introducir su mano bajo mi camisa. Sentía sus cálidos dedos rozar mi espalda con ímpetu y deseo.

Era pura magia, nunca me había sentido tan viva. Era como si toda mi vida hubiese estado durmiendo, esperando a que él me despertase. 

Le quité la camisa y él hizo lo mismo conmigo. Por un segundo los dos nos detuvimos extasiados y sonreímos. En menos de dos minutos ya estábamos los dos completamente desnudos, abrazados, siendo libres juntos. 

Por fin lo había comprendido todo, Dani me hacía reír, él me hacía feliz. Con él experimentaba algo nuevo cada día en todos los sentidos. Me llevaba al extremo sin ni siquiera pedírselo. Había aparecido en mi vida como si nada y estaba claro que no era en vano. Pero lo que contaba realmente era ese momento, ese segundo, ese instante, ese ahora.

Pude divisar un pequeño tatuaje bajo su camisa, era un diminuto pájaro. Pasé mi mano sobre él y noté algo raro, que estaba en relieve, que no era un simple tatuaje. Probablamente hubiese sido alguna anécdota o historía del pasado que contar sobre ese imperceptible tatuaje.

Al parecer Dani no era tan perfecto como parecía, también tenía pequeñas desgracias que guardaba, al parecer, bajo su camisa.

BAJO SU CAMISAWhere stories live. Discover now