18. ¿Destino?

231 37 12
                                    

[Jimin]

Cuando salí de la habitación de Hoseok, justo después de la llamada telefónica en la que el tal Baek exponía aquella carta, me dirigí con rapidez al baño, procurando que nadie de la familia Jung me viera. Afortunadamente, nadie se encontraba en el pasillo, por lo que pensé que Jiwoo aún no había llegado y que los padres de Hoseok estarían en su habitación o algo así. Me sentí ciertamente aliviado, pues así no había nadie que viera mi desdicha, mi inexplicable penar.

Si era sincero, debía decir que me alegraba que los problemas entre mi amigo y Tae se hubieran arreglado, pues en parte yo los había causado, pero había algo que me dejaba intranquilo, y era ese constante pensamiento de que algo no estaba bien en todo esto; no por Hoseok o por Tae, sino por mí mismo. Había algo mal en mí que me impedía sentirme totalmente feliz por todo esto, y temía admitirlo; sin embargo, bastó con verme en el espejo para romper en llanto por fin, percatándome del nudo que tenía en mi garganta.

Él me gusta, pensé, y por un momento todo se aclaró en mi cabeza: no sólo era el hecho de que las cosas con Yoongi no hubieran funcionado, sino que también tenía que ver con mi preferencia hacia Hoseok. Al principio había creído que era porque íbamos en el mismo grupo de clases, que era una suerte tener a alguien conocido, especialmente si era alguien tan bueno como él, pero debía admitir que disfrutaba mucho más estar con Hoseok que con Yoongi; comenzando por nuestros temas de conversación y la manera forzada en que teníamos Yoongi y yo de hablar, más porque no teníamos casi nada en común, a pesar de que él se portara lindo conmigo; en cambio, con Hoseok era otra historia, porque no sólo podíamos hablar de cualquier cosa, sino también porque era suficiente el sólo estar con él, el sólo saber que lo tengo junto a mí, incluso si no somos nada más que amigos, aunque erróneamente había creído que únicamente quería eso de él, cuando ahora me daba cuenta de que había algo más.

La situación era un desastre total, no sólo porque no podía negar lo que sentía, sino también porque estaba claro que no era correspondido. La razón por la cual la carta había hecho que me sintiera miserable, era porque me sentía ciertamente identificado con ella. En primer lugar, también creía que Hoseok era perfecto, no porque nunca cometiera errores, sino porque él era algo así como mi tipo ideal; además, todo lo que se trataba de él era bueno desde mi perspectiva, con Hoseok todo era mejor, más llevadero; también estaba el hecho de que él simplemente brillaba, tal como Tae había dicho, y en efecto, debía darle la razón por completo porque él destacaba totalmente de entre los demás, sin necesidad de hacer demasiado esfuerzo.

Él era simplemente... genial, aunque esa palabra era demasiado pequeña como para describirlo por completo, porque él realmente era todo lo bueno que se podría pensar de alguien. Más que nada, comprendía a Tae por estar enamorado de Hoseok, porque tenía razón de estarlo.

Ahora, si pensaba las cosas, yo era casi como un estorbo, no tanto porque estuviera interfiriendo en su relación, cosa que no estaba haciendo en lo absoluto, sino porque ahora también sentía algo por él, y sabía a la perfección que no estaba bien, que esto cambiaba muchas cosas. Pensé en que me gustaría no sentir esto, pues no quería arruinar la relación tan linda que llevaban ellos dos, pero sobretodo, no quería sentirme de esta manera.

Al final simplemente decidí ignorarlo todo por el momento, pretender que nada pasaba, esperar que la sensación desapareciera; así que me enjuagué la cara con un poco de agua, esperando borrar toda clase de signos de que había llorado, y luego salí con la cabeza en alto, pretendiendo ser fuerte.

Al llegar a la habitación, cuando lo vi y él me sonrió al verme, pude sentir mi corazón acelerarse sobre mi pecho, tal como había sentido algunas veces antes cuando se trataba de él y todavía no comprendía qué era lo que sentía, aunque ahora lo hacía. Lo que hice yo, fue regresarle la sonrisa y volver a sentarme a su lado, sintiéndome ciertamente nervioso porque notara que algo malo sucedía conmigo, pero tal pareció que no se percató de ello, porque simplemente volteó hacia la pantalla de nuevo y le puso play al anime.

Serendipia (Vhope, Hopemin)Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon