Dos corazones rotos, un destino. (Navia)

Capítulo 5: Algo ¿normal?

Muy buenas mis Navianos les traigo otro capítulo de esta historia, espero que les guste y una disculpa por no poder publicar ayer, se me hizo imposible con el tiempo que tenía y de hacerlo rápido a hacerlo bien, prefiero las cosas bien hechas. Bueno sin mas el capítulo.

El sol entraba por la ventana de la casa del mago de fuego, que justo daba en los ojos de la maga de agua, que poco a poco fue despertando, sin darse cuenta que al despertar, estaba completamente rodeada por los brazos del mago, que la miraba este ya despierto.

Natsu: Buenos días Juvia, ¿Dormiste bien?

Juvia: ¡Natsu-sama! (Sonrojada) ¿Por qué no despertó a Juvia?

Natsu: Te veías muy linda y tranquila dormida que no quise despertarte, además no es como que tengamos mucha prisa de llegar al gremio o ¿Sí?

Juvia: No, tiene razón Natsu-sama, bueno ¿Qué le parece si Juvia le prepara el desayuno?

Natsu: Me encantaría, pero ¿Sabes que me gustaría más?

Juvia: ¿El que Natsu-sama?

Natsu: Que el desayuno lo preparemos juntos.

Juvia: A Juvia le encanta esa idea, bueno, pero ¿tiene un delantal que pueda usar Juvia?

Natsu se levantó de la cama para sacar dos delantales uno rojo y otro azul con toques blancos.

Natsu: Si, justo tengo dos, uno era de Mirajane que fue la que me enseño a cocinar y el otro es mío.

Juvia: ¿Mirajane-san fue la que le enseño a cocinar a Natsu-sama?

Natsu: Si, pero eso no importa Juvia, quiero preparar el desayuno contigo

Juvia: Bueno tiene razón Natsu-sama, vamos.

La maga de agua se levantó por fin de la cama para ir juntó con el mago de fuego a la cocina, decidieron preparar unos hot-cakes, conforme iba pasando el tiempo dentro de esa cocina ambos magos se sentían más a gusto el uno con el otro, hasta el punto de que cuando Juvia estaba adornando los hot-cakes con frutas y crema batida, Natsu tomo dos fresas, paso sus manos por debajo de las de Juvia, coloco una fresa hasta arriba de la torre de Hot-cakes donde estaba la crema batida y la otra en el otro plato, terminando por darle un abrazo a l amaga de agua, rodeando sus manos por el abdomen de esta.

Natsu: Muchas gracias por venir Juvia, me siento muy feliz cuándo estas a mi lado, el poco tiempo que hemos estado juntos, me has ayudado bastante, a olvidar todo lo malo, pero sobre todo a ser feliz.

Juvia: Juvia siente lo mismo, Juvia siente en Natsu-sama una calidez que nunca nadie le había brindado a Juvia, Juvia puede decir que cuando esta con Natsu-sama se siente protegida, se siente que nada malo va a ocurrir, por eso y más, gracias Natsu-sama.

Ambos magos se quedaron viendo fijamente por unos segundos, poco a poco se iban acercando el uno al otro, casi sus labios se tocaban, cuando por un descuido, el codo de Juvia tiro un salero, haciendo reaccionar a ambos magos y haciéndolos ruborizarse a mas no poder.

Juvia: Juvia piensa que es mejor tomar el desayuno e ir al gremio ¿no lo cree Natsu-sama?

Natsu: Ti. Tienes razón Juvia.

Natsu recogió el salero que estaba en el suelo, colocándolo de nuevo en su lugar, para después acompañar a la maga de agua, que había servido dos vasos de leche para acompañar con los hot-cakes, al terminar el desayuno, ambos magos aun nerviosos, salieron de casa del mago de fuego, para dirigirse al gremio, al entrar, Natsu por lo nervioso que estaba no entro pateando la puerta como el solía hacerlo, solo entro y ya dejando entrar a la maga de agua antes claro está, estos dos se dirigieron a la barra donde se encontraban Mira y Erza conversando.