El Señor De Los Anillos

Lothlorien

-Ya sabes, dones naturales- dijo ella alzando sus hombros

-Que modesta-

-Siempre-

*.*.*

-Nueve sois ahora, aunque diez fueron los que salieron de Rivendel- Dos hermosos elfos salían al encuentro de la comunidad- Decidme dónde está Gandalf, pues ardo en deseos de hablar con él- la mirada de todos se ensombreció

-Ha caído en la sombra- contestó por ellos la elfa rubia- La misión está en el filo de la navaja. Descuidaos un instante y fracasará, para desgracia de todos- Galadriel observó a Frodo- Aún hay esperanza, mientras la compañía permanezca fiel- Su mirada se posó en Boromir- No dejéis que os inquieten vuestros corazones. Id a descansar ahora, estáis agotados de tanto esfuerzo y sufrimiento. Esta noche dormiréis.

<<Pequeña, que placer tenerte con nosotros>> Celebrían la escuchó en su mente y le sonrió como respuesta

-Llévenlos al comedor y después denles una habitación- ordenó Galadriel.

La compañía comió en silencio, en mucho tiempo no habían comido bien y esto les cayó muy bien. Celebrían no despegó la vista del plato en todo el rato y, tras terminar, se levantó en silenció y salió.

-¿Todo bien?- preguntó Haldir al encontrar a su amiga sola sentada en la entrada del palacio

-Me siento realmente mal- confesó la elfa. Haldir se sentó junto a ella- Fue mi culpa, no pude ayudarlo porque soy una inútil- y sus lágrimas comenzaron a fluir nuevamente.

-No seas tan dura contigo- el elfo la abrazó- Justo ahora, ellos te necesitan más que nunca.

-No creo poder hacerlo-

-Eres Celebrían, tu puedes hacer cualquier cosa. Tienes que confiar en ti- Celebrían no dijo nada y siguió llorando, hasta que ya no salían más lagrimas- ¿Estas mejor?-

-No-

-Vaya, ¿Dónde está Lólindir cuando se le necesita?- y nada más decir esto la elfa volvió a llorar a mares- Lo lamento- comenzó a disculparse el rubio- No sé lo que dije... pero lo lamento-

-Él no vendrá- respondió ella- A esta altura de las cosas, ya debe estar más que listo para irse.-

-¿Cómo es que ese idiota te dejó sola?-

-El no supo que me iba-

-Ya estará en camino- aseguró él

-No- dijo ella en voz alta- No debe venir-

-¿Por qué?- preguntó Haldir frunciendo el ceño

-Escucha, si él llega a venir, no debes dejar que me siga ¿está claro?- Celebrían se puso de pie dispuesta marcharse- Ah, y tu ni pienses en ir a ayudar o algo así, porque si te apareces de repente, yo misma te mato- y se alejó dando grandes zancadas

-¿Y ahora qué le pasa?- dijo divertido al verla irse

*.*.*

-Llegó la hora- comentó con emoción el líder de la manada- Ya está cerca, ¿Todos saben qué hacer?- los lobos asintieron

-Amarok, déjame salir- rogó Hati- Ayudare lo prometo-

-Ya confié en ti una vez, no volveré hacerlo- gruñó el líder- tu plan falló, así que ahora sigue el mío-

-Si algo se complica yo puedo ser de ayuda-

-Si te dejo salir ten por seguro que algo se complicara-

-Yo soy el que esta enlazado con ella- advirtió el prisionero

-No por mucho mi amigo- Aseguró Amarok logrando atemorizarlo