El Señor De Los Anillos

Emociones

Nota: Aqui nuevo capitulo. Sienro la demora,pero con todo lo que pasa en mi país (México), ademas de que me encuentro en el ultimo año de carrera se me complicó un poco.
De cualquier forma agradezco sus votos y espero muchos comentarios, es lo que nos motiva a escribir.

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-CONCÉNTRATE- decía Thranduil a la chica que trataba con todas sus fuerza de mover una mesa- ¡HAZLO AHORA!-Le gritó desesperado

-YA BASTA- gritó Celebrían viéndolo ahora a él- Quiero descansar- pidió mientras avanzaba a la salida

-Descansaras cuando hayamos terminado- Thranduil la tenía sujeta de un brazo- No es posible que no puedas hacerlo- escupía cada palabra con despreció que hizo que la rabia comenzara a dominar a la princesa

-DIJE QUE QUIERO DESCANSAR- respondió la chica apretando los dientes

-CONCENTRATE Y MUEVE LA MALDITA MESA - ordenó gritando el rey

-¿QUIERES QUE LO HAGA? MUY BIEN- gritaba mientras se colocaba frente al objeto y sintiendo mucha rabia movió sus brazos como si empujara algo, un fuerte sonido se produjo, pues no solo había movido la mesa sino todas las cosas que estaban frente a ella incluso se rompieron los recipientes que estaban en los estantes del lugar y los libreros cayeron. Celebrían respiraba agitadamente mientras el rey trataba de asimilar lo que había ocurrido.

-Su majestad perdóneme- susurró Celebrían aguantando las lágrimas- No se... lo que me... ocurrió- decía tartamudeando

-Bien hecho- dijo simplemente- Puedes irte ahora si es lo que quieres- Thranduil la veía fijamente

-Cómo puede decir que está bien, casi destruyo la habitación- respondió Celebrían incrédula por las palabras del elfo.

-No exageres, apenas y moviste las cosas- Thranduil estaba tan calmado que Celebrían estaba perdiendo la paciencia -Creo que es mejor que descanses y yo tengo que mandar a reparar esto- El elfo sonrió al decir esto y la chica le correspondió- Ve a buscar a los muchachos, que te distraigan el resto del día- Celebrían asintió y salió corriendo en busca de Legolas y Lólindir

*.*.*

-¿Crees que este bien?- Preguntaba Lólindir a Legolas, los elfos estaban recorriendo el bosque después de que fueron informados de una presencia extraña, pero no encontraban nada aun.

-Sí, mi padre puede ser duro, pero consigue sus objetivos- respondió el príncipe observando a su alrededor- Ahora todo depende de ella- se detuvo cuando vio entre los arboles una sombra, pero antes de que pudiera identificarla desapareció

-Sé que Celebrían es fuerte, lo decía por tu padre- replicó Lólindir sonriendo y Legolas lo imitó.- ¿Viste algo?- preguntó Lólindir al verlo detenerse

-Sí, hace días que algo acecha el bosque, pero no sé qué es, no se deja ver más que lo necesario- respondió el príncipe, aunque estaba preocupado su corazón le decía que esa presencia no era maligna.

-Por cierto ¿Vendrán los hermanos de Celebrían para su fiesta de cumpleaños?- preguntó Legolas retomando la marcha.

-Lord Elrond los mandara, pero no creo que sea prudente que los tres vengan- respondió Lólindir siguiendo a Legolas

-¿Tan mal se llevan las chicas?- preguntó Legolas interesado

-Pues en un principio no tanto, pero en los últimos años sucedió algo muy fuerte entre las dos- respondió Lólindir, el tiempo que habían pasado ya en el bosque negro los había vuelto muy cercanos.

-Vaya, ¿Y cómo crees que reaccionara Celebrían cuando le hables sobre tus sentimientos?- Legolas sabía lo que perturbaba el corazón de su amigo y quería ayudarlo, aunque no sabía con claridad cómo.