— ¡Yixing!

El chico despertó, con los ojos muy abiertos y asustado. Tenía un aire inocente, y la sonrisa que les dedicó era parecida a la de un niño que acaba de ver a sus personas favoritas en el mundo.

— Hola chicos. ¿A qué se debe su visita?— saludó, su voz suave y como una dulce melodía. Kyungsoo le empujó hacia el frente.

Baekhyun se lastimó el dedo. Se hizo una cortada con papel.— señaló su mano, y el tal Yixing levantó esta, mirando la herida.

Colocó ambas manos sobre su pequeño tajo, y un brillo extraño salió de estas. Al retirar las manos, la cortada ya no estaba. Se sorprendió bastante, pero al parecer nadie lo notó.

— ¡Gracias Yixing!— su propia voz no le gustaba. Muy dulce, demasiado inocente.

— ¿Y qué hacen ustedes dos despiertos a esta hora?

De pronto alguien salió de entre los árboles. Un chico muy bonito, con un rostro fino y delicado y ojos como de ciervo, su cabello castaño claro caía por su frente y cubría parte de sus ojos. Kyungsoo bufó y Yixing le saludó con la mano.

— Lo mismo te debería preguntar a ti, Luhan.

Por alguna razón los nombres de los dos desconocidos se le hacían familiares, como si los hubiese escuchado ya antes en algún otro lugar. Tal vez los escuchó por Kyungsoo, que parecía conocer bien a ambos extraños.

— Hoy me pidieron que hiciera guardia. Me estaba asegurando de que todos estuviesen ya en sus hogares.— respondió el tal Luhan a Kyungsoo.— Voy a asumir por el rostro adormilado de Baekhyun, que estaban en la biblioteca.— rió. Sintió su pecho moverse, como si se hubiese carcajeado.

— ¿A qué se debe la reunión familiar?

Todos se giraron a ver a la dirección en la que se escuchó la voz. De lo alto ascendió una figura alada, y una vez la ténue luz de los faroles iluminó su rostro, una sonrisa como de gato se pudo ver en el rostro de un chico pelinegro y algo alto. A el también le saludaron, y por el corito de "Hola Jongdae", dedujo que ese era su nombre.

— ¿Te pusieron de guardia?, ¿a ti?— el tono burlón de Kyungsoo hizo reír a todos. Jongdae rodó los ojos.

Que poquita fe me tienes, Soo. Yo me he portado muy bien.— respondió, fingiendo estar dolido.

— Lo dejaron bajo mi supervisión. Pero es cierto que no ha hecho nada estúpido en estos meses. Se merece volver a la guardia celestial.— le defendió Luhan, encogiéndose de hombros.

— ¿Ves, Soo?, he sido un buen chico. Me merezco una estrellita dorada en la frente.— sonrió burlón Jongdae, señalando su frente cubierta por su cabello negro.

— Te puedo dejar un moretón en el ojo, por tonto.— respondió sarcástico. Jongdae rió.

— Hoy estas muy feliz, ¿acaso hay algún aniversario o evento que me haya perdido?

De pronto todos se tensaron ante las palabras de Jongdae. Ahora Baekhyun podía decir que estaba en total control de su cuerpo porque si que estaba confundido y eso se demostró. Kyungsoo apretó la mandíbula y miró mal a Jongdae.

Heaven | ChanBaekWhere stories live. Discover now