Saboreando la áspera textura de aquel objeto con sus manos, tragó saliva fuertemente mientras le daba vuelas y la voz de Shannon resonaba al otro lado de la línea por su oído derecho pidiéndole una explicación. Estaba hipnotizada.
- "Lauren" la llamó por cuarta vez. "¿Por qué? ¿Qué pasa?" preguntó nerviosa.
- "Ven" pidió en un hilo de voz antes de colgar.
Quedando la castaña muy preocupada al respecto, se quitó su pijama de franela rápidamente para vestir lo primero que encontró sobre la silla de su escritorio y seguidamente salir de su casa a una rápida velocidad. Misma con la que llegó a casa de los Scott tras explicarle a su madre que volvería más tarde.
Nada más ser interrogada por Douglas ofreciéndole al final que se quedase a cenar, subió los peldaños de las escaleras rápidamente llegando hasta la habitación de la morena a la cual encontró sentada en indio sobre su cama con la mirada perdida. No tenía buen aspecto.
- "Estoy aquí" la avisó, acercándose lentamente hacia ella. "Eh, Lauren" intentó de nuevo sin éxito.
Bajando la mirada hasta sus muslos donde una pequeña caja marrón descansaba en ellos, observó que sus finas manos sostenían un precioso antifaz negro con un lazo del mismo y varios detalles bien destacados, como los pavos reales de las esquinas.
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Seguidamente, sus ojos azules se dirigieron hacia lo que parecía una invitación cerrada, asemejada a las de Tomorrowland por su estética. Por un momento, no fue capaz de creer que la urgencia estuviera basada en ello, sin embargo, lo acabó afirmando segundos después.
- "Me ha invitado a su cumpleaños" soltó Lauren sin llegar a mirarla, entregándole el alargado cubo.
Intentando no perder la paciencia después de creer que realmente estaba mal, además de todo lo sucedido esa misma mañana durante el entrenamiento de Softball, lo cogió con sus alargadas manos y se acercó a él puesto que no llevaba ni las lentillas, ni las gafas puestas.
"Está usted invitado/a la fiesta del decimoséptimo cumpleaños de la señorita Karla Guerrero el próximo viernes tres de marzo. La temática estará basada en el incógnito. Esperamos su presencia"
- "Ni que fuera la presidenta" bromeó Shannon por lo bajo antes de fijar su atención en otro objeto.
La caja, además de ser pequeña y llevar aquella invitación junto el antifaz en el interior, también tenía un post-it azul sobre la tapa del cual se podía apreciar una letra en cursiva un tanto complicada de leer. Misma que estaba escrita del puño de la latina.
"Normalmente los invitados traen la suya propia, pero yo quiero que lleves esta, así sabré quién eres.
Besos, Karla. PD: Puedes llevar acompañante"
Relamiéndose los labios tras leer la última frase, miró de nuevo a la morena pidiéndole una explicación al respecto solo con los ojos. Sin embargo, ésta se limitó a levantarse de la cama y escalar por la pequeña trampilla hacia el desván.
