Mío [Entrégate, Libro 2]

Capítulo 3

— Ella es increíblemente frustrante. —se quejó Ethan.

Su cuerpo acurrucado contra el de Thomas, los brazos del hombre envolviéndose a través de su pecho, y su cabeza suavemente apoyada contra la curva del cuello de Thomas. Él le beso suavemente la cabeza ocultando su sonrisa en el cabello de Ethan.

— ¿Podrías ser un poco más serio, aquí? —Ethan murmuro. Conocía demasiado bien al hombre como para saber que se estaba riendo silenciosamente de la situación.

— Lo siento, —él se disculpó. La sonrisa aún estaba en su voz. —Es solo que no entiendo porque te ves afectado por ello.

— Por qué no quiero pasar semanas con Alicia Lean y Sebastián Campbell, creo que Alicia me odia. Amily dijo que ella era una arpía, que la ignorara, como si pudiera hacerlo. —dijo Ethan sarcásticamente.

La risa musical de Thomas retumbo desde su pecho llenando el aire de la habitación. Arpía, Thomas rió al recordar que él mismo había utilizado el mismo término para dirigirse a Amily, en cierta ocasión.

Su relación con Ethan finalmente se había hecho pública y Ethan los había presentado formalmente. Amily era una mujer de cabello jengibre con grandes ojos azul aqua que miraba a Thomas inquisitivamente. Ethan había mirado a Amily y seguidamente a Thomas, probablemente midiendo la densidad en el aire antes de decidir si dejarlos solos o no. Al final él había salido de mala gana de la oficina de la mujer por unos momentos para atender una llamada, dejándolos solos en la oficina.

Y ella había aprovechado la ocasión para juzgar a Thomas.

Había mirado a Thomas de arriba a abajo. Y el sentimiento de que él y Amily no se llevarían bien se había deslizado a través de Thomas.

— Él realmente está enamorado de ti. —Amy dijo despectivamente, como si ella no encontrara el sentido en que Ethan se sintiera atraído por un hombre como Thomas.

Él sonrió.

— Yo también lo estoy de él.

— Así que... después de terminar con tu experiencia "que se siente estar con un chico'' —Amily acentuó haciendo comillas con sus manos— ¿Lo vas a dejar? —ella pregunto a quemarropa.

— ¿Qué? —Thomas la miro con incredulidad. Negó con la cabeza. — No... —Thomas suspiro, preguntándose cómo demonios trabajaba la mente de esta mujer o si era debido a su embarazo y las hormonas lo que la hacían hablar así, no podía creer que esta mujer lo estuviera juzgando como un total imbécil en la primera oportunidad. Ella no lo conocía ni una mierda, pero aun así lo estaba juzgando como si lo hiciera.

Amily suspiro pesadamente como si su propia actitud hostil le molestara.

— Mira, —empezó— pareces un buen chico, y espero me perdones por ser tan protectora con él, pero Ethan parece un imán para atraer a personas como... —Ella se detuvo en seco, no estaba segura de continuar su oración.

— ¿De personas como yo? —Thomas termino por ella. — Ni siquiera me conoces.

Amily miro a través de la puerta para asegurarse de que Ethan aún no regresara.

— Solo me aseguro de que él no sea lastimado nuevamente, Thomas. No eres la única persona que ha herido a Ethan. —Ella aseguró, y Thomas se sintió fuera de cobertura al imaginar a Ethan siendo lastimado por alguien, incluso el pensamiento de Ethan con alguien más que no fuera él, le molestaba en sobremanera. Celos se deslizaron por su sistema, odiando el hecho de que Ethan hubiese estado con cualquier otra persona que no fuera él. Sabía que estaba siendo estúpido e irracional, pero Ethan le pertenecía a él, y nadie debería haber puesto sus manos sobre Ethan más que él, quizá ese era el precio del error cometido después de todo. — No quiero verlo de tal manera nuevamente, él no se merece ese tipo de cosas, no quiero verlo herido.