Perfect Genetic

Lejanía

Cosima estaba sentada entre el desorden, Delphine estaba junto a ella mientras la rodeaba con un brazo y la acariciaba de vez en cuando, Gemma y Oscar estaban entre sus piernas descansando y algo somnolientos. Por otro lado se encontraba Alison y Donnie caminando a su espalda, la canadiense ordenaba luego de que Delphine husmeara entre las cosas desordenadas en busca de algún indicio del paradero de Sarah y su familia, pero como nada encontró Alison comenzó a ordenar, ya que no llamarían a la policía para que investigaran, claro que no, sería un jaleo gigantesco si se les ocurría explicar lo que ellas pensaban que había pasado. Así que esperarían, pues nada más podían hacer, el problema era que no sabían a que esperaban, alguna respuesta quizás, o probablemente que alguna idea se les cruzara por la cabeza, pero el cansancio los tenía agotados mentalmente y ni el más remoto pensamiento se les cruzaba por sus cabezas.

- ¿Qué se supone que debemos hacer? – preguntó Alison haciendo una pausa mientras miraba a Cosima y a Delphine, pero ambas se quedaron mirando, sin saber exactamente qué contestar.

- Pues…no lo sabemos Alison, no tenemos ni la menor idea de donde se puede encontrar Sarah – contestó la morena con un halo de tristeza y Delphine la estrechó un poco más en sus brazos.

- De algo estamos seguros y es que no nos podemos quedar mucho tiempo aquí, los hombres de Leekie saben de ustedes tres, fueron por ustedes luego de Sarah, así que volverán por estos lados y no nos pueden encontrar – Agregó Delphine.

- Espera – interrumpió Donnie - ¿Y donde insinúas que nos quedemos? Mis hijos no pueden quedarse en cualquier lugar de mala muerte por miedo que nos encuentren – dijo cruzándose de brazos.

- Bien, entonces vuelve a tu casa, de seguro estarán mejor allá, donde entraron sin problemas y todo el barrio escuchó el tiroteo – contestó de mala gana Cosima y tanto Delphine como Alison se quedaron mirando a Donnie en señal de que esperaban alguna respuesta contra eso, pero nada dijo y guardo silencio.

- Esta bien, calmémonos un poco – interrumpió Alison – está claro, no podemos volver, pero ¿a dónde si no? – dijo preocupada.

- Podemos…Pueden – corrigió Delphine – Ir a Paris –contesto girándose para mirar a Cosima – Nadie sabe de la mansión, pueden ocultarse ahí – agrego mas para Cosima que para el resto. La morena frunció levemente el ceño, ¿a qué se refería con "pueden"?

- Delphine…- susurró pero se detuvo y se giró a la puerta corrediza que había sido deslizada con fuerza, todos quedaron mirando, asustados, mientras la rubia tomaba su arma de nuevo y se ponía de pie.

Una mujer alta, mayor que todos en la habitación, de tez pálida, ojos azules como el cielo y el cabello castaño oscuro, se encontraba de pie escaneando a todos en el cuarto. Cosima no había sentido tanto silencio en su vida, ni siquiera con Delphine. Miro rápidamente a Alison, a Donnie y luego a la rubia, que tenía el ceño levemente fruncido, clara señal de que no reconocía a esta mujer.

- Esto – dijo la desconocida – Esto es incómodo –agrego haciendo que se escuchara aquél acento británico.

- ¿Quién eres tú? – pregunto de manera amenazante Delphine, ubicándose casi frente a Cosima, gesto que la hizo sonreír levemente.

Aquella mujer deseó contestar, pero se quedó mirando a Alison, que estaba muy incómoda y se ubicó detrás de su esposo, desvió la mirada a Delphine pero su visión se clavó esta vez en Cosima que a diferencia de Alison, no se escondió tanto como su hermana. La desconocida se acercó y quedó frente a Delphine, sin mirarla a ella.