Capítulo 45

992 74 44
                                    




Me alimento de comentarios chicos, así que....quiero comidita jeje.


Mis ojos se despertaron bruscamente de un sueño que había pensado que sería para siempre. La confusión me atrapó cuando mis sentidos estuvieron lo suficientemente espabilados como para darse cuenta de que no reconocía el lugar donde me hallaba. Vi mis piernas recogidas y una manta de lana sobre ellas. De color blanco estaba tintado todo el lugar, siendo la luminosidad el elemento base de la estancia. Miré a mi alrededor y siendo consciente de mi desconcierto, traté de recordar para saber, aunque mis intentos tan solo se quedaron en eso. Ningún recuerdo acudió a mi mente. Mi razón estaba hecha de una masa compacta de la nada.

-Buenos días.-Susurró una voz sobrecogedora a mi derecha.

Una joven vestida de un pálido tono me hablaba. Su pelo rojo se recogía en dos largas trenzas y su expresión me observaba con cierto asombro. Sus ojos se abrieron cuando traté de reincorporarme donde fuera que me hallaba. Reveló una faceta un tanto inquietante cuando pareció contenerse de algo.

-¿Dónde estoy?-Pregunté siendo una completa víctima del desastre que habitaba en mi cabeza.

Quizá no quise darme cuenta en aquel instante, pero no fui capaz de reconocer mi propia voz.

-Oh, esa es una información que no debería proporcionarle en este momento. Por ahora solo trate de descansar. -Dijo sonriente.

Pude localizar en su mirada castaña una pizca de algo que no pude definir. Algo extraño. Quise recordar a qué me sonaba esa sensación, pero mi mente se llenó de aturdimiento cuando traté de abrirla.

Observé mis brazos. Dos tubos se adentraban en mí por cada brazo mientras lo que suponía era sangre fluía por ellos. Sentí como mi cuerpo disparó adrenalina por todo él.

-¿Qué me están haciendo?-Pregunté con la alteración instaurada en mí.

-Nada de lo que se tenga que ansiar.-Contestó.-No se preocupe, está en buenas manos. Tan solo descanse, ha perdido mucha sangre.

Nunca había estado en un hospital. ¿O sí? No lo recordaba. De todas maneras no me calmaban sus palabras, tener aquellos conductos me proporcionaba una sensación de lo más aterradora.

-Dígamelo, por favor.-Le pedí.

-Tan solo se trata del tratamiento que nuestro doctor ha pensado que se adapta mejor a su estado.-Afirmó.-No se inquiete, mejorará en los próximos días.

-¿Se trata de una transfusión de sangre?-Pregunté calmándome y tratando de confiar en las palabras de lo que había sospechado era una enfermera.

Ella le encontró algo gracioso a lo que dije, algo que no logré entender.

-Sí, digamos que así puede llamarlo.-Contestó mostrando una amplia sonrisa.

Sentí como mi ceño se fruncía ante su expresión.

-Tome.-Dijo cuando mis ojos consiguieron desviarse de los tubos.-Beba esto, le ayudará.

Me ofreció un pequeño envase de cartón que hice que pusiera en la mesita que quedaba ubicada a mi lado izquierdo.

-¿Qué es?-Pregunté siendo víctima de la curiosidad.

Hubo algo en su rostro que no quiso transmitirme mucha confianza cuando habló.

-Zumo de tomate.-Dijo asintiendo.-Aún no debe comer sólido.

-¿Y eso por qué?

-Su condición no se lo permite.-Contestó entornando la cabeza.-Si necesita algo, tan solo apriete el botón.

Full Moon®  #PGP2023Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang