In the rain. (Vkook/Taekook)

Capítulo 9- Nota en la puerta.

Tae se giró para ver a JiMin con la boca abierta, por lo que el de cabello rosa se sonrojó y rió nervioso.

¿Desde cuándo?

Articuló Tae moviendo su boca sin emitir ningún sonido.
JiMin se encogió de hombros, él en serio no sabía desde cuando había comenzado a sentir cosas por YoonGi, sólo las sentía, y ahora sus sentimientos eran serios, quería pasar su vida con YoonGi, sonaba cursi, pero era lo que deseaba.

Al terminar la clase, el castaño impidió que Park saliera del aula de clases. De ahí no salían hasta que le contara todo.

—¡TaeHyung! Te digo luego, tenemos clases. — exclamó el de cabello rosa tratando de apartar a Tae de la puerta.

—Al menos dime desde cuándo, niño insolente. — dijo riendo el castaño haciendo que JiMin soltara un suspiro.

—No lo sé, ah... Desde hace unos meses puede ser...

—Y no me habías dicho, me dueles. — fingió llorar.

—Porque no estaba seguro, sabes que te quiero mucho. — Ambos sonrieron.

Salieron del aula y caminaron hasta las canchas de la preparatoria, tenían hora deportiva.

Se pusieron su ropa de deporte en los vestidores mientras reían de cosas triviales y salieron para dar las tradicionales "3 vueltas a la cancha"
No era una cancha pequeña, por lo que cuándo iban en la 2da vuelta ya les ardían los muslos.

Nunca dejaron de correr, eran chicos atléticos, no eran los de mejor condición física, pero podían resistir, además que tenerse el uno al otro los motivaba... De cierta manera. Si alguno de los dos se detenía, tenía que pagar la comida del otro ese día.

—Dios.

Murmuraron al unísono mientras se dejaban caer en el suelo al completar la tercera vuelta. Sus pechos subían y bajaba al ritmo de sus agitadas respiraciones mientras contemplaban el cielo.
Era un día bonito.

...

JungKook salió de su aula cuando el timbre sonó, necesitaba ir al baño.
Llevaba los audífonos puestos mientras caminaba, la música lo hacía sentirse menos solo.

—Eojewa oneure ondoga neomu dallaseo
bihaenguni mandeureojyeone
naega meomulgie aeyogi neomu nopaseo
hansumjagukman gipge deureonane. — tarareó por lo bajo mientras caminaba.

Al llegar al baño, se quitó los audífonos y se metió en uno de los cubículos para, bueno, hacer sus necesidades humanas.

Escuchó como la puerta se abría pero no le hizo mucho caso.
Al salir del cubículo, se dirigió a lavarse las manos y por el espejo vio una nota pegada en la puerta del cubículo del que acababa de salir.

La tomó con las manos aún mojadas y desdobló el papel.

JungKook es un estúpido marica.

Sus ojos se abrieron ante la sorpresa.
Era un chico al que ignoraban, no uno al que molestaran.
Hizo una mueca y se guardó la nota arrugada en los bolsillos de su chaqueta.

Volvió a ponerse los audífonos y regresó al aula justo antes de que el profesor ingresara.

~

A la hora del descanso, JungKook siempre iba a sentarse solo bajo un árbol, aveces leía, otras dibujaba, algunas veces cantaba y otras veces sólo escuchaba música.
Y estuvo a punto de hacerlo de nuevo ese día, pero una bonita sonrisa cuadrada lo detuvo.
JiMin y TaeHyung lo esperaban en la puerta de su aula cuando éste salió.