(Cancelada) Insistencia [R+18] Miraculous Ladybug

Déjate llevar - Parte 1

- Deja de llorar, Marinette. - Tikki acariciaba un pequeño mechón de cabello negro que caía sobre el rostro de la azabache. - Por qué estás tan triste? -

Después de regresar de su encuentro con Chat Noir, Marinette se destransformó y arrojó sobre su cama, abrazó su almohada y comenzó a llorar desconsoladamente. Las lágrimas de angustia nacían en sus lagrimales y terminaban cayendo por sus mejillas, humedeciendo sus sábanas, irritando su blanca piel. Sus ojos azules estaban rojos de tanto llorar.

- Marinette... Por favor... Cuéntame qué te sucede, me da mucha pena verte así y no poder ayudarte a que te sientas mejor... -

- Es que... - Soltó unas palabras en voz baja que se interrumpían por sus inspiraciones sollozantes - Me siento horrible... No pude decirle la verdad a Chat, no pude!!! De sólo pensar en lo herido que se sentiría al saber que me siguen pasando cosas con Adrien cuando le digo que lo amo... Y que al mismo tiempo dejo que él haga lo que quiera con mi cuerpo... Se siente horrible... - Volvió a llorar con fuerza.

Tikki no sabía que decirle. Estaba desesperada por contarle sobre la verdadera identidad de su compañero, con tal de calmarla y ayudarla a sentirse mejor. Verla sufrir de esa manera le estaba rompiendo el alma, sobre todo cuando la solución era más que simple ya que, Chat Noir y Adrien eran la misma persona. - No deberías hacerte tanto problema por eso, Marinette, tienes que confiar en lo que te digo... Pronto comprenderás todo!! - 

- Estoy cansada de escucharte decir eso, Tikki! Cómo diablos se supone que voy a comprender todo? Tú me insististe en que le diera esa maldita oportunidad a Chat Noir, para qué?... Para sentirme así? Para enamorarme de él y no poder dejar de pensar en Adrien? Y como si fuera poco... El maldito se me acerca cada vez más! Quieren volverme loca? - 

- Por favor, intenta calmarte Marinette, confía en mi! -

- Quisiera volver a ser sólo Marinette. Me estoy hartando de sentirme así, preferiría no haberme enamorado nunca de este gato tonto. - Limpió sus lágrimas con su puño cerrado.

- No digas eso... Las cosas cambiarán pronto para ti, Marinette, puedo asegur... - Tikki no pudo terminar la frase porque la azabache se quitó los aretes.

- Lo siento Tikki, fue suficiente por hoy. - Apoyó sus miraculous sobre el estante que tenía arriba de la cama y se recostó de vuelta, tapándose con la sábana para intentar dormir.

*-*-*-*

Las ojeras reinaban en la cara de Marinette ya que no había podido pegar un ojo debido al llanto y a la angustia de la noche anterior. Decidió salir de la cama temprano porque no tenía sentido quedarse ahí metida sin poder dormir. Tomó sus miraculous del estante y los colocó de nuevo en sus orejas, al mismo tiempo que Tikki se materializaba frente a ella con cara de tristeza. - Lo siento... - Susurró la azabache invitando a la pequeña kwami a sentarse sobre su mano derecha, pero ella se acercó hasta su mejilla y la abrazó con sus bracitos a modo comprensivo.

Marinette era la única sentada en el aula, aún faltaban 40 minutos para que las clases comenzaran y sus compañeros estuvieran todos ahí. Recostó su cabeza en su escritorio sobre sus brazos extendidos y ladeó la mirada hacia la ventana que daba al exterior de la escuela. Se mantuvo así unos segundos hasta que su mente comenzó a trabajar de nuevo en pensamientos que le carcomían por dentro, por lo que lo único que se le ocurrió para distraerse fue tomar el celular. Lo sacó del bolsillo de su jean rosa con su mano izquierda mientras que deslizaba su dedo índice de la derecha a través de la pequeña pantalla, con su cabeza aún sobre su escritorio. Ella no había chequeado el móvil desde la noche, solo para setear y apagar la alarma que no necesitó hoy a la mañana ya que nunca logró conciliar el sueño. Tenía tres notificaciones de Whatsapp.