(Cancelada) Insistencia [R+18] Miraculous Ladybug

Segundo encuentro

- NO!! Maldita sea! - Chat Noir golpeó enfadado el techo tras de su espalda con los puños cerrados al mismo tiempo que Ladybug se levantaba rápido, apoyándose en sus rodillas.

- Creo que debemos regresar, Chat. - Le tendió la mano para que él se levantara, sin mirarlo, avergonzada. - Ya es tarde. -

El muchacho se reincorporó y abrazó a la moteada. - Lo siento, mi Lady, lo siento si te incomodé. De verdad. - Ella colocó su mentón en el hombro de Chat y correspondió el abrazo.

- No tienes la culpa... - La pobre chica se sentía muy confundida, estaba conteniendo unas lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos. No podía creer lo que había estado haciendo. Respiró profundo y trató de cambiar su actitud para no preocupar a su compañero.

- Qué haremos ahora? - Preguntó el rubio tomando a Ladybug de las mejillas con sus manos, clavando sus verdes ojos en los azules de ella.

- Regresar a nuestras casas antes de perder nuestra transformación. -

- Ya lo se... Pero, me refiero a nosotros. Esto que acaba de pasar, significa algo, no? -

*pip pip pip* *pip pip pip* *pip pip pip*

- Vamos, Chat, nos quedan menos de 5 minutos, no quiero terminar en el medio de la calle sin mis poderes, es muy tarde - Ladybug desviaba la mirada pero no podía soltarse del agarre del chico.

El rubio suspiró con fuerza, separó las manos de las mejillas de la moteada y las llevó al costado de su cuerpo, un poco decepcionado por no recibir la respuesta que estaba esperando. - Bien, tienes razón, vamos. -

En pocos segundos llegaron hasta su punto de encuentro, la Torre Eiffel, en donde se detuvieron en la base en silencio sin mirarse a la cara, uno frente al otro. Los pechos de ambos se inflaban con el movimiento de su respiración, los dedos de Chat Noir se apretaban cerrándose en sus puños mientras aguantaba las ganas de hablarle a su Lady, pero tenía miedo de arruinar aún más todo y perderla para siempre. Él se sentía responsable de haber llegado a ese punto descontrolado el cual se había prometido no alcanzar, al menos no en su primer encuentro...

*pip pip pip* *pip pip pip* *pip pip pip*

- Chat... - Ladybug rompió el silencio - Debemos... ir cada uno a su casa, pronto - Había algo que no la dejaba moverse del lugar en el que estaba. No quería irse, no quería dejar de estar al lado de ese muchacho que le había hecho descubrir sensaciones que nunca había experimentado. ¿Por qué todo tenía que ser tan difícil? ¿Por qué tenía que empezar a sentir cosas por alguien a quien no podía decirle quién era, a quien no iba a poder mandarle mensajes, a alguien a quien no iba a poder ver por más tiempo del que su miraculous le permitiera? Ahora que creía quizás haber encontrado la forma de dejar a Adrien atrás, ¿por qué no podía entregarse al amor que este chico parecía capaz de darle?

- Lo siento, Ladybug. No era mi intención que todo esto se diera así, te lo juro - El gato tomó coraje al escuchar la voz de la chica. Se derritió cuando ella lo miró a los ojos y parpadeó de una manera muy suave con sus hermosas y largas pestañas, casi hipnótica para él. - Yo te respeto mucho, no quiero que pienses lo contrario, no eres una chica más para mi, yo te amo... -

Ladybug lo besó de forma muy tierna mientras sus miraculous no dejaban de sonar.