Capítulo 16: Elementos motivadores

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—¿Dani...?¿Estás bien...? —Kia me miraba desde arriba, estaba acostado.

—¿Pasé? —Un dolor latente en la cabeza me quitó las palabras.

—Lo hiciste muy bien... No, no te levantes aún, descansa.

—¿Cuanto tiempo pasé ahí? —Pregunté mientras me agarraba la cabeza.

—Al rededor de cinco o cuatro días, más tres o cuatro que ya llevas aquí —Sonrió nerviosa.

—¡¿Qué?! —Me exalté.

—No te preocupes, hay gente que ha tardado meses o años. Lo estás haciendo bastante bien.

—Pero no quiero pasar tanto tiempo aquí... No es por ti, en serio me agradas, pero extraño a mi familia y amigos.

—Entonces continúa haciéndolo así, solo te faltan dos más.

—Es cierto, pero tu dijiste que la roja es la pero, ¿verdad?

—Sí..., pero lo lograrás, no como..., yo —Bajó la vista un momento—. En fin, ¿estás listo?

—No Kia, no lo estoy, lo siento —Ella se mostró sorprendida por mi respuesta—. Tengo muchas cosas por preguntarte y no podré seguir las pruebas si no obtengo las respuestas. 

—Pero pensé que habías entendido todo.

—No Kia, no lo hice. Teng..., tengo tantas du..., dudas —mi voz tartamudeaba y se me mezclaban las palabras—. ¿Puedes ayudarme?

—Haré lo que pueda —Sonrió muy brevemente.

—En primer lugar, ¿Por qué interviniste en la prueba? ¿Tendrás consecuencias?

—Aunque queramos, realmente no podemos intervenir, solo podemos verte y anotar pero no podemos controlar nada, ni siquiera sabemos que piensas. Nos guiamos por cómo fluyen los escenarios y por lo que dices. ¿Entiendes?

—Creo que sí, ¿me estás diciendo que mi conciencia me dio la frase para superar el último reto?

—En realidad vos mismo lo hiciste, esta prueba la creaste vos, no nosotros. Tu imaginaste todo, tu creaste tus retos y todo lo demás —Me lo dijo con total tranquilidad.

—¿Me decís que en realidad todo fue mentira? 

—No —Suspiró—. Es mucho más complicado, te explico...

—Explícame, por favor —Me paré frente a ella.

—Dylan... Todo lo que te contó es cierto. Desde que falleció su padre toda su vida cambió para mal.

—Si se supone que yo cree todo eso... ¿Cómo es que no sabía eso pero que aún así lo haya creado como una prueba? Lo siento, me explico terriblemente mal —Sonreí sin ganas.

—Descuida, entendí. El hecho es que siempre lo sospechaste pero nunca te atreviste a enfrentarlo con él, a preguntarle, a equivocarte.

—Entiendo pero él sigue vivo, ¿Verdad?

—Sí, por supuesto —Sonrió— solo digamos que nunca te enteraste de eso.

—¿Me estás diciendo que soy un mal amigo? ¡¿Cómo iba a saberlo si nunca me lo dijo?! —le dije nervioso y alterado.

—Tranquilízate, no es lo he querido decir, ven siéntate, esto puede ser muy difícil de entender.


Intenté relajarme y abrir mi cabeza para que nada me resulte incomprensible, en serio quería entender todo y aceptarlo porque era lo que me tocaba experimentar. Me explicó cada detalle por el cual había pasado, me explico que el objetivo de estas pruebas era el de explotar mis amistades y de diferenciar lo real de lo que formaba parte de las pruebas. Me sentía confundido, habían pasado tantas cosas que me dañaron y ya no tenía noción del tiempo o de por real, me estaba volviendo loco pero debía ser fuerte para terminar y que todo no haya sido en vano.


—Mi conciencia me dijo que él no podía explicarme para que era esto —Saqué del bolsillo las cosas que había recolectado de cada reto y se los enseñé.

—El collar de Camila, la pulsera y el anuncio de Arien, y la foto del padre de Dylan —Se sorprendió al verlos—. ¿No entiendes Daniel? —preguntó contenta.

—No, lo siento —contesté un poco molesto.

—¡Son elementos motivadores! —Siguió hablando al ver que no contestaba: —Son cosas materiales que las pruebas te ofrecen como incentivo para que ganes las pruebas.

—Sigo sin comprender que me estás diciendo —por más que escuchara cada palabra era inútil intentar entender a la primera.

—Estas cosas son muy importantes para tus amigos, las pruebas te lo dieron para que al pasar las pruebas se los devuelvas. Ahora pensarán que los han perdido...

—Está bien pero... ¿Y si no las paso, qué pasará con ellos?

—Quedarán perdidos, contigo. Es la consecuencia de ellos —me dirigió otra de sus hermosas miradas sinceras.


Un gran silencio vino después de eso, la jaqueca ya había desaparecido, me sentía mucho más aliviado. Aun así me perdí en mis pensamientos, tenía tanto por procesar que ni siquiera pensé en lo último que había pasado en la prueba, rogaba que ella no lo hubiera visto. Su vista se mantenía en el suelo y yo fijé la mía en el hermoso amarillo del cuarto, ese hermoso amarillo pastel que ahora era mi color favorito. 


—Kia... —Pensé en lo que estaba por decir—. Respecto a lo último que dije en las pruebas, antes de que todos desaparecieran...

—Quiero mostrarte algo —agarró la taza con el líquido amarillo verdoso que no pude terminar—. Quiero que veas algo, se que es horrible el sabor pero sería muy importante que veas esto.

—Está bien.


Ella tomó el primer sorbo, y me pasó la taza a mí.


—Bebe y piensa solo en mí, ¿está bien? —Sonrió al verme nervioso—, descuida, todo estará bien. Lo prometo —Me besó en la mejilla y se sonrojó.


Fue lo último que vi ya que todo comenzó a nublarse otra vez y en segundos ella estaba dormida, me quedé mirándola con ternura hasta que también caí como ella.

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Hola!!! Bien, lo prometido. Se que me van a odiar pero publicaré día de por medio porque en serio estoy teniendo muy poco tiempo y así los capítulos salen pero no como quiero. Sí puedo seguir publicando a diario lo haré por supuesto pero no quiero decepcionarlos y seguro día de por medio llegaré a publicar. Recuerden también comentar preguntas para Dani, él está ansioso de responderlas y no quiero hacerlas todas yo 💔

Espero que les haya gustado el capítulo de hoy, voten,comenten, compartan y gracias por leer ❤

Los colores de la vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora