Letters To You - James McVey.

Capítulo 60

Holiwiiiiiiii! Quería avisaros de que ya no queda mucho para que termine esta temporada😢 Se que me pedís que suba más seguido pero últimamente me cuesta un mundo escribir un capítulo. Espero que os guste y no os olvidéis de votar, eso siempre es de mucha ayuda❣️
Si quereis contactar conmigo podéis hacerlo en Twitter: @unwealmcvey o en Instagram: @melsmiffy.
Un beso enorme xx

Narra Violet:
Me agarré a la valla y respiré. Mi hermano saltaba como un enfermo y yo trataba de mirar a los cuatro sin perderme ningún detalle. La gente gritaba. Por suerte aun no eran lo suficientemente famosos como para que supieran que yo era la hermana de uno de ellos y la novia de otro. Vi como James sonreía algo nervioso. Tris se masajeaba las sienes rápidamente y Connor simplemente miraba a su bajo como si fuera su tesoro más preciado. Lágrimas salieron de mis ojos. Horrible. Me había tirado casi una hora maquillandome, pero este momento no tenia precio.
Miré a mi derecha, Mary cantaba dejándose los pulmones, cuando miré a la izquierda me encontré a Andy acariciando su tripa mientras las lágrimas caían por su rostro. Seguramente mi padre lo estaba grabando todo, respiré. Me costaba verlos ahí y creérmelo. Por último cantaron una de las canciones que habían hecho, llamada 'Can We Dance' miré a James y vi como se concentraba en su guitarra. Sonreí. No creo que vuelva a ver algo más puro que eso nunca.

'I talk a lot of... when I'm drinking baby...'-sorprendentemente algunas personas del público continuaron la letra junto con James y Connor haciendo los coros. Los cuatro quedaron bastante sorprendidos. Por un momento me detuve a pensar por qué habían decidido poner una palabrota en la letra si nunca la podrían decir... me masajeé las sienes y salté y canté la letra, que de tanto escucharlos ensayar ya me la sabía. Por un momento vi como James miraba a nuestra zona y le sonreí, me sacó la lengua y comencé a reír. Quién le iba a decir que el panico escénico desaparecería de una forma tan bonita. Connor lo llevaba algo peor, pero se le veía bastante contento y distraído. Me dolía que estuviera tan lejos en aquel momento.
Los saltos cesaron y Brad comenzó a dar las gracias a todos. La gente gritaba, obviamente la mayoría estaba allí para ver a McFly. Salí de allí tratando de respirar y busqué el pase del backstage. De repente alguien tapó mis ojos y me asusté. Mi respiración cesó.
-¿Quién es?-dije asustada. De repente escuché una risa familiar y me planteé si debía de dejar de ser tan paranoica. Aunque aún costaba.
-Tonta soy yo- vi a un Ollie muy feliz- no veas que monos tus chicos. Me han encantado.
-¿Que haces aquí?-dije sonriendo.
-Me duele que me lo preguntes- se tocó el pecho. Pues Ollie era fan de McFly. Muy muy fan de McFly. Reí asintiendo.
-Puedes ir junto a mi familia para verlos más cerca si quieres. Estamos en el sector de la izquierda.
-¿Me dejaran pasar?
-Busca a Andy. Ella está en primera fila. Y cuidamela, ya sabes -dije tocándome la tripa. Asintió y se marchó. Después del sobresalto volví a acariciar mis sienes y respiré hondo. Aún me costaba creer que todo había acabado en ese juicio. Caminé hacia el backstage otra vez. Un grupo de chicas se me quedaron mirando de forma bastante rara. Aún así seguí caminando y enseñé mi pase a los guardias que estaban allí. Entré. Creo que jamás había tenido tantas ganas de ver a James. Distinguí unos ricitos y corrí.
-Lo habéis hecho genial - dije gritando cual fan loca - mi hermano me abrazó aun casi temblando.
-No sabes lo emocionante que es esto - dijo sonriendo- ¿Donde está Andy?
-Esperando para ver a McFly- de repente una figura pasó por mi lado... ¿Tom Fletcher? Vaya. Hasta yo me quedé impresionada.
-Bradley, ¿Esta es tu novia?-dijo sonriendo.
-No no, yo soy su hermana - dije algo nerviosa.
-¿Os importa si la entro al backstage después del show? Ahora debe de estar más nerviosa que nunca y con el bebé no me fio mucho de lo que pueda pasar...
-Claro - dijo levantando sus pulgares.
-James está cambiándose. Creo que nunca lo había visto tan nervioso- dijo riendo.
-¿Tu como estás?-dije colocándole bien la camisa.
-Feliz. Cansado pero feliz. No puedo esperar al resto de shows.
-¿Cuando os marcháis?
-Mañana. Volvemos en 10 días.
-¿10 días? -dije haciendo un puchero.
-Puedes venir con nosotros, lo sabes.
-No sé... me sabe mal...
-Qué dices tonta. Andy viene - dijo sonriendo.
-Lo pensaré- dije abrazándole.
-Voy con ella a ver el show - dijo señalando la puerta. Asentí y por un momento me quedé sola. Me adentre en el backstage y vi una puerta con un cartel donde ponía 'The Vamps' decidí abrirla y me encontré con una escena bastante graciosa. Tristan saltando encima de un sofá. Connor golpeando una mesa con dos baquetas y James utilizando ¿un bote de laca? De micrófono. De repente James paró y nuestros ojos se cruzaron.
-No estamos solos chicos- dijo riendo. Tris y Connor me miraron y ambos corrieron a tirarse encima mío.
-Chicos chicos- comencé a reír.
-¿Te ha gustado?-dijo Tris más enérgico que nunca. Asentí sonriendo.
-Lo habéis hecho increíblemente bien. Estoy tan feliz y tan orgullosa - dije acariciando la mejilla de Connor.
-Gracias mamá -dijo bromeando. Les abracé de nuevo.
-¿Me dejáis un momento a solas con James?-dije algo nerviosa. Violet la gente ya sabe que estáis juntos, tranquilidad.
-Uhhhh-dijo Tris levantando las cejas. Reí. Connor me dió un beso en la frente y ambos cruzaron la puerta. Rápidamente me acerqué a James y le abracé. Un olor a One Million se coló por mis fosas nasales.
-Se nota que te acabas de duchar - dije sonriendo.
-Vaya. Gracias cielo qué bonitas palabras- reí. Me aparté y cogí sus mejillas.
-No me cabe el orgullo en el pecho después de haberte visto ahí arriba- dije sonriendo. Sus ojos brillaban.
-Yo no me puedo creer que haya pasado. Encima desde arriba ves a todo TODO el mundo. Y la gente gritaba y algunos cantaban. No sé. Y no he tenido ningún problema con la guitarra ni nada. Era muy cómodo moverse por el escenario. No sé. Me he sentido como en casa - dijo mientras acariciaba mi espalda.
-Es genial que puedas decir eso- dije mirándole.
-Si... es casi casi la misma sensación que cuando estoy contigo. Pero casi, no del todo - dijo mirando hacia abajo. Sonreí algo avergonzada.
-Vaya - dije rozando mi nariz con la suya. Ambos comenzamos a reír.
-Aunque todos han estado muy enérgicos. Ha sido genial.
-¿A qué te refieres?
-A que todos lo han hecho bastante mejor que yo... pero bueno no he visto a nadie descontento así que las críticas serán pocas. O eso espero...
-¿Pero qué dices? ¿Por qué dices eso ahora?-dije frunciendo el ceño- se encogió de hombros.
-Porque es así. Me veo que... no se. Tengo poca fuerza en el escenario. No soy enérgico.
-Eso no significa que lo hagas peor o mejor. Simplemente es distinto. Ni se te ocurra pensar de otra forma.
-Es que no sé. Me siento feliz porque la sensación de tocar ahí es maravillosa. Pero si lo miro desde un punto de vista exterior, siento que no doy la talla- acaricié sus mejillas con mis pulgares. Negué con la cabeza.
-Estas muy lejos de la realidad ahora mismo. Cuando te veas desde fuera lo verás. Ha sido increíble ver como tocas la guitarra y cantabas y te movías. Era tan mágico verte así - dije sonriendo.
-Si a ti te ha gustado tengo suficiente- de repente noté sus labios encima de los míos. Echaba de menos esa sensación. De repente caí encima suyo, por suerte se había sentado en el sofá.
-Nos estamos perdiendo el show - dije mientras me besaba.
-Tenemos diez días más para verlo - dijo besandome de nuevo. Paré. Me miró.
-¿Vienes no?-dijo cogiendo mis manos. Me quedé frenada por un momento.
-En cinco días es la última sesión de quimioterapia de mi madre. Si todo sale bien... claro - me mordí el labio.
-Pues vienes para estar con ella, y cuando acabe vuelves con nosotros. Brad hará algo parecido.
-¿Y de donde saco el dinero de los billetes de tren cielo?- dije realista.
-Yo puedo pagartelo- dijo encogiendose de hombros. Negué.
-No voy a dejar que me lo pagues todo. Te lo agradezco pero no...
-Violet por favor. Tú eres mi fuente de motivación y apoyo no puedes no estar en los shows. No - dijo negando rápidamente con la cabeza. Sonreí sin que me viera. Me costaba pensar que yo podía producir algo así en una persona. Me miró. Hizo un puchero y le abracé.
-Iré- se apartó para besarme de nuevo. Sonreía- con una condición.
-La que sea - dijo sonriendo.
-No vuelvas a pensar que lo haces peor. Es la cosa más estúpida que he escuchado nunca - dije negando con la cabeza.
-Lo intentaré. Lo prometo - dijo mostrandome su meñique. Junté el mio con el suyo.
-Estoy tan feliz ahora mismo - dijo mirándome tan intensamente que hasta sentí vergüenza por un momento.
-Y yo... yo también estoy muy feliz - dije sonriendo. Mi cabeza dió un pinchazo. Mierda. Me acaricié la sien cerrando los ojos. Siseé.
-¿Estas bien?-dijo incorporándose. Asentí sin abrir los ojos.
-Ya me dijeron los médicos que los dolores de cabeza repentinos serían algo muy común- me encogí de hombros.
-Te juro que lo pienso y la cárcel me parece poco castigo para ese cabron malnacido.
-Shhhh. No lo pienses. Este momento está siendo muy bonito como para destrozarlo pensando en tu padre - dije acariciándole las mejillas de nuevo. Me encantaba hacer eso. Asintió y besó mi frente. Después mis labios. Me abracé a el. Tal vez yo era su fuente de motivación. Pero él sin duda era mi fuente de fuerza.
-¿Te importa si recojo algunas cosas cielo?- negué con la cabeza. Busqué mi mochila. Tenía ganas de escribir. ¿Iba a hacerlo delante suyo? Bueno. No tiene por qué saber lo que escribo. Le miré. Estaba distraído limpiando la guitarra y de más. Cogí la carpeta roja y la abrí. Había escrito ya tantas cartas sin destinatario que no sabia como sentirme al respecto. Era un vicio que no podía parar. Saqué una hoja en blanco y agarré el boli que tenia enganchado en la carpeta.

Querida Bestia:
Hacía bastante que no me pasaba por aquí. Tenía muchas ganas de escribirte para decirte lo muy orgullosa que estoy de ti. Nuestra guerra ya ha acabado. Los estúpidos mensajes y retos ya han terminado. No tenemos ningún obstáculo para estar juntos. No sabes lo bien que sienta decir eso. Espero que todo vaya sobre ruedas ahora. Aunque si no es así estoy segura de que sabremos manejarlo como hemos hecho hasta ahora. Que sepas que ser tu fuente de motivación es un halago. Te estoy viendo ahora mismo tan concentrado y emocionado recogiendo tu guitarra que lo único que puedo sentir es felicidad dentro de mi. Gracias por hacerme tan feliz y tan fuerte.
Te seguiré escribiendo. Te adoro Bestia.

Miré el papel y sonreí. Negué con la cabeza de lo cursi que había sido escribiendo esto.
-¿Que escribes?-dijo mirándome. Mierda. Los nervios atacaron. Violet piensa rápido.
-No sabría decírtelo ni yo - dije riendo. Negó con la cabeza.
-A saber lo que habrá dentro de esa carpeta. Siempre la llevas contigo como si fuera oro.
-Es que ES oro.
-¿Puedo ver lo que hay dentro?-dijo cerrando la funda de la guitarra. Negué. Guardé la hoja en la carpeta y la carpeta en la mochila.
-Nadie lo ha hecho y nadie lo hará.
-¿Por qué? -dijo haciendo un puchero mientras se acercaba a mi. Me encogí de hombros.
-Algún día tal vez - dije riendo. Aunque yo misma sabía que eso era mentira.