Capítulo 24.

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Narra James:
Llegamos a casa y entré. Escuché voces en la cocina así que nos dirigimos para alli.
-Hola mama. Hola Sophie.
-¡James!-dijo mi madre.
-¿Pero que te ha pasado? ¿Por que de repente eres guapo?-dijo mi hermana mirándome.
-No se si agradecerte el cumplido.
-Cielo estas guapísimo ¿Que te has hecho en el pelo?-dijo mi madre tocándome la cara. Violet estaba casi escondida detrás de mi así que la cogí de la mano y la puse casi delante mio.
-Ella. Todas las dudas que tengáis se las preguntáis a ella, yo voy a darme un baño.
-¡Violet!-dijo Sophie abrazandola.
-Bueno cuéntanos que habéis hecho - dijo mi madre. Vi como se sentaban las tres en la mesa y antes de irme miré a Violet. Ella me miró y sin hacer ruido movió los labios para decirme.
-Te odio - reí.
-Te quiero - dije imitandola. Subí con las bolsas y abrí mi armario. Vacié una de las bolsas que llevaba y metí ahí toda la ropa de la que quería deshacerme, al final tuve que vaciarlas todas para meter la ropa vieja ya que era bastante. Deje algunas cosas que si me gustaban en mi armario y metí todo lo que me había comprado. Alomejor es demasiada ropa, pero agradezco haber ido con Violet, si no se que hubiese vuelto con las manos vacías. Ay Violet... se me hacia raro pensar tanto en ella pero... casi era algo que no podía evitar. Y más ahora que se que esta pasando por un mal momento y no me lo quiere contar.
Picaron a la puerta y abrí. Ahí estaba ella con su gran camisa de cuadros y su pelo liso. Me encantaba.
-¿Necesitas ayuda? -dijo recolgándose en el marco de la puerta.
-Ya casi he acabado pero entra.-entró y vi como miraba mi cuarto.
-Tu cuarto mola muchisimo. Sobretodo por esa guitarra colgada en tu pared.
-Me la regaló mi abuela. Es de las pocas cosas que me traje de Bournemouth.
-Es genial.-dijo sonriendo. Me encantaba cuando sonreía sin la mirada vacía, porque sabía que estaba feliz.
-Dios mio ¿Son todas tuyas?-dijo señalando mis guitarras.
-Si - dije riendo.
-¿ESO ES LA FIRMA DE ED SHEERAN? JAMES ME MUERO ¿CUANDO HAS CONOCIDO TU A ED SHEERAN?-dijo cogiendo mi guitarra acústica efectivamente firmada por Ed.
-Jajajajajaja. Fue en su concierto de Londres hace unos meses. Tuve la suerte de conocerle y le pedí que me la firmase, y ahí está.-me miró.
-Que fuerte. Que suerte tienes - dijo haciendo un puchero mientras miraba la guitarra. Terminé de poner los zapatos nuevos y ella seguía con la guitarra en la mano. Vi como la cogia, aunque era bastante grande para ella.
-Yo uso las de cadete. Aunque sepa tocar la guitarra tengo las manos demasiado pequeñas para estas - dijo riendo.
-Lo he imaginado.-me senté con ella en la cama y le coloqué bien la guitarra.
-¿Eres diestra no?
-Si - dijo mirándome como si fuera obvio.
-Yo también - dije riendo. Coloque la guitarra de forma que ambos pudiésemos tocar y puse su espalda en mi pecho.
-Échate un poco hacia atrás a ver si aprendes.
-No puedo -dijo casi gritando.
-Sht ya veras como si. ¿Give Me Love te la sabes?
-Obviamente.
-Comencé a poner sus dedos en las cuerdas.
-Yo tocaré la primera parte antes del coro. Luego sigues tu y intentamos tocar el estribillo ¿Te parece?
-Vale.-comencé a tocar. Tocar la guitarra era una de las mejores sensaciones del mundo. Toqué el último par de acordes y entonces le tocó a ella. Al principio iba muy lenta.
Toqué dos acordes en medio de su parte y vi como sonreía. Acabo y tocamos el estribillo así ella no tenía que mover mucho los dedos.
-My my my my give me loooooove-dijimos los dos gritando. Comenzamos a reír y cogí la guitarra para ponerla donde estaba.
-Quedate a dormir.-eso salió sin querer de mi boca, pero tampoco creo que se lo tome tan mal... contando con que ya habíamos dormido juntos una vez...
-Mmm...hablare con mi madre. Un momento.-cogió el movil y entró en el baño. Intenté escuchar algo...se que estaba mal pero la preocupación a veces te lleva a hacer cosas que no quieres.
"¿Papá? ¿No está mama?...Joder otra semana más...¿En serio? Hablare con Rose para hacer un par de turnos más y no le digas nada a mamá por favor...Ah llamaba porque James el vecino ya sabes de la familia McVey me ha ofrecido que me quede a dormir ¿Puedo?...Se me ha olvidado avisarla y no quiero dormir sola en casa papá...¡NO vamos a hacer nada inapropiado - casi se me escapa una risa al escuchar eso- ¿Por que todos me decís lo mismo? Pesados. Entre tu y Brad me tenéis frita...Que si que si mañana os llamo y cuando vaya al hospital me decís bien el plazo.-¿El hospital? ¿Estaban en el hospital?-
Adiós papá dile a mamá que se cuide y que la quiero mucho - pude imaginarla poniendo un puchero- Adiós. Ah y dile a Brad que mañana voy a acribillarle a preguntas de Andy.-reí- ¡Os quiero!"
Me senté en la cama haciendo ver que tocaba la guitarra de nuevo. Salio del baño.
-Bueno no hay problema así que acepto tu petición. -dijo sonriendo.
-¡Perfecto!-dije cogiendola en brazos. Me la colgué en el hombro. Era tan pequeñita que casi no notaba su peso.
-¡Oye sueltame!-empecé a correr mientras bajaba las escaleras y al llegar a abajo comencé a darle vueltas y vueltas-¡James que vomito!-fui a la cocina y vi como mi madre preparaba la cena. -¡Señora McVey dígale que me suelte!-dijo casi sin poder hablar.
-No seas malo James bajala - la baje de un golpe.
-¡Mi pie! ¡Te odio mucho! -dijo mirándome con cara de enfadada. Creo que es una de las caras más adorables que he visto en mi vida. La cogí al estilo nupcial y la lleve hasta el sofá del comedor. Me senté con ella encima.
-A ver...¿Cual es el pie que te duele?
-El izquierdo.-le quite la bamba y le hice mover el pie.
-¡Oye bastante me duele ya!-dijo frunciendo el ceño.
-Es para que no te duela más ya veras -comencé a masajearle el pie. Lo cual era un poco raro aunque llevase calcetines pero no me incomodaba- tienes unos pies tan pequeñitos - dije riendo.
-Ya ya lo se James soy pequeñita tengo las manos pequeñitas los pies pequeñitos y el cuerpo muy muy pequeñito.
-Y el cerebro...dije susurrando sabiendo que me escucharía. Sentí un golpe en el brazo.
-¿Nunca has escuchado el dicho de "alto como un pino tonto como un pepino"? Creo que te viene a la perfección - dijo fingiendo una sonrisa.
-Es broma saltamontes - dije mirándole - ven aquí - dije tendiendole mis brazos. Ella se acercó y la abracé pegandola todo lo posible a mi. Me encantaba su olor y el hecho de que su cuerpo fuese tan pequeño me daba más ganas de abrazarla. Era una sensación de protección que me gustaba. Puso su cabeza en mi pecho y no quería moverme de ahí.
-¿Que vamos a cenar?
-Creo que sopa.
-Genial porque hace un frio...
-¿Tienes frio?-dije mirándola.
-No ahora no - dijo cerrando los ojos.
-Por cierto para dormir ¿Quieres que te deje ropa mía o de mi hermana?-dije riendo.
-Soy pequeña pero creo que las camisetas de tu hermana no me servirán.
-Ven- la levanté y fuimos a mi cuarto. Le di una de mis sudaderas viejas y le pedí a Sophie que le prestase ropa interior y esas cosas de chicas...se metió en la ducha y le dejé la ropa fuera.
-No tardes que después voy yo.
-Vale.
-Bajé a ayudar a mi madre y entre a la cocina.
-Que guapo estas cielo me encanta ese peinado.
-Y a mi - dije sonriendo- me encanta el cambio en si.
-¿Violet te ha ayudado no?
-Si es ella la que ha escogido la ropa y el peinado y todo...me gusta mucho.
-¿Te gusta mucho lo que ha escogido o ella?
-Mamá no empieces - dije intentando no sonreír.
-No empiezo solo estoy preguntando. No os conocéis de hace mucho y ya la invitas a dormir y todo - dijo sonriendo.
-No se la verdad es que me cae muy bien pero... no me gusta - sabía que una parte de mi estaba mintiendo pero tampoco tenía muy claro lo que me hacía sentir esta chica, ni quería tenerlo.

Letters To You - James McVey.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora