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A la mañana siguiente me desperté abrazado a Jack, y apareció una sonrisa en mi cara, aunque aún no estaba 100% despierto. Me acurruqué un poco más cerca suyo, si era posible y volví a cerrar los ojos, concentrándome en el latido de su corazón. Él se removió ligeramente y me acarició levemente el pelo.
Sabía que ambos estábamos despiertos, pero ninguno dijo nada, simplemente disfrutando en silencio de despertar juntos.

Entonces me incorporé un poco para mirarle a la cara, aún adormilado, y con los ojos medio abiertos me dedicó una bonita sonrisa.

"Buenos días, Alex" dijo con voz ronca. "Qué bien sienta decir eso, joder" comentó aprisionandome entre sus brazos. Yo solté una risa y le devolví el abrazo.

"Buenos días, Barakat. Ojalá despertar así todos los días ¿eh?" respondí sin soltarle.

"Sí, la verdad. Además, estás increíblemente sexy recién levantado" comentó haciendo que me riera.

"Pues tú durmiendo eres muy adorable" le rebatí volviendo a mirarle a los ojos.

"Tú si que eres adorable" dijo, y dejó un fugaz beso en mi mejilla. "¿Vamos a desayunar? Tengo un hambre que me muero" Preguntó incorporándose para sentarse en la cama. Yo me quedé tumbado boca abajo, y me negué a salir con un gruñido.
"Veeeenga Alex, no me obligues a empujarte" amenazó zarandeando mi hombro para que me levantara.

"Pfff voy" dije remoloneando un poco, antes de levantarme del todo. Jack, que ya estaba de pie, me observaba divertido y con una sonrisa tonta en su cara. Cuando estuve levantado se me acercó por detrás y me abrazó por la espalda.

"Buenos días, bae" me susurró al oído haciendo que un escalofrío me recorriera de pies a cabeza. Después sujetó mi barbilla suavemente con su mano y me dio un lento y cariñoso beso.

Más tarde fuimos a desayunar, y estuvimos hablando de todo un poco, una charla bastante animada y sin que se nos borrara la sonrisa que teníamos desde por la mañana.
Sin embargo en ese momento oímos el teléfono de Jack sonar.

"Hola mamá, ¿qué pasa? ... ¿Qué?" vi como la sonrisa previa se tornaba en una cara de preocupación según avanzaba su conversación" Vale... Bueno, ya me vas diciendo por whatsapp... Sí, no te preocupes... Y yo a ti. Adiós" terminó, colgando el teléfono. Algo no iba bien.

"¿Que pasa?" pregunté intrigado.

"Pues bueno..., no se si te conté que mi abuelo estaba malo. Pues ha tenido una recaída. Los médicos dicen que se recuperará, pero yo qué sé..." hizo una pausa antes de continuar "Así que mis padres se han ido al pueblo con él y mi abuela unos días, eso me han dicho" dijo con la mirada fija en el suelo. Yo en ese momento me levanté y le di un fuerte abrazo. Quería que sintiera que yo estaba ahí para él, tanto como él para mí.

"Intenta tener fe en los médicos, ellos sabrán que hacer. Seguro que tu abuelo mejora" no sabía que más decir, así que me quedé ahí parado, sin moverme, simplemente abrazándole. Él me devolvió el abrazo y acomodó su cabeza en el hueco de mi hombro.

"Gracias, Alex" respondió, y sentí su aliento en mi cuello. Yo me separé lo suficiente para poder mirarle y besé sus labios, dejando que me disfrutara, que se distrajera de la conversación telefónica. Jack me agarró por la parte baja de la espalda, mientras yo con mis manos jugaba con su pelo. Sus besos poco a poco se dirigieron a mi barbilla y después a mi cuello, y noté como sus manos bajaban un poco más, haciendo que me sonrojara levemente.
Despacio nos dirigimos al sofá, y nos tumbamos juntos sin romper el beso. Entonces se alejó unos centímetros para mirarme. Yo le miré de vuelta, pero sus ojos lucían algo apagados.

"¿Estás bien?" pregunté acariciando su mejilla. Nuestras caras estaban tan solo a unos centímetros de distancia.

"Sí, no pasa nada, es una tontería. Solo estoy preocupado, ya está" dijo restándole importancia.

"Oye, primero, no es ninguna tontería. Y segundo, es normal que estés preocupado. Pero seguro que tu abuelo mejora. Si es igual que tú, simplemente por cabezonería aguantará" y con esto logré sacarle una sonrisa.

"Sí, es bastante tozudo" respondió medio riéndose. "Te quiero mucho, Alex" susurró contra mis labios, para después dejar un casto beso, en el cual no pude evitar sonreír. "Mañana es tu cumpleaños, ¿qué vas a querer?" preguntó después.

"Con estar contigo me vale. Aunque no se como voy a hacerlo, porque mis padres querrán pasar el cumpleaños conmigo..." contesté ante su pregunta. No había hablado nada con mis padres, pero supongo que algo querrían hacer. Son demasiado tradicionales.

"Encontraremos la manera" respondió. "Vas a tener que irte si no quieres que te pille tu madre" dijo algo apenado. Lo decía por mi bien, pero se veía que lo menos que quería era que me fuera.

"Ya... Tienes razón, pero no puedo dejarte aquí solo..."

"No me seas empalagoso ahora, Gaskarth. Estoy bien, ¡en serio! No quiero que tu madre te pille y no podamos quedar mañana" aseguró sonriendo.

"Está bien... Pero háblame por whatsapp ¿vale?" pregunté levantándome del sofá y dirigiéndome a la puerta. Él se incorporó y me acompañó a la entrada.

"Vaaaale mamaaa" respondió divertido. "Nos vemos mañana, Gaskarth. Ya tendrás un año más, espero que no te venga la madurez de golpe y te conviertas en un gilipollas"

"No, tranquilo, eso no va a pasar" dije, haciendo que los dos nos riéramos. "Hasta mañana, Barakat. Te quiero." Le di el último beso y salí dirección a mi casa.

Llegué a mi casa y entré por la ventana sobre las 12:30 de la mañana. Justo en ese momento oí los pasos de mi madre acercarse, así que lo más rápido que pude tiré los zapatos al suelo, me metí en la cama, e hice que estaba dormido.

"Alex, venga despierta, que hoy comemos fuera y después nos vamos a una Fiesta de Reuniones, que hemos sido invitados" yo fingí despertarme y asentí con la cabeza. En cuanto mi madre se fue suspiré de lo cerca que había estado, y después me dirigí a la ducha.

Fui con mis padres a una de sus típicas comidas antes de las Fiestas de Reuniones, en las que no se cuantas personas se juntan para comer, aunque cada familia hablara de sólo lo suyo porque no conocía a los de al lado.

"Bueno Alex, mañana es tu cumpleaños" dijo mi madre cuando trajeron el primer plato. La tensión de días anteriores no se le notaba, aunque sabía que estaba presente. Yo asentí con la cabeza, sin apartar la mirada de mi plato.

"Pues lo que te iba a decir, que hemos invitado a tu tía. Vendrá por la mañana y se quedará todo el día. No tendrás clase con María Jesús por la tarde, así que iremos a probarte algunos trajes de novio que encargamos" en ese momento levanté la mirada del plato. No. No iría a mirar eso el día de mi cumpleaños. Sabía que les importaba poco mi opinión, pero me daba igual. No me resignaría a pasar mi cumpleaños mirando trajes para una boda que no quería que tuviese lugar. No.

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Capítulo 14!! Espero que os esté gustando, a mi me está encantando escribirla 😋

Hoy he vuelto a la rutina, vuelven los exámenes, agobios, y estrés, pero siempre con una sonrisa 😁😂

Muuuchas gracias por leer y nos vemos en el próximo capítulo

Start Of Something Good (Jalex)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora