Amor ilegal | Terminada. [Sin editar]

Capítulo 36

-Es James Jones, tu padre Alice -suspiró y volvió a tomar su cabeza con sus manos.

-¿Qué dices? -alcancé a decir antes de agachar mi cabeza y llorar, "así que en esto andabas, papá" dijo una voz en mi cabeza. Miré a Drake con los ojos cristalizados.

-Lo siento mucho -me miraba arrepentido, como si hubiera preferido no decirme.

-No entiendo, ¿por qué no le importa su familia?

-Alice...

-Déjalo, gracias de todos modos por avisarme -traté de sonreír pero en vez de una sonrisa, lo único que pude hacer fue una mueca.

Me paré y salí de la oficina de Drake, me sentía horrible, ¿por qué me tenía que pasar todo a mí? no entiendo, primero Drake, luego Jack y ahora James. El ascensor se detuvo en el quinto piso, iba repleto por lo que preferí bajar por las escaleras. Nunca había estado en este piso, aquí era en donde tenían a los detenidos en las últimas 24 horas. Sentía curiosidad por ver que había a la vuelta del pasillo, asomé mi cabeza y habían unas cuantas personas con esposas en sus manos, esperando entrar para testificar. Reconocí a uno de los sujetos, era papá, no lo veía hace 5 meses... se había borrado completamente del mapa y ya veo por qué. Se giró y cruzamos miradas, jamás imaginé ver a James en esa situación, se percató de que estaba llorando y me habló.

-Hija -dijo agachando su cabeza- no quiero que me veas así.

-No me digas así -lo miré fría.

-Alice, por favor...

-¿Ahora te importa como estamos? -avancé y quedé parada en frente de él- Ya es tarde, te perdiste años importantes de nuestras vidas James.

-No me digas James, soy tu padre.

-Pues no te haz comportado como uno.

-Hija yo... -lo interrumpí.

-No fuiste a mi graduación, tampoco a mi cumpleaños, no estuviste cuando Tom se mudó, ni cuando nació su bebé y supongo que tampoco estarás para cuando decida casarse. Lo mismo conmigo -lo miré furiosa.

Se acomodó en el asiento sorprendido, no sabía ni la mitad de todas las cosas que le había mencionado. ¿Y cómo no? en 5 meses llegas a perderte de un millón de cosas. Se acomodó en el asiento y suspiró. Me daban ganas de salir corriendo, de olvidarme de todo, de hacer como si nada hubiera pasado, pero ya era imposible.

-Tuve problemas, ¿Tom se mudó? -preguntó tocándose los dedos nervioso.

-Ya veo cuáles son -alcé las cejas y antes de irme me giré- arréglatelas solo, como siempre.

Todos en el pasillo nos miraban sorprendidos por la situación, me di la vuelta y caminé en dirección a las escaleras, escuché a mi padre gritar pero no me volteé. Bajé por las escaleras, quería salir de ahí, quería llegar a mi departamento y no volver a salir más. Subí a mi auto y fui a mi departamento, apenas cerré la puerta el sonido del teléfono me sorprendió.

-Diga -contesté.

-¿Hablo con la Señorita Jones?

-¿Si?

-Su padre, James, tiene derecho a una llamada. Pidió contactarse con usted.

-Claro, póngalo al teléfono -dije irritada.

-¿Hija? -preguntó- necesito que me ayudes.

-Te lo dejé claro hace un rato.

-Alice, por favor, quiero reparar las cosas.

-Tuviste años para hacerlo, pero preferiste perder a tus hijos por tu maldito trabajo.

-Hija -suspiró- lo siento. Lo siento por no haber estado ahí para ustedes cuando me necesitaron -no pude evitar sentirme algo triste por papá, más que mal, él era mi padre. Controlé mis lágrimas, para que no salieran de mis ojos y respiré profundo.

-¿Por qué te metiste en esto papá? -le pregunté.

-No puedo decírtelo -dijo serio, estaba empezando a molestarme.

-¿Por qué no?

-Pueden dañarte Alice, y no quiero eso -dijo simplemente y luego se calló.

-Entonces debiste haber pensado en las consecuencias -le dije seca y colgué.

Mi vida había pasado de ser perfecta a totalmente horrible. Primero Drake, luego Jack y ahora mi padre. Tom era el único que me quedaba, pero no podía decirle nada, porque no quería que los problemas de nuestro padre afectaran su vida, de ahora ser padre.

¿Cómo le explicaría a Connor en un futuro que su abuelo estaba preso por tráfico de drogas? Todo era un desastre, me sentía sola y frustrada. Comencé a extrañar a Jack, y las tardes que pasaba con él. Pero no, él era un asesino, y si aún me quedaba algo de sentido común, tendría que aceptar, aunque no quisiera, que haberlo delatado había sido una buena decisión.

Se me quitó el hambre por completo, con suerte me comía un yoghurt al día y con eso me bastaba y sobraba. Habían pasado ya tres días desde que no hablaba con mi padre, y por lo que era de esperarse, de seguro no volveríamos a hablar. Me senté en el sofá y comencé a recordar a Jack. Era un maldito, un idiota que quiso asesinarme, no podía creerlo. Sin darme cuenta las lágrimas comenzaron a llenar mis mejillas y no podía pararlas.

Jack era al que habían estado buscando durante meses por asesinar a esas chicas, pero lo que no entendía era: "¿Por qué no me mató, pudiendo hacerlo?". Luego pensé en todo lo que pasamos juntos, como nos conocimos, no pude evitar sonreír al recordarlo, todas las salidas y noches que pasamos juntos. Realmente me había enamorado de él. Me había enamorado hasta tal punto que muchas veces no pensaba con la cabeza y no me importaba que él haya sido un asesino, y es que Jack había cambiado.

Habían veces, durante las semanas que han pasado, eternas para mí, en las que pensaba en ir y tratar de buscarlo. Dejar de lado lo que mi cabeza me decía y seguir a mi corazón, decirle cuanto lo amaba, cuanto lo necesitaba; pero el sentido común volvía, todos esos pensamientos se iban y quedaban como una mala idea, como una estupidez. ¿Debería buscarlo o simplemente seguir con mi vida, o lo que quedaba de ella? No podía resolver eso, necesitaba hallar una respuesta, pero no la encontraba. De lo único que estaba cien por ciento segura, era de que lo amaba.

___________________________

Es corto, lo sé. Pero si quieren puedo subir el 37 hoy también. Necesito saber qué opinan, y si quieren leer el siguiente, comenten y en un rato les subo el próximo. En fin, gracias por todo, sus comentarios significan mucho <3