Amor ilegal | Terminada. [Sin editar]

Capítulo 19

-Suerte nena -me dijo el chico.

Apreté más fuerte el volante y ambos comenzamos a acelerar nuestros autos, hasta que el semáforo en verde indicó la partida. Iba ganando, pero me alcanzó pronto, primera cuadra, lista. Ibamos a las par, no iba a darle mi número, así que tenía que ganarle.

Pasé cambios a la velocidad de la luz y pronto se fue quedando atrás. Ví el tablero del auto: 180 kilómetros por hora. Sonreí, sentía como la adrenalina recorría mi cuerpo, pero una nube de humo gris proveniente de mi auto hizo que me detuviera luego de pasar el último semáforo. Al menos había ganado.

Me estacioné en la orilla y me bajé para revisar mi auto. Al abrir el capot, un olor a aceite quemado llenó mis pulmones provocando que tosiera. Era el radiador, que hace tiempo me estaba causando problemas. El chico del Camaro se estacionó delante de mí y se bajó.

-Manejas estupendo -me dijo dándome un papel con su número- John Tyler -me dijo sonriendo.

-Alice Jones -estrechamos las manos y él se acercó a revisar mi auto.

-Creo que es el radiador -me miró- ¿Le echaste agua?

-Sí, sí lo hice, pero creo que tiene una fuga -hice una mueca y cerré el capot.

-Hay un mecánico a dos cuadras y a la derecha de aquí -me sonrió.

-¿Es bueno?

-Te dejará el auto sin problemas. Si no, puedes llamarme para quejarte -me guiñó el ojo.

Me reí mientras él subía a su auto y se marchaba. No tardé en encontrar al mecánico. "Reparaciones Holt" estaba escrito arriba de una antigua casa llena de autos. Me estacioné y comencé a buscar a alguien que pudiera ayudarme.

-¿En que puedo ayudarla señorita? -dijo un anciano amablemente.

-Mi auto tiene problemas, creo que el radiador ya no funciona.

-Estaciónalo dentro de la cochera y veremos que podemos hacer -me sonrió y asentí. Ya en la cochera, abrí nuevamente el capot y salió ese humo y ese olor asqueroso.

-Espera aquí -me dijo el anciano- voy por Angus -y desapareció por la puerta.

-Hola -me dijo al rato un chico moreno de ojos claros. Lo saludé también- Bob me dijo que tenías problemas -se acercó al auto limpiando sus manos con aceite en una toalla.

-¿Tú eres Angus? -le sonreí.

-Sí, soy yo -me devolvió la sonrisa y luego posó su vista en mi auto- Creo que tiene una fuga -me dijo señalando una manguera, me acerqué a ver.

-Huele horrible. ¿Por qué no te bañas Angus? -bromeó una voz masculina, pero no le presté atención y me agaché para ver mejor "la fuga".

-Muy gracioso Norries -le dijo Angus a ¿Jack? me di vuelta y ahí estaba.

Sonrió al verme. Llevaba puesta una musculosa blanca, llena de aceite y unos jeans rotos en las rodillas. Definitivamente se podría poner un saco y le quedaría bien.

-Las calzas ajustadas te quedan bien -me dijo mientras se mordía el labio inferior, me di cuenta de que llevaba puesta la ropa de deportes.

-Puerco -le dije, me apoyé en mi auto y él rió- ¿Y qué haces aquí?

-¿Que qué hago aquí? -enarcó una ceja- Yo trabajo aquí muñeca -rodeé los ojos- Déjalo Angus, yo lo arreglo -le dijo al moreno.

-¿Seguro que podrás con esto Norries? -bromeó el moreno.

-Si puedo con ella, puedo con todo -y ambos rieron.

Angus se fue por donde había salido hace unos minutos. Bufé. Jack se acercó a revisar el auto.