Camren One Shots (2)

Sad Beautiful Tragic

Maratón 9/?

Segunda parte de "The Weight"

"Larga nota escrita a mano, en lo profundo de tu bolsillo, palabras, lo poco que significan cuando es demasiado tarde, me paré junto a las vías, tu cara en una cabina, chicas buenas, con esperanza lo serán y solas esperarán"

Los Ángeles, Estados Unidos

*7 años después*

-¿Qué tienes ahí Amanda?.- le pregunté a la pequeña al ver como escondía algo detrás de su espalda.

La pequeña rubia sonrió, me acerqué a ella lentamente hasta agacharme a su altura, elevé una ceja y ella soltó una pequeña carcajada.

-Nada Mami.- dijo inocente y yo sonreí para después besar su frente.

-Sé que tu Papá te da dulces cuando vas a su casa, no me mientas.- murmuré y ella hizo un puchero.

-Pensé que me los quitarías.- respondió y yo negué con la cabeza.

-Claro que no amor, pero no comas muchos ¿Si? Puedes tener caries.- le recordé para después levantarme y tomar mi tostada para darle un mordisco.

-¿Te irás a trabajar ya?.- preguntó mientras se subía lentamente a un taburete.

-Si amor, tengo que ir a la grabación de la nueva película.- le conté mientras masticaba lentamente.

-¿Cuándo iré contigo?.- preguntó inclinando su rostro hacia la izquierda.

-Pronto, hoy van a rodar al aire libre y es una escena peligrosa, quiero que mi pequeña esté a salvo.- toqué la punta de su nariz con mi dedo índice y ella rió.

-¿Quién va a cuidarme? ¿Cindy?.- preguntó haciendo mención a su niñera pero yo negué con la cabeza.

-Tía Dinah vendrá y te sacará a dar una vuelta, te divertirás.- le conté y ella chilló emocionada.

-Amo a la tía Dinah.- dijo y yo sonreí.

-Y ella te ama a ti amor.- respondí para después terminar mi tostada.

La pequeña ojiverde se bajó con cuidado del taburete para después correr fuera de la cocina, reí y negué con la cabeza.

Amanda ya iba a cumplir 5 años y para su edad era bastante activa e inteligente, supongo que lo sacó de mi, obviamente.

Me embarace de Amanda cuando estaba por terminar la Universidad, fue difícil, terminé el año desde mi casa mientras Edward trabajaba y estudiaba al mismo tiempo.

Del tema de Camila no volvimos a hablar, después de quedar embarazada no le envié más mensajes, la dejé ir definitivamente.

Con Edward terminamos después de que Amanda naciera, no había amor, no había nada.

Aún así el rubio adoraba a Amanda y tenía la oportunidad de tenerla con él los fines de semana.

Ahora mismo mi vida se basaba en Amanda y mi trabajo como directora de cine y televisión, era felíz, muy felíz.

Vi la hora en mi teléfono al mismo tiempo que Amanda volvía con una mochila en su espalda, reí y me agache para quedar a su altura.

-¿Ya te vas Amanda Johnson?.- pregunté y ella asintió.

-Si, con tía Dinah.- apuntó la puerta en donde estaba la polinesia.

-Que lindo es tener llaves de tu casa.- aplaudió mientras se acercaba.