¿Tu también lo ves? I Teen Wolf

Veintiocho;

 Llega a casa agotada y hambrienta, aún no son ni las nueve así que le datiempo a cenar algo y cambiarse de ropa. Hace frío en la calle yestá deseando acurrucarse entre sus sudaderas y jerseys de mangalarga, aunque eso sí, se pondrá algo cómodo por si les atacan otiene que salir corriendo hacia cualquier dirección.

Su padre, como de costumbre, debe haber salido de trabajar hace un rato y se ha duchado – de ahí que todo el baño esté lleno de ropa detrabajo –. Seguro que se ha ido a cenar con sus amigos y de cañas,así que le dejará un mensaje para que cuando llegue que no sepreocupe. Si fuera su madre seguro que estaría pendiente de ella acada minuto, como cuando vivían juntas. Y, ahora que lo piensa, todoeste lío no la llama des de hace tres días.. Mañana lo hará sinexcusas.

Abre la nevera, coge un par de huevos, ensalada, tomates.. Tiene mucha hambre y le apetece hacerse algo saludable, aunque seguramentedespués se acabe atiborrando de chocolate o helados, aunque hagafrío.

- Muy bien.. - sonríe, orgullosa de si misma por lo bien que le está saliendo la tortilla – Ahora.. - murmura las cosas para si mientras va de un lado para el otro de la cocina.

Está a punto de acabar con la cena cuando algo la despista. Es como una..¿Sombra? Se gira de repente con un leve cosquilleo en las tripas,pero no ve nada. Que raro.. Deja caer la tortilla sobre el pequeñoplato blanco y aliña la ensalada antes de dejarla caer tambiénsobre el mismo plato. Deja las cosas sobre la mesa del comedor, cogeun vaso de cristal y una botella de coca-cola de la nevera y sevuelve loca buscando el mando para encender la tele, pero no loencuentra:

- ¿Donde narices lo habrás metido, papá? Eres el único que se sienta por aquí últimamente..

Se acaba dando por vencida y lo que busca es su móvil, para asegurarsede que aún tiene tiempo de hacer cosas antes de quedar con loschicos. Le han enviado un par de mensajes, y parecen importantes.Stiles le ha preguntado que ha pasado con Dereck y como está – porque seguramente debe imaginarse que no ha sido fácil para ella -. Sisupiese lo que ha pasado en realidad.. Dios, odia todo esto ysentirse así. No puede mantenerse alejada de ese hombre lobo y aúnno ha conseguido averiguar por qué. ¿Imprimación? ¿¡Pero por queella?! Resopla, contesta como puede sin dar muchos detalles – ya lohará cuando se vean -. También le han enviado un par de mensajesdel instituto sobre clases rutinarias, deberes.. Sonríe pero no loscontesta, aunque le agrada saber que hay gente normal en aquel sitioque todavía piensa solamente en deberes y cosas por el estilo.

Cuando se quiere dar cuenta ya ha acabado con la cena y se ha leído casitodos los mensajes pendientes, incluyendo uno que su hermano pequeñole escribió antes de ayer y no había visto. Le dice que está bien,que lo pasa muy bien en sus clases y con sus nuevos amigos pero queles echa muchísimo de menos.. Les irá a ver en cuanto antes paraquedarse con ellos unas semanas, lo necesita. Aunque seguro quecuando esté allí echa de menos a los chicos.. Más ahora que conoceun mundo que pensaba imaginario antes.

Coge el plato, el vaso y la botella para dejarlos de nuevo en la cocinacuando vuelve a sentir algo tras ella y se gira tan de repente que labotella cae junto al vaso contra el suelo y se rompe, esparciéndoseen mil trocitos por la cocina. Justo entonces le llega un mensaje almóvil, pero ella ya no puede verlo.

Las diez y ya están casi todos allí, menos Peter y dos de los sietehombres lobo que han quedado por venir a ayudarles. Bueno.. YKatherine tampoco ha aparecido. Scott se lleva las manos a la cabezay mira a su mejor amigo por décima vez en cinco segundos, éltambién está preocupado por la chica. Saben que ha quedado conDereck pero él está aquí y ya les ha explicado lo que ha sucedido– aunque en sus ojos pueden ver que hay algo que se guarda -.

- Conmigo ha hablado antes.. - murmura – Le he enviado unos mensajes y los ha contestado a los cinco minutos, diciéndome que estaba en casa.

Lídia se acerca a su amigo y se sienta a su lado, apoyada contra la mesa,mirando a los presentes.