¿Tu también lo ves? I Teen Wolf

Cinco;

 Abre los ojos de golpe, sofocada y perdida, sin saber donde está. Las cajas a medio vaciar dejan poco lugar a dudas, es su habitación. ¿Se ha quedado dormida? No tiene el pijama puesto, si no la ropa de ayer, pero está tapada con las sábanas y tiene la coleta que suele hacerse para irse a dormir.

- ¡Katherine, baja a desayunar o llegarás tarde!

La voz de su padre es como un jarrón de agua helada. No le gusta estar con él, y mucho menos por la mañana, cuando menos habladora y simpática está. Son las siete y media, a estas horas debería estar en el trabajo.

Se viste tan rápido como puede y coge su bolso, los libros que le tocan para hoy y sale corriendo escaleras abajo. Muerde una manzana que le ha dejado su padre y se despide con un beso, no quiere llegar tarde a clase el segundo día de instituto. Se ha prometido a ella misma -y a su madre- sacar buenas notas y poder entrar en una buena universidad.

No tarde mucho en llegar, vive un par de calles arriba y a paso ligero consigue cruzar la puerta principal y sentarse en su pupitre antes que el profesor. Hoy también le toca Química, dos horas interminables de esa asignatura que tanto le gusta y le cansa a la vez.

- Hoy espero poder empezar con el primer tema y seguir con unos cuantos ejercicios.

- ¿Y el trabajo para diciembre?

- Se irá avanzando los miércoles, aunque también deberéis hacerlo en casa.

Agacha la cabeza y se sumerge en la lista de los asistentes a sus clases. Empieza lentamente y levanta la cabeza al final de cada nombre para controlar que sus alumnos levantan la mano. Cuando llega a Scott nadie contesta ni levanta la mano, el chico moreno de pelo corto y ojos alegres no ha asistido. Y su compañero, Stilinski, tampoco. Que extraño.. Pero como no tiene que hacer el trabajo de ciencias con Stiles hoy le da un poco igual que no haya venido. Al menos, a esa clase. Lo que sigue sin comprender es el sueño tan real y extraño que ha tenido esta noche.. Si es que se trataba solo de eso, claro.

Dos horas y diez minutos después, cuando ha sobrevivido a todos esos ejercicios, cruza junto a los demás la puerta de la clase y a continuación la principal. Tiene hambre.

- Un bocadillo de atún y lechuga, por favor.

Una de las camareras del colegio le sirve su desayuno, regalándole un vaso de zumo de naranja por ser el día de la fruta en Beacon Hill. Una estupidez necesaria que hacen en todos lados.

Se sienta en una de las mesas del fondo, apartada del resto, al lado de uno de los grandes ventanales que rodea todo el edificio. Aún tiene que empezarse a leer uno de los libros que se trajo de la costa así que aprovecha mientras disfruta de su bocadillo.

Unas voces la distraen de golpe, haciéndola volver a la realidad tras un buen rato. Son Scott, su novia, Stilinski y una chica pelirroja que camina con aires de superioridad mientras gesticula exageradamente.

- Es que no entiendo lo que está pasando.

-¿Que hayan asesinado a dos personas no te parece suficiente?

Los escucha distraída, como en un susurro que ni siquiera debería oír. Están demasiado lejos.

Frunce el ceño e intenta centrarse de nuevo en su lectura, pero es imposible, a pasado de estar en su mundo a oír absolutamente todo lo que dicen los demás. Incluso algunos sonido como bolígrafos, carpetas que se cierran y el tintineo de los pendientes chocando contra las orejas.

-¡Eh! ¿Que haces aquí sola?

Da un brinco en el banco y dirige sus ojos hacia el chico lleno de pecas y pelo revuelto que la mira con una sonrisa. A sus espaldas Scott y las chicas cogen sitio en la misma mesa, rodeándola.

- Estaba.. Leyendo.

- ¿Dos días y medio sin tenerte?

La pelirroja sonríe interesada antes de presentarse, teniéndole la mano a Katherine.

- Soy Lydia, encantada. Eres nueva, ¿verdad?

- Sí. -acepta su mano y sonríe – Katherine Millers.

Scott abraza a la morena con cariño mientras esta también se presenta y empieza una conversación sobre libros, clases y parejas del instituto. La están entrando en materia -más o menos- para que se situe tan pronto como pueda y empiece a hacer amigos.

- Creo que vamos juntas en historia, filosofía y matemáticas.

- La verdad es que no tengo ni idea, por que llevo unos días..

- Empezar nunca ha sido fácil, ¿eh? Yo entré aquí el año pasado y menos mal que conoci a Scott..

- ¡Oye! - Stiles se queja.

Los demás se echan a reír, escuchando como Stilinski se queja y gesticula como, según sus amigos, siempre hace. Parece un chico bastante bromista y que no suele tomarse las cosas muy en serio, y Kathe espera sinceramente que no sea igual para los trabajos de Química.

Suena el timbre y todos entran en sus respectivas clases, con la esperanza de pasar el día mucho más rápido que el de ayer, o que la noche de hoy. ¿Que ha sido ese sueño tan raro? El bosque.. El chico.. Durante la clase de economía piensa, una y otra vez, en lo real que ha sido la aparición de ese chico y esa bestia tan extraña de colmillo afilados y brillantes.. ¿Es que todo ha sido una paranoia de su cabeza? Con el estrés que ha sufrido estos últimos meses..

Se está volviendo completamente loca.