Veinticinco || Amor, amor y más amor.

9.8K 655 333
                                    

Capítulo 25.
Amor, amor y más amor.

La biblioteca estaba igual que siempre, un silencio sepulcral reinaba a excepción del rasgar de las plumas al chocar con los pergaminos y del ruido de las paginas al ser volteadas. Y con una vieja Madame Pince observando a todos a través de sus ya viejas gafas cuadradas, todos preferían mantenerse callados, esa vieja bibliotecaria sí que daba miedo a veces.

Casi como Malia Malfoy.

James ya llevaba al rededor de hora y media en la biblioteca, entre libro y libro y con sus locas admiradoras escondidas detrás de los estantes para espiarlo y halagarlo entre susurros. Estaba cansado y su cabeza le había empezado a doler gracias a las incontables letras, desde pequeñas hasta muy grandes, que había visto en el tiempo que llevaba ahí.

Fue después de cincuenta intentos cuando sacó un libro muy viejo de tamaño mediano, las páginas eran amarillentas y crujían al voltear de hoja. Pero lo que a él le llamó la atención fue el nombre de aquél libro.

Magias poderosas, poco comunes y casi extintas.
«como mindeers, bizzers, elemengias, etc

Con el libro en mano se acercó a la mesa más alejada de todas, fuera del alcance de la puerta y de sus hirritantes admiradoras.

Una vez acomodado abrió el libro y pasó las páginas con cuidado y atención, buscando la sección de elemengias. Desde esa vez que consoló y besó a Malia ha estado más interesado en ella que de costumbre, más de lo que él quisiera. Le interesaba saber qué era ella en realidad, si ese don que tiene puede llegar a ser peligroso para ella, quería conocer el tema a fondo, así que cuando encontró una página con el encabezado de "Elemengias" y abajo de este los símbolos de los cuatro elementos se le iluminaron los ojos y dejó de buscar para ponerse a leer.

Hoy en día los elemengias no son muy comunes en el mundo mágico ya que estos tienen que nacer ya con ese don. Hay algunos magos y brujas elemengias que no saben lo que en verdad son ya que ellos no nacen sabiendolo, a lo largo de su vida tienen que descubrir por si solos el maravilloso don que se les ha otorgado. No ha habido ni una persona en el mundo mágico que haya sido elemengia sin haber nacido, ya que para eso se necesita emplear una magia oscura muy avanzada, además de quitarle el don solamente al elemengia más poderoso del mundo mágico y llevar acabo un ritual.
Los elemengias tienen el control de los cuatro elementos, pueden manejarlos y controlarlos a su antojo, hacer con ellos lo que quieran pero, sin embargo, necesitan de años de practica para poder controlarlos al cien por ciento.
Todo elemengia tiene un elemento en particular que más se le da, pueden manejar los elementos como quieram pero siempre habrá uno que puedan manejar más que los demás, se dice que esto es gracias a la relación que el o la elemengia tiene con ese elemento o gracias al afecto; es decir, puede ser que ese elemento se les más porque es su favorito o a lo largo de su vida ha implicado mucho.
A pesar de controlarlos por completo deben de tener mucho cuidado al hacerlo ya que la naturaleza también tiene sus límites.
Los elemengias suelen vivir ocultados por toda su vida o, al menos, viven ocultando quienes en verdad son ya que son personas muy poderosas, un poder y un don que es muy difícil que se actualmente y, gracias a eso cualquier persona desearía tener tanto poder. Es por eso que para los elemengias es mejor ocultar su poder que mostrarlo al mundo mágico.

Juntos por el destino » James Potter. Where stories live. Discover now