CAPITULO 49

2.5K 166 101
                                    



―No te quedes callada, di algo ―su voz me regresa a la realidad y lo miro a los ojos. Deseo con todas mis fuerzas encontrar incredulidad en ellos ― ¿Meredith?

Parpadeo un par de veces antes de contestar. No puedo quedarme callada por siempre, ¿o sí?

― ¿y tú le creíste?

Su ceño se frunce, supongo que aquello lo ofendió un poco.

―Claro que le creí, ¿Por qué iba a mentir? Está arrepentido por no haberme apoyado en nuestra relación―toma mis manos, sus labios se mueven pero yo no puedo prestar atención. Mi cabeza dice que todo es una mentira, que es un truco, que algo está muy mal ―. Tuvimos una larga charla, me pidió perdón por todo. ¿Entiendes lo que es eso? Mi papá jamás me había pedido perdón por nada.

No quiero romperle el corazón, ¿Quién soy yo para hacer eso? Yo sé que Grayson sufre mucho por la indiferencia de su padre y ahora que habían hablado y aclarado las cosas, yo no puedo meterme en eso... sea verdad o sea mentira. Creo que este tema no me incumbe a mí.

Así que, finjo una sonrisa.

―w-wow ―sueno falsa y el timbre de mi voz está apagado ―eso, es genial. Estoy muy feliz por ti, amor.

Me conoce, sabe que no estoy siendo sincera con lo que digo. Su sonrisa se desvanece poco a poquito. Inclina su cabeza y acaria mi mejilla.

―Entiendo porque desconfías de mi padre. Sé lo que te dijo.

Mis ojos se abrieron de golpe. ¿Qué demonios? ¿Cómo puede estar tan tranquilo si sabe que su padre me amenazó?

― ¿Cómo?

―lo hizo porque me quiere, amor ―sonríe, seguro de sí ―. Sé que te dijo que deberías de ir a Europa y todo eso. Solo estaba molesto, ¿de acuerdo? Solo, ya no vuelvas a irte así, por favor. Entiendo que el tema te puso sensible y que por eso te fuiste de la casa, pero no vuelvas a hacerlo. Me asusté como el infierno.

Sean es un mentiroso hijo de puta y cada día que pasa siento que mi odio se incrementa. Le mintió a Grayson para tenerlo de su lado. Mi escapadita le hizo tomar ventaja y Grayson ahora cree que soy demasiado "sensible".

Estoy furiosa.

―Grayson... ―comienzo. Suelto nuestras manos y él luce confundido.

― ¿Qué pasa?

―Sé que no me debo de meter, es tu padre ―no sé si quiera como decirlo ―. Es solo que... tal vez no está siendo tan sincero contigo...

Sus cejas casi se unen y mi corazón comienza a latir rápidamente.

―Meredith, cuando mi padre dice algo es porque así es. Me pidió perdón y me dio su palabra de que nos iba a apoyar. ¿Por qué es tan difícil que le creas?

¿Por qué le creíste tú tan fácilmente?

―No es eso ―si es ―. Es que... tu padre es un poco impredecible. Eso es todo.

―Sé que se portó mal contigo, con los dos ―dice ―pero creo que debemos de darle la oportunidad de creerle.

Yo sé que Grayson desea creerle. Pero yo no lo hago. Sé que esto tiene algo oculto, tiene un plan y lo está consiguiendo poniendo a su hijo de su lado.

―Confía en mí, nena.

―Confío en ti, Gray ―pero no en tu padre.

***


―Ese fue mi favorito ―dice, hojeando la revista ―. Tiene un baño gigante y el vestidor es literalmente otra habitación.

― ¿para qué quiero un baño y un vestidor tan grande? ―pregunta, molesto ―prefiero el departamento con la televisión.

Mamá pone los ojos en blanco y suelta un suspiro de irritación.

―Tyler, ¿podrías pensar de una manera más madura? ―lo reprime ―necesitas un espacio amplio, para tus cosas. Un baño grande es lo que necesitas.

―Beatriz, yo estoy del lado de Tyler ―interviene, riendo ―. A su edad, no necesitas ese tipo de cosas. Yo digo que permitamos que escoja lo que él quiera. La tele y los videojuegos no van a hacer que se quede, nena.

― ¿crees que hago esto por miedo a que se vaya? ―arquea una de sus perfectamente delineadas cejas ―. ¡Por favor, yo misma le hago la maleta!

Papá, Tyler y yo nos echamos a reír. Es obvio que mamá se está haciendo la fuerte. Debe de ser difícil dejar ir a un hijo, aunque claro, solo se va a ir a vivir a otro lugar.

El sonido de un celular interrumpe las risas. Es de papá. Siempre que es algo del trabajo se retira para hablar en otra parte donde no sea escuchado.

―Quiero el departamento del baño ―dice, Tyler. Pone los ojos en blanco y besa la mejilla de mi madre. Los ojos de ella se llenan de lágrimas.

―Oh, mi pequeño ―ahora ella besa su frente y de pronto, es un momento muy emotivo.

De pronto la puerta de la cocina se abre tan fuerte que azota contra la pared ruidosamente. Papá sale de ahí con la cara completamente pálida. Sus ojos tiemplan por toda la sala hasta encontrarse con los de mi madre. Mi corazón y el tiempo se detienen.

―¿cariño? ―mi mama se levanta y se apresura a acercarse a mi padre.

― ¿Qué pasa papá? ―pregunta Tyler ― ¿Por qué estás así?

―Era la policía.

― ¿que querían?

―Me están acusando de fraude ―sus ojos están fijos a algún punto ciego. Su voz es temblorosa y baja ―. Van a venir a arrestarme si no me presento en la comisaría voluntariamente. Necesito un abogado, Beatriz.

No escucho lo que mamá le responde. No puedo moverme. Mi corazón, mi cabeza, todo me da vueltas.

Sé que mi padre no es culpable de ningún fraude y estoy casi segura quien está detrás de esto. 

SIEMPRE FUISTE TÚ / GRAYSON DOLANWhere stories live. Discover now