CAPÍTULO 46 -parte 1

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Jamás me había esforzado tanto para conseguir el punto perfecto de mi vestimenta. Como tenía planeado una fuerte venganza en contra de Grayson, sabía que mi arma mortal podría ser, precisamente; mi cuerpo. Me cambie de ropa más de cuatro veces hasta sentirme lo suficientemente "sexy" como para estar segura de que mi plan serviría a la perfección.

Me decidí por un pequeño short de mezclilla, una blusa de encaje negro que me quedaba unos cuantos dedos por debajo del ombligo y un bikini color morado oscuro. Me veía muy bien. Sonreí animada ante mi reflejo en el gigantesco espejo del baño. En el cabello opté por dejarlo suelto, era la playa y quedaba muy bien con el conjunto. Me maquille con cuidado de no parecer tan preocupada y por último, me eché bastante perfume. Guardé mi celular en el bolsillo trasero y me dispuse a ir en busca de Grayson.

          No me sorprendió mucho encontrarlo en la cocina. Por lo que alcancé a ver, se encontraba comiendo un sándwich (si es que a eso se le puede llamar así) mientras veía algún reality show lo demasiado entretenido como para no percatarse de mi presencia. Tuve que aclarar mi garganta dos veces para poder lograr captar su atención. Me miró; sus cejas se fruncieron mientras mantenía los ojos bien abiertos. Quise reír, pero me contuve: no quería quitarle la importancia al momento. Se levantó sin quitar aquella expresión atónita del rostro. Cuando llegó hacia donde yo estaba, me tomó de la mano y me obligo a dar una vuelta en redondo.

—dios mío, Stewart —ronroneó, mientras me comía con la mirada —. Te ves... hermosa.

          Le dediqué una mirada de agradecimiento y un tanto arrogante a la vez. Negó con la cabeza sin dejar de verme. Enredó sus brazos a mi cintura e intentó besarme, yo me removí de inmediato. Siendo honesta, me moría por besarlo; pero yo era demasiado orgullosa como para hacerlo. Tendría que hacerlo sufrir antes.

Grayson comenzó a reír entre dientes —: ¿es porque me negué a besarte hace un rato?

Puse la mejor cara de inocencia que pude —: claro que no, Gray —contesté, le eché una fingida ojeada a mi celular —Creo que ya es hora de irnos, ¿vamos?

Volvió a buscar mis labios y yo me volví a escapar de su agarre. Él en respuesta, soltó una carcajada —: no me lo puedo creer, Meredith...

—Vámonos, Dolan —sonreí, divertida.

Negó con la cabeza, sin embargo, aceptó mi mano para a continuación encaminarnos hasta su auto.

Oh amor, esto es solo el comienzo...

***

Llegamos a la casa donde evidentemente se llevaba a cabo una gran fiesta. Había autos por toda la calle y las personas salían de todos lados. Estaba realmente sorprendida por todo el alboroto. ¿Cómo van a dejar la casa después de esto? ¿Los padres del chico estarán enterados?

—Meredith, no te separes de mí, ¿de acuerdo? —la voz de Grayson me hizo regresar a la realidad—como ves, hay muchísima gente y yo no conozco a la mayoría.

— ¿todos los años hacen esto? —pregunté, sorprendida mirando a mi alrededor.

—Antes solo era entre amigos, no pasaban de veinte personas —explicó —. Después, la gente fue llegando de la nada y bueno, ahora se hizo como una tradición hacer esto cada año.

—oh...

— ¿escuchaste lo que te dije antes?

—no separarme de ti —repetí automáticamente, estaba viendo a una chica lo demasiado borracha como para caminar por si sola —, ¡entendido!

SIEMPRE FUISTE TÚ / GRAYSON DOLANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora