Los Rain [Extras de LVDDLP 1 & 2]

Nuevo hogar [Roscoe & Padme]

Roscoe tomó la mano de Padme al pararse frente a la escalera del orfanato, esperando que sus hijos bajaran para por fin poder llevarlos a casa. Ella lo abrazó por unos segundos y besó sus labios cortamente para celebrar el momento antes de que escucharan los pasos de los niños apresurándose por el pasillo.

—Aquí vienen —dijo Roscoe pasando su mano por la espalda de Padme.

—¡Mami! —gritó Holly al ver a Padme.

Con la ayuda de una de las maestras, Jonah y Holly bajaron las escaleras. Holly corrió inmediatamente hacia los brazos de Padme, ella la levantó y la abrazó contra sí con cariño, llenándola de besos por todas partes. Roscoe amaba a Holly y ella a él también pero definitivamente ella tenía un lazo especial con Padme, una hermosa conexión que había surgido desde el día en que se habían conocido.

Él por su lado se arrodilló para enfrentar a Jonah con una sonrisa.

—¿Emocionado, campeón? —le preguntó sonriendo.

Jonah asintió y dio un paso adelante para rodear a Roscoe con sus brazos, él le devolvió el abrazo con cariño. Esos niños eran todo lo que él había estado necesitando, porque cuando los abrazaba sentía que un pequeño vacío que hasta el momento en que los reconoció como sus hijos no sabía que tenía, se llenaba.

Padme dejó a Holly en los brazos de Roscoe y se arrodilló para besar la cara de Jonah por todas partes también.

—Papi —Holly lo abrazó, él la estrujó con cuidado de no aplastarla—. ¿Ya hoy vamos a ir con ustedes? —preguntó ella con emoción—. ¿Voy a ser una Rain? —su sonrisa era la sonrisa más hermosa que él jamás hubiese visto, empatando justamente con la sonrisa de Padme.

—Siempre has sido una Rain —él besó su frente—. Hoy van a conocer a la familia ¿emocionados? —Roscoe los miró a ambos, Holly le dio una mirada nerviosa—. No te preocupes, ellos te van a adorar.

—Pe-pero... ¿Y... s-sí yo...? —ella sacudió la cabeza.

Cuando estaba nerviosa, asustada o frente a personas que no eran su hermano o Roscoe o Padme, su tartamudeo volvía. Había dejado de hacerlo frente a ellos pero aun temía que otras personas la escucharan tartamudear por cualquier razón. A Roscoe no le importaba si nunca podía hablar bien, él nunca haría que ella se sintiese ridícula al respecto.

—Eso no importa, si tartamudeas no importa ¿de acuerdo? —él quitó uno de sus risos de su cara con delicadeza—. Te van a querer igual, sabes que eso no hace menos digna ¿cierto? Eres nuestra hija y siempre te vamos a querer, sin importar lo que hagas. Ellos también lo harán.

—¿Sí? —ella se miró sus pequeñas manos y él tomó una de ellas y la colocó sobre su mejilla.

—Sí —él besó su frente.

—¿Está todo en orden? —preguntó Padme a la mujer que bajaba las escaleras con calma detrás de los niños.

—Sí, todo está listo, al salir por esa puerta ya son suyos totalmente —afirmó ella con una gran sonrisa.

—Bueno, adiós —Roscoe se dio la vuelta secamente abrazando a Holly contra sí como si fuera a escapar con ella.

—¡Roscoe! —él se detuvo ante la reprimenda de Padme.

Roscoe volteó a ver a la mujer con una sonrisa sincera de agradecimiento haciéndole saber que eso había sido una broma.

—Gracias por todo —dijo entonces.

—Vaya, corran con sus niños, nada me haría más feliz —respondió ella.

Padme tomó de la mano a Jonah y ambos siguieron a Roscoe hacia la salida. Él miraba a su esposa de vez en cuando y podía decir que ella estaba tan feliz como él por este momento en particular, sabía que cuando estuviesen solos Padme iba a saltar de alegría y se besarían durante mucho rato para celebrar que por fin tenían a sus hijos consigo. Ella apenas si había podido dormir la noche anterior esperando que todo fuese perfecto para cuando ellos estuviesen en casa.