Capítulo 15. Aunque me duela.

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Cada vez que la veo llorar porque no recuerda algo, mi corazón se oprime. Me duele que cada vez que alguien le pregunta algo, ella simplemente diga que no tiene presente ese momento en su memoria.

Me duele que ella se sienta como una tonta por olvidar algo de su pasado, no importa cuántas veces le diga que nada es su culpa. Ella se sigue llamando estúpida, tonta, retrasada mental.

No saben cuánto me duele que ella misma se desprecie. Esta Kendra no es ni la sombra de la que fue en el pasado, ni siquiera Caleb ha logrado hacer que ella recuerde al cien todo.

Caleb también lleva viviendo varios días en la calle de la amargura como yo. Ninguno de nosotros dos logra que ella tenga recuerdos.

No puedo ocultar que me alegra que ella no recuerde ciertos momentos que vivió con él, pues me da la esperanza de que lo que vivieron no fue tan memorable.

Es egoísta como actuó, pero yo no quiero que alguien más sea importante en la vida de Kendra, las únicas personas que le deben importar somos todos los miembros de su familia.

He hecho todo lo que está en mis manos para que ella esté a gusto en la escuela. He hablado con todos nuestros amigos para que no la presionen y la ayuden a pasar por esto. Todos nuestros conocidos nos apoyan y hacen lo mejor que pueden para ayudarla.

Muchos en las escuela―la mayoría amigos de Lina ―, le hacen preguntas de su pasado solo para molestarla y eso me enfada. Tanto, que ya he visitado unas nueve veces la oficina del director en los últimos quince días.

Debo admitir que una cosa era calmarla, cuando alguien se burlada porque no recordaba cosas un poco insignificantes... Pero, una muy diferente, es tratar de calmarla cuando yo tengo algo de culpa en esto.

¿Por qué? Porque debí oponerme cuando mis padres y los de Kendra, acordaron decir que Mélin era mi hermana. Gran error, ella ya sabe la verdad y no la tomo muy bien.

Una cosa hubiera sido que se enterara por error, escuchando alguna conversación. Pero no, la estúpida de Lina le conto la verdad a Kendra sobre nuestra hija y todo lo que tuvimos que ver. Le conto cada detalle, porque se fue, porque me oculto la verdad de Mélin... ¡Maldita sea! Incluso le conto que Lina y yo fuimos amantes por mucho tiempo.

No sé cómo diablos se me paso por la cabeza dejarla ir sola al baño en el receso, ese fue el momento que Lina utilizo y la pobre de Kendra es un manojo de nervios.

Ahora, mi mejor amiga está encerrada en uno de los cubículos del baño, gritándome toda clase de insultos―que ni sabía que ella tenía en su vocabulario―, llorando por olvidar algo tan importante como su propia hija y maldiciéndome por no contarle que ella y yo tuvimos algo.

Tengo la maldita culpa por aceptar las peticiones de nuestros padres. No hice bien en ocultarle algo que en cierta manera sabía era importante para ella.

―Por favor abre la puerta, Kendra―le pido por decimoquinta vez―. Déjame explicarte todo, sí. Todo tiene explicación y aunque sé que nada lo...

―Déjame en paz―me grita entre sollozos e interrumpiéndome―. Me dijiste que me dirías todo, que no me ocultarías nada y me mentiste.

»Tenemos una hija, una niña a la cual no he llamado mi hija porque me mentiste. Ahora entiendo porque llora cada vez que me voy de tu casa.

Sé que tiene razón, traicione la confianza que había depositado en mí. Preferí cumplir las órdenes de nuestros padres a cumplir las que me dictaba el corazón.

Nunca escucho lo que tengo que escuchar, siempre ignoro a esa voz que me da la razón. No importa cuánto me esfuerce, sé que no madurare al cien como Kendra se merece que sea su pareja.

𝐒𝐨𝐥𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐭𝐮𝐲𝐚 (#1)Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang