Narukarin Si la pareja no les gusta, no lo lean.
Próximamente en edición.
Después de la tercera guerra ninja, todo vuelve a la calma en medio de la destrucción o al menos eso parece.
Tsunade la quinta Hokage acepta en su aldea a los miembros de Ta...
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Orochimaru no dejaba de ver a Tsunade, intentó comprender como su difunto amigo y alguna vez enemigo, se había enamorado de ella.Quizás entendía lo de los exuberantes dotes de la mujer, que mostraba orgullosa, pero ¡¿De lo demás?! posiblemente el amor era algo que no comprendería jamás.
Para él ella era mujer, muy escandalosa y con un serio problema de alcoholismo - *Tercero, ahí está tu legado* - Pensó de manera irónica, al ver sido el rechazado como el cuarto Hokage y a hora ver que la quinta, no era la mejor candidata. ¡Claro tenía sus cosas buenas! Pero aun el recuerdo de una chica que le gustaba beber y apostar los tenía muy presente. Realmente su querido amigo debía haber estado un poco mal de la cabeza, claro admitía que Tsunade llego atraerle, pero con su gusto por el alcohol desecho la idea.
- ¡Pero que buen licor! – Grita Tsunade, bebiendo de una botella que llevaba consigo.
- ¿No crees que debemos concentrarnos en la misión? – Pregunta con una gota de sudor.
- ¡Ya lo sé! Pero nunca puedo tomar, sin qué alguien me regañe- Lo mira frunciendo el ceño.
- Esta bien toma. – Dice resignado, no quería recibir un golpe brutal de esta, aun recordaba el ultimo que le dio en su enfrentamiento. - ¡Pero hay que comer algo! – Dice divertido.
- ¡Totalmente de acuerdo!
Quizás era momento de recordar los viejos tiempos, se detuvieron en un pequeño bar que por el que pasaban. Por mera y pura coincidencia, que Tsunade no planeo, ni nada. Donde justamente había ofertas del dos por uno, en el licor y comida.
Por otro lado Sasuke tenía un extraño sueño ahí atrapado en el capullo.
- Mama, ¿Por qué papa no me hace caso? – Preguntaba un pequeño de 5 años a lo mucho con ojos triste.
- Sasuke, tu padre ha tenido mucho trabajo, pero sabes él te adora. – Le sonríe la mujer de cabellos negros, acariciando su mejilla, haciéndolo sonrojar de alegría ante el acto.
Después la escena cambio, a la masacre de su clan, la sangre derramada, sus padres inertes delante de él.
Poco después se vio así mismo, peleando con Naruto, encontrando un amigo verdadero, un familiar, pero no era del todo feliz.
Después se vio de nuevo, formando Habi cada uno de ellos, exitosos experimentos de Orochimaru, lo mejor de lo mejor. Pero uno de ellos había sido escogido por ser diferente, no por su nivel de éxito, aquella pelirroja arrogante y de carácter duro. Sabía muy bien que su carácter se había formado en parte por su trágico pasado y en otra por el sufrimiento que había vivido a lado de su ex sensei. Una de las pocas sobrevivientes del mismo.
Aquella mujer lograba hacerlo pensar y lo descolocaba al no ser un ciervo. Inconscientemente la había comparado con Ino y Sakura, su ex compañeras, no entendía mucho su rivalidad, del cual era la víctima, pero realmente le enfermaba ver la falsedad de una de estas. Es posible que las intenciones de esta no fueran malas, pero odiaba ver como actuaba de una forma con él y lastimaba de otra a Naruto. Incluso para él un ser frio, se había dado cuenta que su compañero estaba perdidamente enamorado de la ojiverde. ¡Era obvio! Incluso en la actualidad, ella lo estaba amando pero estaba ciega enferma por él. Cosa que le desagrada aún más de la joven.
