¡Un asunto conejudo!

Parte 18 - El laberinto del zorro

¡¡¡Muy buenas!!! Lo sé, lo sé, ¡llego tardísimo! Fin de curso, tareas, páginas del cómic que tengo que entregar esta semana... todo es un caos ahora mismo, así que os pido perdón por haber tardado tanto en actualizar. Pero tranquilos, que seguiré subiendo capítulos, aunque tarde más. ;)

Recordad que podéis leer los comentarios de mis avances en mi perfil de fanfiction, en el tablero de anuncios, para estar al día. El capítulo de hoy es semi-corto, pero debido al retraso con la entrega, he preferido dejarlo así para no haceros esperar más.

Algunos me decíais que habéis recomendado la historia a vuestros amigos y eso me llena de orgullo. ¡Muchas gracias por ello y por los seguidores que se han apuntado desde el último capítulo! Es todo un honor que sigáis leyendo la historia y que la consideréis un buen trabajo. No hay palabras para definir lo que me hace sentir el recibir mensajes tan llenos de emoción, amabilidad y, sobretodo, apoyo moral, que no es poco.

Espero que los próximos capítulos os sigan gustando igual y que en algún momento logre insertar otro momento de Nick y Judy, que yo también los necesito a veces ;)

Un abrazo y que comiencen los juegos del...! Quiero decir, que comience el espectáculo!

Banda sonora:

Entrada al laberinto:

Fade from satin (For richer or poorer) - Randy Edelman

Algo se arrastra:

Small (Epic) - Danny Elfman

Ya en la segunda zona:

Training for the battle (Black Night) - Randy Edelman

Three ring hearing room (The distinguished gentleman) - Randy Edelman

Capítulo 18: El laberinto del zorro

Con los primeros pasos, las chicas se adentraron en un laberinto que había sido diseñado por mentes bastante cuadradas, pues se trataba de un conjunto de mini habitaciones de dicha forma, con una puerta en cada pared. No había pistas; nada con lo que guiarse para encontrar la salida, pero sí se podían oír los chasquidos de las puertas que el otro grupo iba abriendo y cerrando a su paso. Tampoco había techo, lo que permitía un buen uso de la luz. Y aún gracias, porque el recorrido a oscuras habría sido difícil.

—Bueno —Judy miró a los tres lados restantes —, habrá que escoger puerta. ¿Por dónde vamos?

—La lógica sería ir en línea recta, ¿no? —Comentó Karin, pensando en voz alta.

—Se supone, pero... —La hermana mayor alzó las orejas con atención. —Me sorprendería que fuera tan fácil... tengo la impresión de que aquí hay... gato encerrado.

—Querrás decir "zorro" encerrado. —La pequeña sonrió. —Bueno, intentémoslo. Si nos quedamos paradas también estamos perdiendo el tiempo. —Abrió la puerta de enfrente y pasaron a la siguiente cámara, tan cuadrada y simple como la anterior. —¿Seguimos?

Judy se encogió de hombros y tomó el pomo de la siguiente puerta... pero no llegó a tirar de él.

De repente, a sus orejas llegaron los gritos del primer equipo, seguidos de lo que parecía una serie de portazos al ritmo de jadeos y correteos sin rumbo.

—¿Q-qué es eso? —Karin atrapó inconscientemente la pata de su hermana.

—Lo que tenemos que evitar. —Susurró la policía, abriendo la otra puerta. —Vamos, si están a la izquierda tenemos que seguir recto...