Anomía [Editando/Reescribiendo]

Capitulo 8: Libertad.

-¡Esto es malo! -Grité a mi mismo- ¡Estoy perdido!

Si, me fuí del lugar, pero no me percaté de que todos seguían corriendo y no me fijé en que dirección.

¡Rayos!

-Okey, calmate 16, sólo tranquilizate, respira, uno, dos, listo. Esto es simple, recién te diste cuenta de que puedes copiar cualquier habilidad, esto será fácil. -traté de calmarme, cosa que casi no funcionó.

Comenzar a pensar sobre los poderes que podía copiar, tantos edificios altos, ¿podría escalar uno? ¡cómo Spider-Man! sólo espero que leer tantas historietas haya servido de algo.

Al primer edificio que vi, empecé a poner mis manos, por un momento creí lograrlo pero me caí.

-¡Tantos poderes que hay y no hay uno de Spider-Man!

Bueno, eso se puede arreglar, ya sé, puedo usar el poder de 19, de un momento a otro, un pequeño salto y un impulso, mi vista de mi alrededor de puso borrosa y al enfocar, ya estaba arriba del edificio.

-Demasiado... ¡alto!. -me dije a mi tratando de equilibrarme.

Traté de caer mínimo en techo, lo logré, pero no sin ganarme otro golpe en el cuerpo. Tengo que practicar en mis movimientos y habilidades. Pero me fijé en mi alrededor, era impresionante, una gran ciudad, estaba amaneciendo, otra magnífica obra de arte natural. La vería mejor si los edificios no estuvieran deteriorados, ¿Qué habrá pasado aquí?.

Después de admirar lo que veía, empecé a buscar algún indicio de donde se encontraban los demás, no aparecía nada, todo se ve igual de abandonado. Me fijé en un bosque muy grande, árboles, ¡Grandes y frondosos árboles!

-Debo ir ahí. -salió automáticamente de mi boca.- Quiero ir ahí.

No, debo buscar a los demás. Necesito saber como esta 19 y la doctora. Pero ese bosque se ve interesante, sólo una miradita, por fin soy libre, puedo hacer lo que quiera.

Me dirigí al bosque, todos los árboles eran inmensos, como si tuvieran años de estar ahí, demasiados. Me acerque a uno y escuché un ruido, provenía del interior, me acerqué más y vi a un cachorro de Coyote o lobo, creo que era un tipo de cruza entre ambos, se veía muy tierno, cuando estaba por acariciarlo la mamá del cachorro apareció de golpe, haciendo que yo me asustara y me tropezara con una raíz. No podía hacer nada con esa mamá sobreprotectora, me observaba, como si me analizara de pies a cabeza, y el más mínimo movimiento reaccionaba a él. No sabía que hacer, pero algo en mi se encendió, no pensaba sólo me movía, de forma muy lenta como ella, los dos comenzamos a formar un círculo mientras caminábamos observandonos uno a otro.

Justo después, la mamá se me acercó, yo me agaché y me comenzó a olfatear como si previniera algo que yo tenía y nada, después de olfatearme dejo que me acercará al cachorro ya que se lanzó encima de mi cuando se alejó.

-Te llamaré... Petra. Y a ti cachorrito te llamaré Niebla, aunque parezcas una bolita a algodón. -dije mientras reía, lo acariciaba y empezaba a jugar con el.

Un rato me quedé jugando con Niebla, Petra se nos unió un momento después, se ve tan tierno, y abrazable, quisiera ser un cachorrito igual que el, en este lugar ¿Qué comerán?.

En fin, seguí jugando con Niebla, hasta que sin darme cuenta estábamos con araños y mordidas, ¿mordidas?. Frené de repente, creo que hasta Niebla de dió cuenta, por que se alejó un poco, cuando admiraba que me había transformado en un cachorro igual de esponjoso que el.

-¡Soy un cachorrito!- grité de felicidad. ¿Será raro que un cachorrito hable?

Bueno, Petra se dirigía a los edificios, por algo creí que era por comida, así que tanto Niebla como yo fuimos con ella. Encontramos latas pero ella creo que no sabía como abrirlas o que tuvieran comida en primer lugar. Así que decidí ayudar, agarré una lata y con mis garras intenté abrirla pero no pude, al menos le hize una pequeña abolladura.

Intenté con mi boca, tenía los colmillos algo afilados así que mordi la lata y le hize un agujero pequeño, me apoyé de mis garras y lo hize más grande, pero la lata rodó y se vacío todo el contenido. Petra ladro, creo que se asustó pero meneaba la cola y empezó a comer, igual Niebla.

Empecé a tener hambre igual, así que encontré una lata de duraznos, ¿en almíbar? ¿Que es eso?. Bueno, es mejor probar. Después de abrir la lata sin tirarla esta vez y comerme su contenido, era deliciosa.

-No entiendo como no comí esto antes.- decía mientras saboreaba todo lo que comí.

-Oye ese coyolo habla.-escuche decir a alguien.

Volteé y eran dos personas que no volvería a ver después en un buen rato.

-¡19! ¡64! ¡Creí que no los vería otra vez!

-¡Volvió a hablar y además nos conoce! -dijo 19, apuntandome con sorpresa.

-¿No me reconocen? Soy 16- dije meneando la cola mientras me acercaba.

Mis sentidos, como el olfato, el oído y la vista se agudizaron, tanto que, podía oler el aroma que desprendian con sólo acercarme, 64 olía al bosque pero un aroma fresco y 19 tenía un aroma a ¿talco?¿bebé? Con un poco de fragancia floral, si tuviera que relacionar su aroma a un color sería rosa pastel. Cuando reaccioné estaba frente a 19, olfateandola como un tonto.

-¿16? -ella me miraba confundida y yo alegrandome de que sea un cachorrito y no vea mi cara.

-no puede... ¡Ser!.

De repente, ella me miraba exaltada, luego comenzó ababrazarme hasta quitarme el aire, sentía que íba a explotar.

-19, me asfixias.

-¡Ah! Perdón. -dice mientras me soltaba y se arrodillaba para estar a mi altura.

-Me alegra que estén bien, ¿donde estaban?

-Eso te lo preguntamos tambien. Nos tenías preocupados 16. -dice 64 mientras también se arrodillaba a un lado de 19.

-Si, disculpen pero tenía que arreglar algo. -Otra vez esa mirada fría con sólo recordar.

-Tenemos mucho de que hablar, nos hacentamos en medio de un bosque...

-Yo estuve ahí. -interrumpí.

-Pues, si estabas ahí, ¿por que no se te ocurrió que estábamos en el bosque?

-No creí que estarían ahí.

Después de hablar otro rato sobre lo que pasamos antes de reunirnos, nos dirigimos al bosque. Ahí me recibieron y antes de darme cuenta ya había vuelto a la normalidad, no se como lo hice pero ya era otra vez persona cuando me fijé. 88 y 84 habían hecho unas casas de tierra y 64
las decoró con algunas flores y otras plantas, para camuflarse al bosque, en el centro de el había un gran árbol gigantesco, el más alto de todos. Y gran espacio para todos alrededor del mismo.

Algunos quisieron casas arriba del árbol, yo quise una también. Y no teniamos que hacerle daño, simplemente 64 manipulaba el árbol haciendo una casa de sus mismas ramas. Era simplemente impresionante.

Todos reunidos, ahora podremos vivir felices, vivir libres.

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Hola!

Regreso para dar una pequeña descripción de 64.

Tiene alrededor de 25 años y es alto, es de piel clara además tiene el cabello castaño y ojos verde con café (que original XD, y no, no es heterocromía).

Hasta ahora, iré capitulo por capítulo describiendo a cada usuario o persona en general (eso si no es mencionada su descripción en la historia). Será en cada final y escribiré sólo al que más destaque ya saben como ya describí 16 y 19 en el principio pero no se había mencionado a 64 así que, ¿por qué no? C:

Saludos.
Voten y comenten :3.
Se que quieren xD.