Anomía [Editando/Reescribiendo]

Capítulo 7: Hora de Actuar- Segunda parte.

-Adiós al plan A -dice 19 dando un suspiro largo para tranquilizarse a si misma.

-Hola al plan B -complete.

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-¡TODOS EN POSICIÓN DE ATAQUE, DISUELVAN FORMACIÓN! -escuché decir a 19 mientras la perdía de vista en la niebla.

-¡QUE COMIENCE EL PLAN B! -grité antes de perderme en la niebla como 19.

Después todos empezaron a correr y disolver la formación, al mismo tiempo, disparos comenzaron a escucharse, sólo alcanzaba a distinguir algunas siluetas de guardias a través de tanta niebla.

Así que comencé a hacer lo mismo que 84 y 88, quitarme los zapatos, no se por que, pero algo me decía que también debía, como algo en mi mente que me aconseja cosas, y no, no estoy loco, a menos que este lugar sea un manicomio, pero no.

Me quité los zapatos y mis calcetines también, cerré los ojos y me concentré en mis pies y el suelo. En un momento, sólo de un movimiento en mis pies, sentí una gran vibración, junto con una imagen, algo rara pero con los ojos cerrados estaba clara, aunque no sólo veía sus siluetas, sus contornos en forma de líneas, también las armas que tenían escondidas o guardadas de los guardias y los demás. Distinguí a 19, que de repente dió un pequeño salto y la perdí de vista, pero senti una gran onda expansiva a base de eso.

Caí al suelo, fue muy fuerte así que por reflejo abrí los ojos y la niebla de había disipado casi por completo.

-¡LA SALIDA! -Grite mientras corría directo a ella.

Era muy gruesa, de un metal diferente al que haya visto, no la podía sentir, es increíble todo lo que avanzamos, y lo poco que he hecho.

Mientras analizaba la puerta, me asustó un disparo justo al lado de mi cabeza, otro disparo, me agaché y ese íba directo a mi cabeza, me di la vuelta, tres guardias estaban apuntandome.

-Alejense -Dije al momento en que con mis manos, con un movimiento de arriba a abajo los despojé de sus armas- supongo que la práctica dio sus frutos -me dije a mi mismo con una sonrisa.

Antes de que reaccionaran los guardias, sin querer arrastré un pie y una imagen me llegó a la mente, olvide que no tenia zapatos, y de eso, localice una navaja, en la bota derecha del guardia de en medio, con mi telequinesis la saqué y de dos dedos y mi vista directa a cada cuello forme una gran línea hacia los mismos y la navaja hizo el recorrido, ellos sólo cayeron al suelo. Los observé un rato, como sus vidas se agotaban con cada segundo y la sangre de sus venas se drenaba por sus cuellos.

-Esa imagen no podré quitarmela de la cabeza, matar se volverá rutina -pensé en voz alta.

Me di la vuelta y me di cuenta que no podía moverla o manipularla, con mis pies rozando en cualquier dirección, vigilando si algún guardia venía a atacarme, pero desde que inició en plan B, me cubrieron, el plan se trataba de que ellos peleaban y me dejaban la salida a mi, en pocas palabras, tengo que derribar la puerta. Y todos peleaban, de forma que yo no me preocupara de que me ataquen, pero los guardias eran muchos así que uno que otro se colaba a tratar de matarme.

-Vamos, ¡Piensa 16, piensa!.

No lograba nada con tratar de mover este pedazo de cosa que ni es metal, ni plástico, es inmensa. Me quedé mirando cada extremo una y otra vez admirando su tamaño sin nada, hasta que:

-Cada extremo... ¡Eso es! -dije mirando cada esquina, y cada bisagra.

-¡Las bisagras! Esas si puedo sentirlas.

No podía aguantar la alegría, extendí mi visión con los pies y ubique a cada uno de nosotros y les envíe un temblor, los hize reaccionar de alguna forma ya que le dieron una orden a 75 y este alejó a todos los guardias que pudo de un sólo movimiento mientras todos se reunían detrás de mí.

Y pues, estaba muy feliz. 75 se mantenía con las manos arriba y bien concentrado. Es nuestra oportunidad. Por fin podremos salir. Yo sólo los miraba con una sonrisa y cuando todos se reunieron, me di la vuelta y alce las manos, me concentré, serené mi mente y sentí el peso de las dos bisagras de arriba y al instante, hize un ademán de jalar de las bisagras, y ¡PUM! Salieron volando, lo repetí otra vez para quitar las dos de abajo y empuje con una onda expansiva como el poder de 19. Le resté importancia a ese dato, y la puerta sólo cayó y lo que vimos fue impresionante.

Un cielo, oscuro y unas hermosas luces, estrellas, tan brillantes, una noche resplandeciente, una luna increíblemente brillante y una fría ventisca, tardamos en reaccionar al ver tanta belleza en un paisaje natural, bueno, no tanto, ya que unos edificios altísimos a lo lejos apenas perceptibles con la luz de la luna y el terreno alrededor era simple tierra, sin algún tipo de vegetación, tantas ganas de ver un árbol, rodarme en césped y ver algunos animales de estas zonas.

En fin, todos comenzamos a correr en dirección a los edificios que teníamos en frente, 92 cargó a 75 que seguía reteniendo a los guardias, hay algo que olvido. ¡La doctora!.

-¡DOCTORAAA! -Comenze a dar media vuelta y al fijarme bien ella estaba siendo llevada por 92, no pude evitar sonreír, nuestro plan, la salida, todo funcionó. Ahora falta terminar con esto, me paré justo frente al edificio, y me di cuenta de algo crucial. ¡No se como quemar el edificio!

¡Piensa 16, piensa otra vez!

Analizando lo que hize antes ahora noté algo interesante que no noté desde hace tiempo y que cambiará las cosas. Usé la habilidad tierra con éxito y la habilidad onda de choque sin contar la telequinesis de forma inmediata y correcta.

-¡Tengo más de una habilidad! - pensé en voz alta.

Pero, ¿Y si sólo esos poderes podré hacer? No, ¿Y si tengo la habilidad de copiar todos los poderes que existan?

Después de eso actúe casi por inercia a la situación, dejé que el instinto me guíara. Y así, con mis manos forme un gran escudo que encerraba todo el edificio incluyendo a todos los que estaban dentro, nadie podía entrar, o salir. Introduje mi mano después de crear un pequeño orificio para después hacer una chispa.

-¡Lo logré! Puedo hacer más de un sólo poder, cualquier poder.

Después de la chispa, intenté algo más potente, y justo después de ese pensamiento, un pequeño tornado de fuego se formó de mi mano, lo fuí haciendo más y más grande arrasando todo, las personas, los edificios, veía como se hacían cenizas, ya no tendremos personas malas persiguiéndonos, ya no más.

Con un ademán combinado con un juego de pies, quité el poco fuego que había, el humo y los restos ocultos con una capa de tierra.

-Ya no más. -dije mirando al sitio ahora limpio, sin rastros de vida ahora.

El mundo es cruel a veces, merecían su castigo. Me di media vuelta y seguí mi camino.