Discordia (Fanfic Daryl Dixon)

Capítulo 8: Alas

Zenda estaba en el bosque y no sabia donde ir para volver junto a los hermanos Dixon. Por suerte no se había cruzado con ningún caminante.

El cielo ya no era de color azul, era oscuro, las estrellas iluminaban y Zenda seguía caminando por el busque en busca del campamento. Tenía hambre, sed y su peor equivocación fue ir al bosque sin comer.

Daryl estaba sentado en el tronco comiendo enfrente de la fogata. Cuando terminó de comer su lata de conserva Merle le tiró su lata vacía. Daryl se dio vuelta y lo miro con mala cara.

- ¿No irás a buscarla?. -le pregunto Merle.

- No -dijo frío-. Ella se fue, ella volverá.

- Sabes lo difícil que es sobrevivir allí -le dijo su hermano- y lo sabes muy bien, trasero con comezón.

Merle rió y Daryl rodeo los ojos.

- Idiota. -susurro Daryl- Bien.

Agarro su ballesta y se adentro en el bosque.
. . .

Hace varios minutos que estaba en el bosque y aun no había encontrado a Zenda.

- ¡Niñaa! -grito Daryl.- ¡Pequeño estorbo!.

Siguió buscando. .

Algo había en el piso. . Lo observó bien y era un caminante comiendo a una persona. Le disparó con la ballesta y lo saco de encima del cuerpo. Era una mujer castaña, ojos café y. . Muerta.

Daryl suspiro.

- ¡Ayuda! -grito una voz aguda- ¡Por favor! .

- Ay. . - suspiro Daryl- ¿Por qué siempre la encuentro en esta situación?.

Daryl empezó a correr hacía la voz que pedía ayuda. Al llegar Zenda estaba en el suelo, apoyada contra un tronco y un caminante muerto frente a ella. Daryl sonrió al ver que ella lo había matado. Se acercó a ella.

Ella levantó la mirada y al ver a Daryl se levantó y lo abrazo. 

- Quítate. - dijo Daryl quitando a la niña de él.

Ambos empezaron a caminar hacía el campamento donde Merle los esperaba. Mientra caminaban Zenda sonreía por alguna extraña razón y Daryl frotaba sus brazos con las manos para darse calor, ya que hacía frío esa noche. Cuando llegaron al campamento Merle estaba afilando uno de los cuchillos, él siempre le afilaba el cuchillo a Zenda. Se sentaron alado de la fogata y cada uno abrió una lata de comida para sí. 

- ¿Tienes frío?. - le pregunto Zenda a Daryl con una voz dulce. 

- No. - se limitó a decir mientras frotaba sus brazos. Aunque tenga una camisa mangas largas él seguía con un poco de frío.

Zenda sonrío. Agarro la mochila, revolvió, saco un bollo de color negro y se lo tendió a Daryl. Él lo tomo y lo desarrollo en su regazo. Cuando lo aliso pudo ver que era un chaleco de cuero negro y en la parte trasera, o sea la espalda, tenía un par de alas de ángel. Daryl se la colocó y dejo de temblar un poco. 

- Era de mi hermano. - contó Zenda.

Merle apareció por atrás y dio una leve risilla.

- ¿Ahora eres un ángel, hermanito?. - pregunto Merle y Zenda rio, Daryl la miro con mala cara y Merle, con la niña, rieron.