“Solo decía. Cabe esa posibilidad.” Sacudí mi cabeza.

“Lo que sea.” Agité mi mano con desdén.

“Y... ¿Que tienes planeado hacer las próximas semanas?” Me preguntó con curiosidad intentando cambiar de tema, porque ella sabía perfectamente al mirar mis ojos, que no estaba de humor como para hablar de Justin.

“Oh, tengo que acabar de estudiar. Es mi último año, haré los finales y me iré de vacaciones.” Sonreí. “En una semana volveré a Los Ángeles y me iré a Miami. Por cierto, te podrías venir.” Le miré esperando su respuesta, expectante.

“Me encantaría, pero tengo que promocionar el disco. Ya sabes, dentro de poco saco mi nuevo single.” Dijo contenta a la vez que alzaba su voz.

“¿Que?” Contesté sin poder creerlo. “No!” Comenté contenta. “No sabía que ibas a sacarlo tan pronto!” Ella rió.

“Pues ya lo sabes.” Se encogió de hombros. “Estoy impaciente por saber que piensan los fans y la gente de ello.”

“Estoy segura que va a arrasar Miley.” Mostré mis dientes en una amplia sonrisa. “¿No lo podré escuchar antes?” Hice un puchero con mi labio.

Ella rió echando hacia atrás su cabeza. Su risa me hacía reír a carcajadas.

“Como sigas riendo de esa forma, sabes que me va a doler el estómago por días, ¿cierto? Porque no puedo evitar reír cuando te escucho.” Ella rió mas fuerte por mi comentario. “Miley, no es gracioso.”

“Vale, vale. Esta bien. Cuando regreses a Los Ángeles lo escucharás.” Asentí con mi cabeza contenta.

“Estoy segura de que me va a encantar.” Mordí mi labio con emoción.

Di un sorbo a mi refresco, terminándolo y Miley miró su reloj. “Es tarde, tengo que irme. Mi avión sale en un rato.” Asentí con mi cabeza haciendo un puchero con mi labio.

“¿No te puedes quedar?” Le pregunté.

Ella negó con su cabeza. “Me gustaría, pero no.” Suspiró con resignación. “Nos veremos dentro de una semana, ______, tranquila.” Sonrió.

“Esta bien.” Nos levantamos de la mesa después de pagar y nos dirigimos hacia la salida del restaurante. Había paparazzis en la entrada.

“¿No se pueden buscar otro entretenimiento?” Miley se quejó en voz baja, mientras caminábamos hacia su coche y nos detuvimos antes de que yo me metiera en el mío.

Nos dimos un abrazo mientras los flashes nos cegaban. Odiaba eso. “Tranquila. Confía en el karma.” Le susurré en su oído y ella rió. “Nos vemos en una semana.” Sonreí.

“Suerte en tus finales nena!” Gritó mientras se marchaba y yo le grité respondiéndole.

Impossible ღ [נusтιи вιeвeя&тu]Onde histórias criam vida. Descubra agora