La voz de papá se escuchó nerviosa y triste.

—¿Qué pasa? —preguntó Luke preocupado.

—V–vamos...al hospital.

Quince minutos después ya estábamos listos, Luke tomó unas galletas y cajas de jugo individuales para el camino, así no tendríamos hambre.

—¿Crees que le pasó algo a George? —le pregunté a Luke durante el camino.

Mi hermano es alguien muy especial para mi. Yo no estaba feliz con la idea de tener un hermano, yo lo odiaba los primeros meses, no lo quería, pero cuidandolo una vez me di cuenta de que ese mocoso es importante para mi. Traté de disumular frente a mamá, no recuerdo la razón.

—No, no le ha pasado nada a él —negó—. Está bien.

—Entonces a mamá —fruncí los labios.

—No sé, Michael. Es mejor que lleguemos allá y veamos que es lo que realmente pasó.

Asentí y minutos después llegamos al hospital. Estacioné y mis nervios aumentaron al momento de tomar el elevador al piso donde me indicó papá. Apreté la mano de Luke cuando las puertas se abieron y vi a papá en las sillas de plástico.

—Ya estoy aquí —hablé de pie frente a él.

Pasaron unos minutos en los que él no habló y sólo miraba un punto en el suelo.

—Tu madre tenía un amante —murmuró de pronto. Sentí que el aire escapó de mis pulmones y un nudo se formó en mi garganta—. Hace unos meses, yo lo supe anoche. Tuvimos una pelea y esta mañana ella se fue de la casa con George, las calles estaban mojadas, las ruedas de su auto no están en buen estado y ella lo sabía pero subió al auto. Chocó contra un poste.

—¿C–como...están? —cerré los ojos.

—Ella quedó atrapada en el asiento, con heridas realmente graves, necesita una cirugia a la que no se sabe si soportará.

—¿Y mi hermano? —Luke apretó mi mano y yo me aferré a él.

—Fuera de peligro.

Suspiré algo alividado, no estaba para una noticia peor que la de mamá.

—¿Puedo verlos?

—George está en el tercer piso, yo estoy aquí porque espero resultados sobre tu mamá —suspiró y resfregó sus ojos—. Puedes ir con Geroge, yo te aviso si pasa algo con tu madre.

Asentí y arrastré a Luke conmigo hasta el elevador. La noticia de mamá me dejó destrozado, después de todo es mi mamá, no puedo hacer otra cosa que esperar a que se recupere pronto, todavía tenemos cosas de que hablar ¡ella no puede morir! No puede dejarme solo...

Me desplomé en el suelo, abracé mis rodillas y comencé a llorar como un bebé. Mamá no podía dejarme, independiente de todo lo que pasó. Yo la amo y ella a mi, tengo muchas cosas que contarle y muchas otras cosas que vivir junto a ella, no me puede dejar.

Sentí los delgados brazos de Luke rodearme y me acomodé en su pecho, sollozando como un niño al que no le compraron el juguete que quería. Veía sombras, todo nublado y sólo sentía las caricias de Luke, me hacían sentir bien y me daban un poco de ánimo, por ahora.

Cuando el llanto pasó, fui con mi hermano. Se veían tan pequeño, solo y debil. Él no puede estar sin mamá el resto de su vida...él no puede estar sin ella y yo tampoco.

—Hola pequeño —sonreí sentandome junto a él.

Sonrió mostrando sus escasos y pequeños dientes. Algo se quebró en mi.

Lindas Apariencias |Muke Clemmings|Where stories live. Discover now