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Volvía hallarse tumbada boca arriba en su cama, algo mas relajada cuando vio que sus hermanas se habían alejado de la puerta de su dormitorio.

Realmente no se hallaba de humor, para escuchar alguna de las protestas de esas dos locas.

Pero toda su calma se fue al traste, cuando volvió a escuchar sus voces provinentes de la terraza.

Si volvían ha llamarla, seguiría ignorándolas. Era lo mejor con aquellas dos revolucionarias.


Pero ciertos ruidos sordos y las protestas a media voz de ellas, a una distancia alarmantemente cerca, hicieron que se bajara de la cama veloz y se asomara a su terraza particular.


Donde se llevo un enorme susto.


-¡Acaso habéis perdido el poco cerebro que tenéis!


Les grito acercándose al limite de la terraza y mirando por un momento hacia abajo.


-Queríamos hablar contigo-Dijo Enora con gran resolución.


-Pues un paso mal dado, y no lo hubierais hecho nunca -Mascullo con mirada furibunda, para volver hacia el interior de su dormitorio-. Aunque ahora que lo pienso, hubiera sido una buena solución para mi tranquilidad.


Soltó con gran ironía, sabiendo que era seguida por las dos al interior del dormitorio.


-Sabes perfectamente que prometí delante de mama, el no volver ha molestarte nunca mas.


Gruñó Enora, cruzándose de brazos y resoplando algo encrispada.


-¿En serio? -Alzó una ceja inquisitiva-. ¿Y qué diantres significa esto, pues?


Pero Enora no le hizo caso aquella réplica y al entrecejo fruncido de su hermana. Simplemente se fue a sentar con cierta calma a los pies de la gran cama.


-Ya estas levantando tu trasero de mi cama -Ordenó tajante-. Os marcháis las dos ahora con efecto inmediato, pero por la puerta.


-Solo queremos ayudarte -Indicó aquella vez Harmonie.


-Hermanita -Suspiró Enora-, sabemos lo mal que lo estas pasando ahora mismo. Queremos que cuentes con nuestro apoyo. No dejaremos que mamá...


La mención de su madre, hizo que bajara los brazos a cada lado de su cuerpo con los puños cerrados, por cierta tensión ante su nombramiento.


-¿Mamá? -Alzó una ceja, mostrando algo de alerta -. ¿Qué tiene que ver ella?


Las dos princesas jóvenes, se miraron por un momento en silencio y evaluando la situación de forma, que llegaron a comprender que su hermana mayor, no sabía nada de la bomba informativa que había estallado en la ciudad de Mónaco.


-Hazlo tu. Que estas mas acostumbrada a soportar su ira -Señaló con un gesto de cabeza Harmonie.

Deberes De Príncesa COMPLETAWhere stories live. Discover now