¿Solo Un Juego? (Boys Love)

Capítulo 16: Sentimientos ocultos

Atención: Este capítulo contiene Jackson x Tony, si no te gusta este shippeo, piña piñata porque en este capítulo hay muchas cosas sobre su pasado que serán fundamentales para el futuro de esta historia. Además, aclarará algunas dudas (no todas) que tienen de ese personaje. Sin más preámbulos, 3, 2, 1 ¡START!

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Tony POV

No puedo creer lo que hice. ¡Que alguien me dé un premio Nobel a la idiotez! Ahora... él exige una respuesta. Aún no puedo decirle... aún no.

—¿Y bien? — cruzó sus brazos y me miro, exigiendo una respuesta.

—Yo... aun no puedo decirte — bajé la cabeza, avergonzado

—Vamos Tony — agarra mis brazos — somos amigos de la infancia. Siempre me contabas lo que te pasaba desde pequeño. Aún tenemos la misma confianza, ¿no? — me miró con esos ojos de cachorro abandonado, provocando que me sonrojara

—No es que no confíe en ti. Es solo... que es algo complicado — desvíe la mirada

Él solo me agarró del brazo y se fue. Nos encontramos con una pequeña niña en el camino y se detuvo un momento para decirle algo

—Lia, dile a tu hermano que tengo algo importante que hacer.

La pequeña estaba confundida, me miró a mí y volvió a ver a Jackson, enojada

—¡Jack-

—Lo siento, ¡adiós! — le interrumpió

Me llevó al pabellón de primaria, a un baño de los más alejados, para ser precisos. Cerró la puerta y me dijo

—Ahora sí, ¿me lo vas a decir?

—¡Ya te dije que es complicado!

—¿Acaso no recuerdas este lugar? — susurró en mi oído, haciendo que me sonrojara.

Di un vistazo rápido y abrí los ojos como platos. Aquí...

—¿Tú... aun lo recuerdas? — le mire al los ojos y le pregunté.

—¡Por supuesto que sí! ¿Cómo voy a olvidarlo?

Mi rostro pasó de tener un simple rubor al un rojo intenso. Ay Jackson... si supieras lo que siento por ti... desde ya casi 10 años.

—Apuesto a que serás TÚ el que no recuerde lo que pasó aquí.

¿Cómo no recordar eso? Ni en un millón de años lo olvidaría. Pero... me gustaría que él lo relatara.

—Dilo

—¿Qué?

—Dilo tú.

—Bueno. Yo, después de dejar a un lado las hermosas chicas que me seguían, fui al baño amplio lavarme la cara. Hasta que vi un niño llorón en el suelo y...

—¡Oye! ¡¿Cómo que llorón?! — respondí molesto.

—Tal como lo oyes, L-L-O-R-O-N

—¡Ahora verás! - le tumbé al suelo y comenzamos al medir fuerzas, pero, lamentablemente, él era más fuertemente que yo y, en un cambio de roles, termine debajo de él. Le mire a los ojos, esos profundos ojos negros que me enloquecían. Nadie... nadie podrá amarte más que yo.

—¿En serio Tony? ¿Fuerzas? Te digo que tengo más músculos que tú, tú eres un fideo andante

—3 cm más alto que tú.