Capitulo 64.

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Hoy tengo que idear un plan para que Sofi y Joel puedan hablar.
Lo correcto seria que ni uno de los dos sepan que se van a encontrar.
Creo que podría encerrarlos en mi apartamento y dejarlos ahí toda la tarde y toda la noche para que hablen y resuelvan sus problemas.

Salgo de la ducha y seco mi cabello con la toalla para luego envolverla en mi cuerpo. Paso el cepillo por mi cabello y lo desenredo para luego prender el secador. Una nube de humo blanco se dispara flotando en mi cara y cabello.

-EDUARDO JOEL! Agh!- grito frustrada y con rabia.

Han puesto talco en el secador y ahora estoy toda blanca por culpa de ellos. Resoplo y sale una nube blanca mientras me contemplo en el espejo. Parezco un fantasma, mi cabello esta echo un asco.

-juro que me vengaré!- prometo.
Regreso a la ducha y vuelvo a tomar un baño.

Los idiotas de mis hermanos ya le habían parado a sus bromas pesadas porque mi venganzas les afectaban mas. Pero esta vez se pasaron y mi venganza será muy dulce.

Termino de arreglarme y bajo al comedor a desayunar. Mis hombres están sentados a la mesa esperando por mi.

-buenos días para ti papi- dejo un beso en su cabeza y me siento a su lado mientras ignoro a mis hermanos que ríen como locos.

-y a nosotros no nos vas a dar los buenos días fantasmita?- Joel ríe.

-tienes algo blanco ahí en el cabello- señala con su dedo Eduardo un mechón de mi cabello. Los miro entrecerrando los ojos y luego sonrío.

-me vengaré. El que ríe de ultimo, ríe mejor- se ponen serios.

-No es necesario que te vengues princesa, no lo volveremos a hacer-

-eso lo hubiesen pensado antes- empezamos a desayunar.

-hoy presentare mi tesis final-  estoy muy nerviosa, confió en mi trabajo y en mis habilidades para exponerlo pero aun así siento un poco de nervios.

-me alegro mi niña. Y te sientes preparada?-

-si pa' súper preparada pero eso no me quita los nervios- toma mi mano encima de la mesa y la cubre con la suya.

-confió en ti princesa, se que vas a lograrlo y serás la mejor. Estoy muy orgulloso de ti- sonrío; amo la ternura con la que papá me mira.

-mamá tambien estaría muy orgullosa como lo estamos nosotros-

-si Joel, lo sé-

-vamos princesa! Tu puedes con todos esos idiotas! Ganaras el mejor reconocimiento!- grita Eduardo haciéndonos reír a todos.

-ni crean que sus lindas palabras los librara de mi venganza- sonrío inocente y ellos enseguida dejan de reír. Papá ríe estruendosamente.

-me voy, nos vemos luego-

-éxitos mi niña- dejo un beso en la mejilla de papá. Joel y Eduardo se levantan a darme un abrazo de sandwich dejándome sin respiración por unos segundos.

-EXITOS PRINCESA!- gritan y por fin me dejan respirar.

Salgo de casa y me detengo a mirar los hermosos carros que están parqueados enfrente mio, sonrío por la idea que se me viene a la cabeza.
Subo a mi carro, lo prendo y dejo mi bolso en el asiento del copiloto, reviso la hora en mi reloj y tengo tiempo suficiente para mi venganza.

Bajo del carro y tomo una piedra del suelo, los gorilas me miran curiosos. Me acerco al Ferrari de Eduardo y en el capo del carro con la piedra rayo la hermosa pintura "❤️ U BRO" copio en grande y luego el mismo procedimiento con el BMW negro, los gorilas tienen la boca abierta incrédulos, pongo mi dedo indice en mi boca para que se mantengan callados.

Ojos Esmeralda.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora