Adolescentes en Casa (Camren)

Día 35

Hoy es 5 de diciembre del 2012. Es miércoles, ayer fue un día normal y solitario, también pensantivo pues Normani no fue a clases, Lauren menos. Y las chicas estaban preocupadas, bueno... con lo de Mani no le he podido decir a las chicas como me fue con Lauren y más que ahora somos novias oficiles... wow que hermoso suena eso.

Esta mañana sentí su dulce voz y abrí los ojos...

Lauren: Buenos días bella durmiente -dijo sonriente.

- Buenos días -se acercó y me dió un leve beso- Que rico despertar -dije feliz.

Lauren: Lo sé, a mi también me encanta -sonrió- Camz, tu mamá te pidió permiso en el instituto.

- No iré a clase? -dije alegre.

Lauren: No -sonrió.

- Pero... por qué?

Lauren: Bueno... puede que yo haya ayudado a eso.

- Quieres que te acompañe al doctor cierto?

Lauren: Obvio! -sonrió.

- Está bien Lolo -le sonreí y me levanté.

Lauren: Dale, duchate para desayunar e irnos -dijo con sus ojos brillando.

- Perfecto -sonreí.

Me fui al baño, me di una relajante ducha y me vestí, en mi cuarto. Pues Lauren había bajado. Llegué a la cocina y estaba esperándome, me senté y empezamos a comer...

- Nunca he entendido porque siempre comemos aquí -dije riendo.

Lauren: Cómo así Camz?

- Es que... siempre comemos aquí, en la isla de la cocina.

Lauren: Pues si, sabes que el comedor es solo para fechas importantes.

- No te parece algo tonto?

Lauren: Pues si, pero que más -se encogió de hombros y sonrió.

- Cuando tenga mi propia casa con mi familia... comeremos en el comedor -dije riendo.

Lauren: Me parece perfecto.

Terminamos de desayunar, yo lavé los platos mientras ella me acompañaba tratando de bromear. Al terminar, nos dirigimos al auto, pero afuera estaba mamá regando las flores y la grama.

- Mamá ya me voy, vienes con nosotras?

Sinuhe: No hija, tengo cosas que hacer por eso te saqué el permiso.

- Ah está bien, adiós -me despedí, Lauren se despidió con la mano.

Nos subimos al auto y arranqué en dirección al hospital. Tuvimos un viaje tranquilo cantando de vez en cuando. Al llegar, estacioné a las afuera de ese gran complejo. Caminamos lento, aunque más rápido que la vez que salimos. Llegamos a la recepción y había una enfermera algo joven. "Ojalá y me encuentre a la señora que me atendió aquella vez", fue lo que pensé. La chica nos dió el piso y el número del consultorio de la Dra. Llegamos y tocamos, esperamos el "pase" y entramos.

- Buenos días doctora.

Dra: Buenos días chicas. Cómo estás Lauren? -preguntó amable.

Lauren: Buenos días doctora. Hoy estoy muy bien, gracias -le sonrió.

Dra: Ok... -miró una carpeta- Bueno, hoy quitaremos esos puntos y si puedes, te quitamos las mulestas también.

Lauren: Oh, eso sería genial -dijo aliviada.