capitulo 57

5.8K 270 9
                                    

: Sí.

Entro al auto de James con nostalgia y él hace lo mismo. Cruzo mis brazos e inhalo notoriamente para después soltar un suspiro. Capto la atención de James y tuerce la boca, puedo mirarlo con el rabillo del ojo, mientras que continúo con mi vista al frente.

-¿Logan? –me pregunta y yo asiento.
-No es el mismo, su mirada se ve triste.
-Yo lo vi... bien, dijo que lo estaba –se encoje de hombros.
-Presta un poco de atención en sus ojos, así verás que no lo está.
-Luego se desahogará contigo, tranquila.
-Eso espero –muerdo mi labio inferior, deseando que así sea. Inmediatamente recuerdo que Buzz le dirá algo mañana a Logan en la universidad. Inmediatamente la curiosidad me llena todo el cuerpo y giro mi mirada hacia él. Está concentrado. Su ceño está fruncido como de costumbre y siente mi mirada insistente.

-¿Tengo algo en la cara? –suelta una risita.
-No –rio al igual-. ¿Por qué no puedo saber lo que le dirás a Logan?
-Porque... no. No es necesario que lo sepas –le achico los ojos.
-Sí lo es, no voy a poder dormir.
-Mañana lo sabrás, no comas ansias.
-¡Mañana es demasiado! –me vuelvo a cruzar de brazos a pesar de que ya los tenía así. Hemos llegado a casa de James y al parecer no se encuentra nadie. Me había dicho que vivía con sus tíos y su hermana. ¿Por qué nunca les he visto cuando he estado aquí?

-¿No hay nadie? –le pregunto al bajar del auto. Él niega.
-Me encuentro viviendo solo por ahora.
-¿Desde cuándo?
-Lo suficiente.
-¿Y tu hermana?
-Está estudiando y trabajando fuera del país.
-¿No piensa volver? –busco su mirada y cuando la encuentro por fin, parece un pequeño vulnerable.
-No lo creo. No nos llevábamos muy bien.
-Oh... -susurro. Yo y mis preguntas, nunca aprenderé.
-¿No preguntarás por mis tíos? –niego lentamente.
-No quiero ser entrometida, más de lo que he logrado serlo.
-Han regresado a su antigua casa, pero ellos están bien conmigo. Me agradan y les agrado. Cualquier día puedo ir a visitarlos. Si quieres algún día puedes acompañarme –se encoje de hombros. Me ruborizo en menos de un segundo.
-Quizás después –me sonríe de lado. Una vez más me ha contado sus problemas. Eso me hace sentir... bien. Me pregunto... ¿Por cuantos problemas no ha pasado? Introduce la llave para abrir la puerta de casa. Estamos solos... Joder. Podríamos llegar a... si yo... si yo... accediera... quizás... ¡Basta! Me grita mi subconsciente. ¿En qué estás pensando? Me pregunto a mí misma. Me ruborizo. Mi rostro comienza a arder y el sudor me invade los poros. James me mira extrañado y levanta una ceja, ¡Oh mi Dios! Deja de mirarme de esa manera. Le digo en mi mente.

-¿Qué te pasa? ¿Te encuentras bien? –coloca su mano en mi hombro.
-Sí –trato de sonar lo más relajada posible. No quiero decirle que mi mente ha pensado cosas impuras.
-Bien –me sonríe y caminamos hasta su habitación. Oh... Recuerdo la última vez que estuve aquí. Me acerco hacia mi maleta y comienzo a sacar mi pijama. Dudo dos veces antes de hacerlo. Papá me la ha obsequiado y tiene pequeños cerditos en cada parte de la tela. La saco cuidadosamente y veo como él se acerca ya con su pijama puesta, listo para dormir.

-¿Qué sucede? –me pregunta, sentándose al borde de la cama.
-Prométeme que no me molestarás.
-Lo... ¿Prometo? –Está confundido.
-Tampoco te vas a reír de mí.
-¿Qué traes entre manos? –me pregunta y saco la pijama. Sus mejillas se inflan y es porque está aguantando la risa.
-¡Prometiste no reír! –protesto, achicándole los ojos.
-Lo sé... solo... ve a cambiarte anda.

Me levanto y me encierro en el baño para cambiarme y desmaquillarme. Al salir, veo que James está buscando algo en mi maleta. Me quedo quita desde el pasillo observando que quiere encontrar y por fin, saca a Pablito. Dios... no puedo evitar sentir ternura hacia él. Camina lentamente y levanta la mirada para encontrarse con la mía. Deja el osito de peluche en su cama tan rápido que me cuesta trabajo decir un tiempo preciso. Luego, entrelaza sus manos, nervioso.

-¿Por qué buscaste a Pablito? –me siento a su lado y él suelta un suspiro.
-Me gusta recordar cuando te lo obsequie –se encoje de hombros-. Fue un muy bonito día.

¡Muy bonito día!

-Sí, uno muy bonito –le digo al recordar nuestra despedida de ese día. Aunque... al día siguiente, me cortó las alas y me dejó caer. Según él, eso había sido un error y no debió haber sucedido.
-Recuerdo lo que te dije al día siguiente –susurra y me hace ponerme nerviosa-. No fue un error, solo no quise aceptar que me comenzaba a enamorar de ti –me dice, como si estuviera leyendo mi mente. Me quedo en silencio.
-Dime algo –dice y siento su mirada clava en mí.
-Ese día fue muy difícil para mí.
-¿Podrías contarme?
-Pero tu mañana tienes que ir a la universidad...
-No importa, tú eres más importante.

¡Dios mío!

-¿Qué hiciste cuando te dije eso? –me pregunta sin quitar la vista de mis ojos.
-Llegué a pensar que te odiaba. Recuerdo que lloré después de eso y corrí a buscar a Logan. Me sentía... usada. Pensé que tú sentías algo por mí, sinceramente no quisiera pasar por la misma sensación de nuevo, es horrible –mi mirada se dirige al suelo y él toma mi barbilla con su dedo índice y pulgar.
-No quería enamorarme de ti en ese momento, Annie. Yo estaba convencido que no me agradabas.
-Por eso me tratabas así... lo sé.
-Sí, ya te lo había dicho.
-Y... Cuando preferiste estar con Elisa, ¿Te preocupaste por mí? Dime la verdad, no voy a enfadarme.
-Pasé en el auto cuando tú a penas podías sostenerte. Quería ayudarte, pero Elisa me dijo que si bajaba del auto todo se acabaría en ese momento.

Palidezco.

-Fui a dejarla hasta su casa –continúa-. Y luego, te comencé a buscar hasta que te encontré.
-Oh, suena muy...
-Me arrepiento –suelta sin siquiera haber terminado lo que iba a decir-. Te vi totalmente indefensa. Si te hubiera pasado algo en ese momento, aunque no quisiera admitirlo, no me lo hubiese perdonado nunca. Menos ahora. Cuando me dijiste que ella me engañaba, logre sospechar. Me daba motivos para dudar de ella y cuando tú mencionaste aquello, me sentí un imbécil. En aquel momento me dominaba la ira. No pensé. Al día siguiente, la encontré en la universidad besándose con otro, lo primero que pensé fue en ti y en lo tonto que había sido. Ahora pienso... en ese momento ya estabas en tu casa, ya sabes... es Los Ángeles. Aun así, esperaba que tú me hablaras, pero eso no ocurría y me comenzaba a desesperar. Fue ahí cuando te busque una semana después, no quería aceptar que me había equivocado. Lo demás tú ya lo sabes.

Inhalo y suelto un suspiro. ¿Todo eso pasaba por su cabeza en aquel momento? No tenía idea de que decirle. Mis pulgares jugaban nerviosamente mientras que él esperaba que hablara. Levanté mi mirada y me encontré con la suya clavada en la mía. –Yo quería que tragaras tu orgullo por mí. Realmente esperaba que lo hicieras aparte de aquel día donde me buscaste en las gradas y me ofreciste una disculpa. Yo escuché a Elisa con sus amigas en el baño decir que solo te usaba. No te lo dije porque no me creerías, eso era más que obvio –sonrió de lado y bajó la mirada.
-No sabía lo que estaba dejando ir. Dios... soy un gran idiota. No sé cómo hacer que olvides todos esos malos recuerdos, Annie.
-No importa, estoy muy feliz ahora. No tienes por qué sentirte mal. Yo te quiero, James –me siento sobre mis rodillas y lo abrazo por el cuello mientras que él me encaja su nariz en mi cuello. Me remuevo un poco, me hace sentir algo... extraña. Retrocedo y lo tomo por los hombros mientras que estoy sentada sobre mis rodillas-. No lo olvides.

Un silencio se apodera en cada rincón de la habitación y nuevamente nos abrazamos. No sé cuánto tiempo nos quedamos así, pero no quiero que se separe de mis brazos.

-Yo también te quiero, mucho –responde en un susurro junto a mi oído y parece como si nunca me lo hubiese dicho, me sonrojo y se separa de mí. Busca mi mirada con la suya-. ¿Por qué te sonrojas?
-Se siente bonito que lo digas, siempre soñé con que me mostraras tu lado dulce. Decías que no lo eras pero cuando te veía con ella, tú... eras muy diferente al chico que yo conocía. Estaba celosa de que lo fueras con ella, era una chica muy afortunada al tenerte y no te supo valorar como se debe.
-Le agradezco que haya echo eso. Si no fuera por ella, yo no estuviera aquí contigo –sonrío de lado, aún más sonrojada-. ¿Ya quieres dormir?
-Sí, más porque tú tienes que levantarte temprano y ya pasa de la media noche.
-¿Quieres dormir del lado izquierdo o derecho?
-Izquierdo –le digo y se recuesta del lado derecho, llevándose la sabana calientita hasta el cuello. Lo miro y tomo a Pablito en mis brazos. Me coloco de lado y le sonrío, mientras que me devuelve la sonrisa y pestañea lentamente.
-Duerme bien y sueña bonito –le digo mientras que una sonrisa aparece en su rostro.
-Igual tú, mi niña.

Cierro los ojos y después no pasa mucho para quedarme dormida.

(...)

Me despierto en eso de las once. Me estiro en la cama y tallo mis ojos con pesadez. James como de esperarse ya no está a mi lado. Tengo el desayuno en el peinador que está frente a mí. Lo coloco en la cama y comienzo a comer. Es un cereal, choco crispís. La leche ya está completamente café por el chocolate y a mí eso simplemente me encanta. Parece que me lo ha dejado antes de irse, ya tiene tiempo fuera. Al terminarlo decido ducharme. Saco ropa de mi maleta y coloco mi teléfono para escuchar música. Me tardo quizás veinte minutos y al salir, alzo la cama. ¿Qué puedo hacer en el tiempo que me queda? Me levanto, observando a mí alrededor. Nunca había visto la habitación de James con detenimiento. Las paredes tienen un color gris y la recamara es espaciosa. Abro la puerta y absolutamente todo está en silencio. A mi lado está otra puerta, la abro lentamente y las paredes son rosas. El peinador y lo demás tiene polvo, parece que su hermana ya tiene tiempo de que se ha ido. Hay fotografías de ellos juntos cuando eran niños, con su madre y su padre. Mi estómago se hace un nudo y decido salir de ahí. Al lado, está otra puerta. Decido abrirla, pero esta tiene seguro y en mi mente viene rápidamente que es la habitación de su madre... Dios, me siento avergonzada, estoy invadiendo la privacidad. Decido bajar y voy hasta el sofá, donde enciendo la televisión y busco un canal entretenido para mis ojos. A prueba de todo, quizá eso este bien.

-

El sonido de la puerta me sobre salta y observo por la ventana. Es Logan quién está impaciente. Me levanto casi corriendo y abro la puerta.

-¡Annie! Hola.
-Hola, Logan. ¿Dónde está James?
- Sé ha quedado en la universidad, dejó algunas cosas pendientes.
-Oh... ¿No quieres pasar?
-No, gracias, ¿Quieres ir conmigo al centro comercial? James me ha prestado su auto.
-¿De verdad?
-Sí, vamos.
-De acuerdo –sonrío ampliamente y apago el televisor. Logan me abre la puerta del auto y hace todo demasiado rápido, lo noto nervioso-. ¿Estás bien?
-Sí, excelente. ¿Tú?
-También, me levanté algo tarde –enciende el auto y lo pone en marcha-. ¿Cómo te fue en la universidad?
-Bien, aburrida sin ti.
-Quizá vaya en la graduación –sonrío de oreja a oreja al igual que él-. Bueno, al menos eso espero.
-Yo también. No sabes... me siento un obeso amiga, comí como un puerco hoy –suelto una carcajada.
-¿Qué comiste?
-Un hot-dog. Cinco quesadillas, un sándwich, dos refrescos de manzana, un pay de queso y un brownie. Después de eso créeme que quería rodar.
-Vaya... no te preocupes por eso, lo necesitas ahora. Te encuentras demasiado delgado.
-He discutido mucho con mamá, creo que eso tiene que ver un poco –Mi pequeño Logan... Cuanto quisiera ayudarte.
-¿Por qué no me has contado?
-Lo haré después, no quiero arruinar el día.
-No lo arruinas...
-Sí, lo haría.
-¿Por qué vamos al centro comercial?
-Nadamás... -susurra.
-¿Aburrido?
-Sí, algo.

Suelto una risita y lo demás del camino estoy viendo hacia la ventana. Logan ha cambiado, lo puedo notar. Antes no guardaba silencio y ahora me siento incomoda cuando ninguno de los dos habla, ¿Qué nos está pasando? Dios... Al llegar, hay personas fuera del centro comercial. No entramos, si no que... Vamos a la parte trasera. ¿Por qué a la parte trasera? Veo a James con una guitarra, mi guitarra... justo la que había dejado aquí antes de regresar. Me sonríe desde donde está sentado y apoya su barbilla en su ante-brazo el cual está apoyado en la guitarra. Volteo mi mirada hacia Logan el cual sonríe cómplice.

-¿Qué está pasando? –le pregunto, cubriendo mi boca con mis manos.
-Baja, así lo sabrás tu misma –me palmea el muslo levemente y abro la puerta del auto lentamente. James me mira de arriba abajo y me sonrojo. Toma el micrófono entre sus manos mientras lo acomoda y observo la pequeña multitud que había al frente del centro comercial, han venido hasta aquí para saber qué pasa. Me quedo de pie sin decir nada, estoy en shock. Mis manos siguen sin abandonar mi boca, no sé qué va a hacer.

-Cuando te fuiste me sentía realmente mal, tanto como para escribir una canción sobre nosotros –susurra en el micrófono y suena por todo el lugar. Oh Dios...-. No quiero volver a cometer el mismo error nunca más. Me he tomado el tiempo de componerte una canción, Annie –comienza a acomodar un acorde y mis piernas comienzan a flaquearse-. La hice pensando en ti –sonríe, baja la mirada y comienza a tocar. Volteo hacia atrás y Logan está recargado en el auto de James. Cuando empieza a cantar, volteo rápidamente hacia él y me percato de la hermosa voz que tiene-. So your friend's been telling me you've been sleeping with my sweater and that you can't stop missing me bet my friend's been telling you i'm not doing much better 'cause i'm missing half of me and being here without you is like I'm waking up to only half a blue sky kinda there but not quite i'm walking around with just one shoe i'm half a heart without you i'm half a man at best, with half an arrow in my chest i miss everything we do, i'm half a heart without you –mis ojos se comienzan a nublar, no puedo evitar ocultar mis lágrimas de felicidad-. Forget all we said that night, no it doesn't even matter 'cause we both got split in two if you could spare an hour or so, we'll go for lunch down by the river we can really talk it through and being here without you is like I'm waking up to only half a blue sky kinda there but not quit i'm walking around with just one shoe i'm half a heart without you i'm half a man at best, with half an arrow in my chest 'cause I miss everything we do, i'm half a heart without you half a heart without you, i'm half a heart without you though I try to get you out of my head the truth is I got lost without you and since then I've been waking up to only half a blue sky. Kinda there but not quit i'm walking around with just one shoe i'm half a heart without you i'm half a man at best, with half an arrow in my chest i miss everything we do, i'm half a heart without you without you, without you, half a heart without you without you, without you, i'm half a heart without you –termina de cantar y comienzan a aplaudir. Soy una real magdalena y mis manos continúan cubriendo mis labios. Él deja la guitarra a un lado y se levanta del asiento. Camina hacia mi toma una de mis manos, mientras que con su dedo pulgar limpia mis mejillas.
-Justo así me sentía cuando no te tenía cerca... Es una canción que describe realmente como me sentía en aquel momento. Quiero que olvidemos todo... Ya lo sabes, desde cero. Quiero durar hasta que seamos adultos, morir juntos si es posible. Quiero contarles a mis hijos lo que me costó tener a su madre... Decirles que casi la dejo ir y que la busque del otro lado del mundo. Decirles que me enseñó a amar y a valorarme a mí mismo. Decirles que mis sentimientos hacia ella no han cambiado desde que la conocí. Bueno... un poquito después de que la conocí –suelta una risita y camina de nuevo hacia donde estaba la guitarra. Detrás del asiento hay un gran, enorme ramo de rosas. Caigo hincada en mis rodillas y de nuevo... Lágrimas de felicidad invaden mis mejillas. Me toma por mi brazo y me levanta, mirándome a los ojos-. Annie... ¿Quieres ser mi novia?
-Sí, sí quiero –tomo las flores y lo abrazo fuertemente. Creo que he empapado su hombro y este día es uno el cual no podré olvidar jamás. Habló sobre contarle a sus hijos, ¿Nuestros hijos? ¡Dios! No puedo parar de llorar, estoy demasiado sensible. Me separo de él y me observa a los ojos, no los aparta de los míos. Sonrío de lado y los uno en un bonito beso, el cual le dice que no pienso dejarlo por nada del mundo. Esto es lo que yo he esperado por más de medio año... No encuentro las palabras para decir cuanto lo quiero.


Through the dark ✓©® Ganadora Watts 2005Donde viven las historias. Descúbrelo ahora