N- Sí. Solo... sé gentil.
Uzi ladeó la cabeza, sonriendo de lado.
Uzi- ¿Gentil? Mmh... no es propio de un demonio serlo.
N- Pero puedes fingir, ¿no?
Uzi- Puedo intentarlo. Por ti.
La mano de Uzi recorrió la cintura de N con lentitud, rozándolo con las yemas de los dedos como si cada centímetro fuera un secreto que quería memorizar.
N cerró los ojos un instante, sintiendo su piel erizarse.
Uzi- ¿Sabes qué es lo gracioso? -susurró contra su oído-. Que si alguien entra ahora, nos van a encontrar justo como sus peores pesadillas: un demonio corrompiendo a un ángel.
N- ¿Y eso te excita, verdad?
Uzi- Solo un poco -rió-. ¿Y a ti?
N no respondió con palabras. Se aferró a él por la espalda, con una mezcla de nervios y determinación, y lo atrajo más cerca. Sus cuerpos se rozaron.
Uzi soltó un suspiro que le vibró en la garganta.
Uzi- Estás temblando, ángel.
N- Cállate y bésame.
Y lo hizo.
El beso no fue dulce ni torpe. Fue intenso. Uzi le tomó la cara con ambas manos, le acarició el cabello, bajó por el cuello mientras sus labios no se separaban. N le respondió igual, con las manos hundidas en su camiseta, queriendo quitársela pero sin dejar de tocarlo.
Cuando por fin lo logró, Uzi quedó frente a él, medio desnudo, con el tatuaje de un par de cuernos dibujado con marcador en la clavícula (Cyn se lo había hecho).
N se rió.
Uzi- ¿Qué?
N- Eso -dijo, señalando los cuernos-. Es ridículo.
Uzi- Me lo dice el que venía disfrazado de ángel casto.
N- ¡Yo no elegí el disfraz!
Uzi- Pero elegiste quedarte conmigo.
N rodó los ojos.
Uzi se inclinó sobre él, apoyando la frente contra la suya. Sus respiraciones se mezclaban.
La tensión ya no era tensión. Era un incendio.
Poco a poco, los movimientos se volvieron más íntimos.
Más lentos.
Más conscientes.
Las manos de Uzi eran cálidas. Iban con cuidado, pero también con firmeza.
N se dejaba guiar, aunque de vez en cuando lanzaba algún comentario:
N- ¡Eso no va ahí!
Uzi- ¿Seguro? Suena como que sí.
N- ¡No te burles!
Uzi- Pero si me encanta tu vocecita de indignado...
Uzi bajó los labios hasta su estómago, dejando una línea de besos.
N soltó un suspiro largo. Sus dedos se enredaron en el cabello de Uzi, como si el contacto lo ayudara a sostenerse.
Hubo risas, sí. Y también gemidos entrecortados.
Cada gesto era torpe pero sincero. Cada caricia parecía decir: quiero conocerte más.
Y, sin embargo, a pesar de lo intenso, no había prisa.
N- Eres... más gentil de lo que admites~~~-dijo entre jadeos.
Uzi- Shh... no se lo digas a nadie. Tengo una reputación.
N- Demasiado tarde... ya la arruinaste.
Uzi subió de nuevo hasta quedar a su altura. Le besó los párpados.
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One Shot ^^
Short StoryEn esta sección podrás leer historias cortas (de un solo capítulo) o quizás el inicio de otras historias a futuro aquí
~Angel y Demonio~
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