One Shot ^^

~Angel y Demonio~

N parpadeó.

N- ¿Qué?

Cyn- ¡No puedes negarte! ¡Así funciona el juego! -dijo aplaudiendo como foca emocionada.

Uzi sonrió de oreja a oreja, inclinándose hacia atrás y abriendo las piernas con descaro.

Uzi- Ven aquí, ángel mío -dijo con una voz profunda que hizo que a N se le cayeran tres pensamientos y el alma-. Te prometo que mi trono es cómodo.

N- ¡Tú no eres un trono! -protestó pero sus mejillas estaban ya al rojo vivo.

Uzi- Y sin embargo, estoy disponible -respondió dando palmaditas sobre su muslo.

V lo empujó con el codo:

V- Si no lo haces, te toca castigo. Y créeme, tengo un bote de glitter y un bikini de leopardo listos.

N tragó saliva, cerró los ojos, suspiró como mártir... y se sentó.

El salón explotó en vítores y chiflidos.

X- ¡Ángel travieso! -gritó uno.

X- ¡Pecado mortal! -dijo otro.

Cyn- ¡Amén! -alzando su copa.

Uzi acomodó las manos alrededor de la cintura de N, sujetándolo con suavidad pero sin disimulo.

N se tensó como palo de escoba.
Intentó mantener la espalda recta, las alas bien plegadas y la decencia intacta.

Uzi- Estás temblando -susurró con el aliento rozándole el cuello.

N- Estoy soportando -respondió mordiéndose el labio.

Uzi- ¿El peso de la tentación?

N- El peso de tus pantalones de cuero... ¿de dónde los sacaste? ¿del infierno?

Uzi- ¡Exacto! -rio suavemente-. El mismo lugar donde planeo llevarte esta noche~.

Cyn giró otra vez la botella, pero todos estaban más atentos a lo que pasaba entre "el demonio" y "el ángel" que al juego en sí.

V- Deben estar sudando más que el Pikachu -dijo mientras el tipo disfrazado de Pikachu la miraba ofendido.

Cyn- ¿Crees que se aguanten?

V- Dudo que lleguen a la medianoche sin devorarse -respondió-. Aunque si J los encuentra antes...

Cyn- Se arma la santa inquisición

N, mientras tanto, se removía incómodo en el regazo de Uzi, sin notar que la ronda ya había pasado hace rato.

N- ¿No se supone que ya puedo bajarme? -preguntó.

Uzi- La ronda sigue

N- No lo creo...

Uzi- ¿Y si inventamos una nueva regla? -susurró el demonio con voz melosa-. Cada vez que me mires así, ganas un punto. Y cuando llegues a diez...

N- ¿Qué pasa?

Uzi- Te llevo a volar. O a caer.

N se giró a mirarlo. No estaba seguro si quería subir al cielo o arder en el infierno, pero lo que sí sabía era que no quería bajarse de ese regazo todavía.

La música aumentaba de volumen, el aire olía a alcohol, plástico de disfraces baratos y perfume de fiesta. A cada minuto que pasaba, el ambiente se cargaba más y más... pero N ni siquiera lo notaba.

Estaba en otra parte del universo: atrapado entre las piernas cruzadas de un demonio con sonrisa perversa y ojos que decían "te vas a arrepentir de venir con alas".