—Oye, Beomgyu, escucha —empecé—. He estado pensando más en lo de anoche. Quería decir que está bi...

—Lo haré. —Su expresión era seria y sus ojos ardieron con determinación, como si estuviera respondiendo a una llamada a un duelo o algo así, y no que simplemente estuviera aceptando mi propuesta.

Olvidé lo que iba a decir. Algo así como una disculpa por haber hecho las cosas raras anoche. Pero aparentemente, no había hecho las cosas raras después de todo. Este tipo me confundía. Y que me gustara también me confundía.

—¿Lo harás?

Se puso a mi lado asintiendo con la cabeza.

—Sí, pero creo que deberíamos tener algunas reglas básicas y discutir las cosas primero.

—Definitivamente.

Asentí con énfasis. Diablos, esto era genial. Esto era perfecto. Beomgyu tendría alguna idea de lo que estaba haciendo ya que obviamente tenía más experiencia que yo. Éramos amigos. O... cada vez más amigos, así que no sería demasiado raro. Me sentía cómodo con él, y no tenía que preocuparme que fuera un acosador loco o de que se le escapara nada por la boca.

También había algo más. Una semilla de... emoción casi, o curiosidad, bailando en mi estómago. Algo para lo que aún no tenía una palabra o una etiqueta.

—Estaba a punto de ir por algo de comer.

—Tú pagas. ¿Haces algo más?

—Muchas cosas —Dejé que una significativa pausa se extienda entre nosotros antes de esbozar una sonrisa—. Entre comidas.

Beomgyu puso los ojos en blanco y me dijo que guiara el camino.

Conseguimos mi puesto habitual en el Café on Main, y envié un saludo a Yeosang una vez que nos sentamos. Beomgyu se giró para ver a quién había saludado.

—Oh sí, olvidé que trabajaba aquí —Él también lo saludó—. Así que... —comenzó, inclinándose, luego se detuvo cuando Yeosang se acercó con los menús.

Yeosang extendió un puño para chocar, que le di, y luego sonrió a Beomgyu, mirándolo de arriba a abajo pensativamente.

—Hace tiempo que no te veo.

—Hey. Todavía existo.

—Mucho. —dijo Yeosang, y la mirada de Beomgyu se volvió tan repentinamente sorprendida como estaba seguro de que lo hizo la mía cuando la sonrisa de Yeosang se volvió casi coqueta.

—¿Recuerdo que mencionaste que habías tenido a Applebaum en una clase? —Yeosang apoyó una mano en el respaldo de la cabina cerca de Beomgyu, y mi mirada se desvió hacia la distancia entre las yemas de sus dedos y la nuca de Beomgyu.

—Oh, sí — Beomgyu frunció el ceño con simpatía—. Súper duro.

—Ugh —Yeosang gimió—. Esperaba que me dijeras que se hacía más fácil a medida que avanza el semestre.

—Lamentablemente, no, pero mientras hagas todas las tareas, está bien. Salí de ahí con una B y sin que me llamaran la atención como a él le encanta hacer.

—Ya me han llamado la atención. Fue brutal.

—Pero sobreviviste. Oye, todavía tengo mis notas, creo, si las quieres.

Yeosang se animó. —Eso sería genial.

Se hizo el silencio durante un rato e intercambiaron una mirada antes de que Beomgyu prometiera hacerle llegar las notas.

Miré entre ellos, sin saber si había otra conversación en curso de la que no estaba al tanto. Cuando Yeosang se marchó, apoyé los antebrazos en la mesa.

Only 4 U (Yeongyu)Where stories live. Discover now