class 127 ⁕ drippin + cravity + zb1

26: remordimientos

y ahí estaba woobin, mirándolos a ambos con una enorme molestia en su rostro. la ironía flotaba en el aire y con una risa sarcástica, lanzó:

—¿así que esto es lo que hacían cuando decían que se iban a reunir para hablar de las clases o del caso de jungmo?

allen, aturdido por la situación, se levantó rápidamente y trató de rechazar lo obvio.

—woobin, no es lo que parece —intentó explicar, pero sus palabras parecieron caer en un vacío ante la mirada intensa y herida del chico.

—cállate, allen —replicó woobin con un tono cortante.

en ese momento, allen comprendió que woobin se sentía traicionado.

hubo un silencio por unos segundos, un silencio que pareció eterno para todos hasta que woobin lo rompió.

—desde que llegaste, serim, te he tenido entre ceja y ceja... con tus métodos raros de enseñanza y ahora... para colmo también intervienes en mi vida personal. ¡me tienes harto!

serim miró a woobin sin inmutarse, el desprecio marcaba su rostro. se levantó con calma y contestó:

—que tú seas un anticuado no significa que mis métodos no sirvan... y uno no manda en el corazón tampoco. nos enamoramos y no lo elegimos... solo pasó.

la respuesta hizo hervir aún más la sangre de woobin. sin pensarlo dos veces, tomó a serim del cuello con una fuerza impactante y lo sacó bruscamente de la sala de profesores.

—¡ahora sí me las vas a pagar! —gritó furioso mientras cruzaban la puerta.

los ecos de su descontento resonaron intensamente y pronto se hicieron visibles en el patio del colegio donde ambos comenzaron a pelearse abiertamente. los alumnos se detuvieron al ver la repentina confrontación entre el profesor y el director, sus rostros reflejaban sorpresa e inquietud.

—¡woobin! ¡no! —gritó allen, en busca detener la confrontación.

todos los estudiantes habían salido impulsados por el chisme e intriga sobre lo sucedido. los murmullos y gritos llenaron el aire mientras miraban cómo woobin intercambiaba golpes con serim, quienes parecían también dos adolescentes peleando por un gran amor.

—¡yujin! te digo que no es lo que parece o sea... yo le estaba quitando una pestaña a hanbin del ojo.

—¡sí, sí!

—ajá y yo nací ayer —yujin se cruzó de brazos y vio a los dos adultos, indignado—¡qué es lo que sea traen!

—¡nada, te juro que nada! —habló zhanghao—. hijo, debes creerme.

—¡pues no lo hago!

y en ese instante, la puerta fue abierta de par en par impidiendo que la protesta del adolescente siguiera.

—woobin y serim se están matando afuera —dijo sangwoo.

—¿qué?

zhanghao se veía incrédulo y salió rápidamente de la oficina, observando con preocupación la escena. se acercó a toda velocidad y como pudo, separó a los dos hombres con ayuda de sangwoo.

—¡ya basta! todos a sus obligaciones... —dijo al psicólogo—¡todos a sus salones, ahora!

los alumnos obedecieron de inmediato y en ese instante, hao miró a los dos hombres muy molesto.

—¡qué carajos les pasa! —gritó—¡no pueden andarse peleando así como si fueran dos niños de kinder! son los adultos... los que deben dar el ejemplo a los alumnos ¿y hacen estas cosas?, ¿qué ejemplo están dando? me decepcionan. no me importa una mierda lo que pasó entre ustedes, pero es mejor que lo resuelvan como adultos y no como pendejos.