03: la estrategia de serim

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era martes temprano por la mañana y serim se levantó una hora antes para arreglarse, tendría una jornada laboral muy dura después del escándalo de ayer en su nuevo lugar de trabajo. no había tenido la oportunidad de dar clases como era debido, por ende, hoy sería "su primer día" de manera formal.

tomó las llaves de su auto y se subió, manejando en dirección a su lugar de trabajo. una vez llegó, estacionó al frente del lugar y se bajó, le dio los buenos días al guardia de seguridad y entró, caminando por el lugar hasta estar parado frente a la sala de profesores, contemplando la puerta por un par minutos.
finalmente, decidió entrar y el lugar era más amplio de lo que esperaba, parecía una especie de cafetería y a la vez biblioteca; llena de estanterías con libros, varias mesas con sillas en donde sentarse y casilleros para guardar sus pertenencias, plantas, máquinas de comida, de café y dispensador de agua.

tenía una vibra muy tranquila y vintage.

se acomodó los lentes y saludó a varios de sus colegas, se acercó a una de las meses y pudo observar a allen, revisando lo que parecían ser unos exámenes.

—buenos días, colega —serim lo saludó y allen lo vio sonriendo. —¿o no tan buenos?

—buenos, quiero que sean muy buenos.

—¡esa es la actitud! ¿me podrías hacer un favor?

—claro. ¿cuál?

—¿cuál de todos estos es mi puesto?

allen rió ante su ocurrencia.

—pues... su puesto es el de profesor de matemáticas y el jefe del salón 127 —bromeó. —. mentira, estaba bromeando —allen comenzó a señalar los asientos. —. este, este, este y este, cualquier asiento es el suyo, aquí no hay ninguno fijo.

—entonces, muchas gracias —serim se sentó a su lado y comenzó a revisar sus cosas. —. ¿y cómo estás?, ¿el sentimiento de culpa sigue ahí?

—no solo sigue ahí, ya me alcanzó y me está comiendo por dentro —respondió. —. no sé, me sigo sintiendo tan culpable de lo que le pasó a jungmo...

—colega, colega... eso habla muy bien de usted, de lo noble y buena persona que es. pero nosotros también como educadores y formadores de otras personas, no podemos culparnos cada que le ocurra algo a un estudiante y menos si se sale de nuestras manos.

—no, si eso lo sé, esa teoría te la dan en la universidad. pero en días como estos, siento que no sirvo para esto, que escogí la vocación equivocada y no sirvo para guiar a otros.

—¿sabes? —serim lo tomó de la mano. —, ayer fue jungmo, pero hoy puede ser otro de nuestros estudiantes y ahí si podemos hacer algo. nuestra tarea ahora es estar más pendientes, verlos de cerca y ayudarlos como podamos, porque muchos alumnos como jungmo pueden sentirse de la misma manera y necesitan una mano amiga. y bueno, ahí es donde entramos nosotros.

allen sonrió y asintió, sintiéndose algo mejor.

—gracias, personas como usted me hacen creer que no estoy solo en esta misión de crear gente de bien, me alegra que alguien como usted haya llegado aquí —allen apretó ligeramente su mano y escuchó el timbre sonar, informándole que ya era hora de recibir a los alumnos. —. bien, a trabajar.

—¿qué es esa alarma?, ¿hay que evacuar?

—sí, y rápido —allen tomó sus cosas y se levantó, seguido de serim. —. mentira, vamos a recibir a los alumnos ya que eso ayuda a fortalecer lazos entre estudiantes y docentes.

—¿si? me parece estupendo entonces.

allen y serim salieron juntos de la sala de profesores, siendo seguidos por sus demás compañeros y cada quien iba en su respectivo mundo

class 127 ⁕ drippin + cravity + zb1Where stories live. Discover now